Falleció Érica, internada desde el 3 de junio pasado, luego de que su expareja intentara matarla prendiéndola fuego en su precaria vivienda de la ciudad de Villa Gobernador Gálvez.

Érica era organizadora de un comedor popular y participaba de las movilizaciones por Ni una Menos. Había cumplido 37 años en el hospital donde permanecía internada con el 80% de su cuerpo quemado. Falleció a causa de una infección derivada de las mismas.

 “Érica temía que él volviera a atacarla si salía del hospital y contaba lo que pasó”, dijeron sus amigas (Rosario3, 12/8). Había realizado al menos tres denuncias por violencia de género contra su exmarido por maltrato. Convivía con él, quien la obligaba a dormir en el piso de la casa. No se iba porque no tenía otro lugar donde vivir con sus 5 hijxs.

Noelia Gutiérrez, su hermana, habló con Prensa Obrera durante la primera movilización y concentración que tuvo lugar en Villa Gobernador Gálvez para reclamar por la captura del agresor, en la que se ausentó todo el personal político del Estado. Allí denunció que el agresor la encerraba en el baño y la maltrataba, hasta que finalmente la roció con nafta y la prendió fuego.

 

Ni una Menos, el Estado es responsable

En lo que va de 2020, se contabilizan al menos 15 femicidios en Santa Fe, entre los que ahora contamos tristemente el de Érica. La cifra está subestimada mientras crecen las denuncias por violencia de género sin que aparezcan respuestas adecuadas de parte del poder político.

https://prensaobrera.com/mujer/justicia-por-julieta-del-pino-la-violencia-femicida-crece-al-amparo-del-estado/