Partido

29/9/2023

Exitoso curso del Estado y la Revolución en Mar del Plata

Nos preparamos para los desafíos que se vienen.

Foto: corresponsal

El Partido Obrero de Mar del Plata acaba de culminar la realización de un curso de formación política y teórica en el que se abordó la concepción marxista del Estado, la cual se encuentra en el celebre libro de Lenin titulado “El Estado y la Revolución” y en otros escritos de Marx y Trotsky.

El curso, que se realizó en 3 clases, contó con la participación de más de 30 compañeres del Polo Obrero, de la juventud y de compañeres de distintos gremios. Muches de elles participan desde hace poco de reuniones partidarias y otres se están acercando o se han incorporado al calor de la militancia y la lucha. Todes elles realizaron por primera vez este curso. Para un partido de la clase obrera que pretende pelear por el poder es fundamental la formación política-teórica de la vanguardia que lucha en el movimiento piquetero, sindical, de la juventud; analizar el desarrollo histórico con un método científico (materialismo histórico) y divulgar las ideas del socialismo.

Un debate con enorme vigencia en la presente etapa

Al calor de la avanzada derechista a nivel nacional y de la ofensiva antiobrera del gobierno –y cuando se coloca fuertemente el problema del fracaso del Estado y el régimen democrático para satisfacer las necesidades mas elementales de la población–, dimos impulso a este curso. Sirve para polemizar con los planteos del facho de Milei, que pretende mostrarse como alguien que quiere “disolver el Estado” y terminar con su “casta” ocultando el carácter del Estado, su naturaleza, y por lo tanto el del personal que lo gestiona.

Con el curso se buscó explicar cómo en realidad los únicos que realmente luchamos por la destrucción del Estado capitalista y por poner en pie una nueva sociedad somos los revolucionarios socialistas. Esta lucha solo puede librarla la clase trabajadora dirigida por el partido revolucionario; primero deberán establecer un gobierno de los trabajadores. Los socialistas luchamos a nivel global por la causa de los trabajadores y los oprimidos; y por abrir camino a la verdadera libertad, que solo puede existir en una sociedad sin explotadores ni explotados.

El debate sobre el Estado en la actualidad siguió una línea histórica. Los compañeros pudieron ver, a través de la misma, que el Estado no existió siempre; que adoptó varias formas de acuerdo al modo de producción imperante en cada etapa histórica, el cual está determinado por el desarrollo de las fuerzas productivas y las relaciones sociales que se establecen entre los sujetos. Se estudiaron las características específicas del Estado burgués y también cómo esta maquinaria que garantiza la explotación de una clase sobre otra domina políticamente a los trabajadores. Y se explicó cómo la democracia burguesa se presenta como un régimen igualitario, ocultando su carácter social y la “dictadura del capital” que fundamentalmente se vive en los lugares del trabajo.

Se concluyó en que el sistema capitalista no puede garantizar el bienestar de la humanidad y ya cumplió su misión histórica; y en que por lo tanto tiene que ser reemplazado por otro régimen social. Las condiciones materiales están dadas para que no existan ni explotados ni explotadores; la lucha por suprimir la división de la sociedad en clases sociales está en manos de la clase obrera. Esa es la lucha por el socialismo.

En el curso, además, vimos las experiencias, los triunfos y los fracasos de la clase obrera y de los partidos revolucionarios en la lucha por el socialismo y el gobierno de los trabajadores. Abordamos la experiencia de la Comuna de París (1871) y de la Revolución Rusa (1917); cómo fueron los gobiernos obreros y sus avances. Vimos lo que implicó la revolución socialista en términos de desarrollo de las fuerzas productivas, de planificación de la producción, y en terrenos como el de la lucha de la mujer (legalización de la interrupción voluntaria del embarazado y separación de la Iglesia del Estado).

También abordamos los motivos de su fracaso, la burocratización del Estado soviético y las conclusiones de León Trotsky acerca de cómo luchar por una revolución política para barrer con la casta burocrática de Stalin para evitar una restauración del capitalismo como finalmente ocurrió.

En la última clase se vio la vigencia de la lucha por el socialismo en el marco del contexto actual de guerras imperialistas, de rebeliones populares en muchos países y de regímenes políticos capitalistas (democráticos, nacionalistas, etc) agotados históricamente. Hicimos un balance del fracaso de los últimos cuarenta años de gobiernos peronistas y radicales. Realizamos una crítica al peronismo, que nos llevó a esta situación de pobreza y miseria y de crecimiento de fuerzas políticas de derecha y fascistas.

Contra lo que dicen los “libertarios”, el socialismo no es un cúmulo de estatizaciones, sino un proceso de lucha internacional por la emancipación social de la clase obrera y los oprimidos y por la abolición del Estado protagonizado por la clase obrera y sus partidos. Por lo tanto, la conclusión de conformar un partido obrero, no solamente en Argentina sino a nivel mundial, para luchar por el socialismo y el gobierno obrero; y de preparar y formar a una vanguardia, es muy importante. Esta formación también se lleva adelante en la lucha en los barrios, en las fábricas, en las calles. Es clave formar una conciencia revolucionaria en nuestros militantes.

La lucha, la formación teórica y la actividad práctica tienen que reforzarse con la militancia, con la lectura de estas experiencias, con el aprendizaje del materialismo histórico como método de análisis y con una elaboración teórica-marxista que aborde los problemas y las luchas actuales. Así forjamos un partido de cuadros políticos.