Mujer

7/5/2021

Violencia de género en La Matanza: el cuento del 0800 y una secretaría al servicio del ajuste

Ante el aumento de los llamados al 144 nacional, se habilitó el 0800-999-PARÁ (7272).

El objetivo de inaugurar una línea local que funcione las 24 horas los 7 días de la semana, en palabras del intendente matancero Fernando Espinoza, sería el de dar una respuesta “más ágil y veloz” a las víctimas de violencia de género (Infobae 19/4). Esta decisión es, en primer lugar, el reconocimiento de la demora a la que se someten quienes intentan comunicarse con un 144 cada vez más saturado. Y, además, refleja la falta de decisión política para tomar medidas de fondo y revertir el incremento de la violencia, mientras la crisis económica y social golpea fuertemente a las mujeres.

Este “nuevo” 0800 se activó mediante un acuerdo con Movistar Empresas, que equipó el Call Center y ofrece un sistema para estandarizar los datos de las llamadas. No trascendió el costo de tal acuerdo con el municipio. Es decir que resulta desconocido con cuánto presupuesto contaría ahora la Secretaría de Mujeres para hacerle frente a las problemáticas que se presenten. No es un dato menor, ya que una exfuncionaria admitió en su carta de renuncia la falta de recursos y de transparencia a la hora de aplicar políticas.

El lanzamiento del servicio fue realizado por Espinoza junto a Liliana Hendel, titular de la secretaría. La línea municipal de asistencia y asesoramiento a las víctimas de violencia de género recibe picos de 100 llamadas diarias. En el primer mes y medio contabilizó unas 1.700.

Estos datos son difundidos por la propia secretaría como un paso adelante en la erradicación de la violencia, ya que, ante ese incremento de las consultas se estaría ofreciendo una respuesta inmediata que consiste en una derivación con profesionales que realizarían un seguimiento desde lo legal y psicológico. Sin embargo, el aumento en cantidad de llamadas representa, por el contrario, la falta de recursos concretos para afrontar la realidad de miles de mujeres que no tienen más opción que llamar a un 0800. Estamos ante la política del “barbijo rojo” de Elizabeth Gómez Alcorta y Alberto Fernández, transformado en línea telefónica.

La cantidad de llamados reflejan la necesidad de medidas efectivas frente a las problemáticas que atravesamos las mujeres y las diversidades matanceras. Un ejemplo claro es la dificultad de acceder a un subsidio económico y/o trabajo, ya que resulta necesario contar con recursos materiales para salir de una situación de violencia de género. En este sentido, se han comunicado plazos de hasta tres meses de espera para acceder al plan Potenciar Trabajo.

Las mujeres y diversidades suelen ser derivadas a centros de asistencia que son articulados con ONG’s y operan en el territorio, para ser evaluadas antes de ofrecerles esta herramienta. Si logran acceder a ella, los montos actuales difícilmente pueden construir alguna salida: el Potenciar Trabajo implica la mitad de un salario mínimo, vital y móvil de miseria. Por otro lado, no hay difusión local del Plan Acompañar, que fue anunciado a nivel nacional y presentado en La Matanza en un conversatorio con la coordinadora del mismo, y quienes lo piden se encuentran con criterios de lo más variados, tendientes a restringir el acceso.

Con respecto a las medidas de prevención, la secretaría ofrece paliativos para justificar su funcionamiento, tal es el caso de la capacitación a funcionarios. el propio Fernando Espinoza y su gabinete participaron de dicha propuesta. Se trata de medidas insuficientes que apuntan a la deconstrucción individual de las masculinidades que son presentadas como solución a la violencia que sufren las mujeres y diversidades.

Mientras, el intendente y Hendel siguen sin dar una respuesta a las trabajadoras de la salud, quienes cobran un salario básico de miseria y se encuentran luchando para defender sus condiciones laborales y salariales en el contexto de la segunda ola. Espinoza ha declarado con respecto al acierto de crear un 0800 local: “Cómo puede ser que hayan pasado tantos años y no se hayan tomado estas medidas antes”.

Eso mismo se preguntan las mujeres que se encuentran en la primera línea de lucha contra el Covid, las que pelean por el derecho a la tierra en La Matanza y solo reciben la represión y el amedrentamiento de la policía bonaerense, y las jóvenes piqueteras de los barrios más golpeados, que reclaman el acceso a la educación pública. Esa es la violencia que el gobierno municipal no está dispuesto a terminar.

El cinismo de estos funcionarios, al servicio del ajuste, debe enfrentarse con la organización independiente del movimiento de mujeres, que rechace cualquier organismo del Estado que se encuentre al servicio del recorte presupuestario y no defienda los reclamos más urgentes de las mujeres trabajadoras ocupadas y desocupadas.

Invitamos a todas las mujeres y diversidades sexuales y de género del distrito a sumarse al 2º Congreso del Plenario de Trabajadoras, el próximo 29 de mayo, para impulsar un plan de lucha por nuestras condiciones de vida y todas las reivindicaciones históricas.

Convocamos a  “la ola verde”, a quienes venimos de arrancar el aborto legal con la movilización popular, a seguir defendiendo la organización independiente del Estado, las iglesias y los partidos patronales que nos gobiernan desde hace décadas. El resultado de todos estos años de sometimiento a políticas de ajuste fue un 70% de pobreza en la población de mujeres, 70 femicidios, transfemicidios y travesticidios, en los primeros tres meses de 2021, y ninguna respuesta frente a las violencias que atravesamos cotidianamente.

¡Organizate con el Plenario de Trabajadoras- Partido Obrero!