Obituarios

22/11/2024

Adiós a un luchador piquetero, adiós a Guillermo Leyenda

“Changuito” tenía 58 años.

El lunes 18 de noviembre de 2024 murió en un hospital de la ciudad de Buenos Aires nuestro compañero Guillermo Osvaldo Leyenda. Estaba transcurriendo sus 58 años sin ningún tipo de complicaciones hasta que comenzó a sentirse mal, concurrió a la guardia, le diagnosticaron una pulmonía y a las pocas horas murió de un paro.

El “chango”, como le gustaba apodar a todo el mundo, tuvo una vida plena bastante activa. De joven le gustaba seguir a Boca Juniors y tuvo dificultades con algunas adicciones, pero mostrando una voluntad importante se internó y se recuperó. Solidario como siempre, pasó el resto de su vida ayudando a los demás a dejar los consumos problemáticos como guía en centros de recuperación.

En su paso por el PO, Leyenda no fue un militante más. Aunque todos tienen sus particularidades, se destacaba por su audacia en las acciones de lucha. También por su carisma a la hora de relacionarse con los trabajadores y por su entrega total en la resolución de los problemas cotidianos que acosan a las masas empobrecidas. Siempre a la cabeza de la seguridad enfrentando la represión, como en las luchas de la fábrica recuperada Bruckman, el desalojo del edificio ocupado del Padelai o el de Sasetru.

Después de un paso por el MST se acercó al Partido Obrero de la capital al calor del Argentinazo (2001-2002) y en particular de la lucha por la vivienda. Primero como activista de las casas ocupadas, como “Sarandí”, y luego como un gran dirigente barrial en la Villa 20, donde a pesar del paso de los años hoy sigue siendo recordado. También fue el máximo constructor de las cooperativas de vivienda del Polo de Capital, organización de lucha que permitió a cientos de compañeros conseguir una vivienda digna dentro de la ciudad.

Participó como principal dirigente de la ocupación de la Manzana 30 en la villa 20, un proceso anterior a lo que fue la ocupación del barrio Francisco I. En esta ocasión participó de la división de hasta el último metro de tierra, con el objetivo que ningún vecino sea damnificado y las cosas sean iguales para todos. Cuentan las anécdotas de los protagonistas que incluso respondía el teléfono a la madrugada para intervenir en estas disputas y solucionarlas con un saldo positivo para el conjunto de la organización.

Participó de incontables tomas y movilizaciones en Promoción Social Capital, donde se consiguieron muchísimas reivindicaciones como bolsones de comida, subsidios habitacionales y hasta documentación definitiva para los inmigrantes. Con la gran lucha del Polo de la Capital en 2004-2005 se conquistaron puestos genuinos de trabajo en la municipalidad de Buenos Aires. Como el “Chango” estuvo a la cabeza de los piquetes y ocupaciones, fue electo en asamblea, junto a otros dirigentes, para ingresa en esos puestos.

En este marco ingresaron compañeros piqueteros a trabajar como tercerizados para obras públicas en la ciudad. Pero cuando Macri ganó las elecciones la continuidad de estas fuentes de trabajo se puso en duda. Leyenda tuvo un rol fundamentar en las asambleas donde la burocracia de Genta no quería luchar, interpelando cara a cara a los burócratas y desenmascarando su juego. También en la ocupación del taller Barbastro a fines de 2008 frente a las amenazas de cierre. No solo se defendieron los puestos de trabajo, sino que se logró el pase a planta permanente de todos los compañeros y el pase a otro sector con un salario más alto.

Los que tuvimos el honor de luchar con él y de aprender de sus virtudes, lo recordamos y nunca lo olvidaremos. El Polo Obrero, en particular el de la Capital, organización que él junto a muchos otros puso tanto empeño en construir, hoy goza de una enorme vitalidad. Esto es gracias al aporte de su generación, como de las posteriores. Esta enorme experiencia de lucha de casi 24 años nos permite soportar hoy los ataques del gobierno facho de Milei y la Justicia, y nos prepara para jugar un rol destacado en los grandes enfrentamientos que vendrán en la lucha de clases.

Abrazamos a sus familiares, a sus cuatro hijos, a su madre y a su compañera.

Decimos Guillermo Osvaldo Leyenda, “Changuito”, ¡hasta la victoria siempre! ¡Carajo!

4.000 kilómetros de organización y lucha por el Fuera Milei
Bitácora de un largo viaje por el norte del país. –
prensaobrera.com