Políticas
11/6/2024
Bajan a Mondino del avión, sigue la crisis de gabinete
La crisis política que tiene el gobierno se acrecienta.
Seguir
El impacto de la crisis mundial en Argentina.
La crisis política que tiene el gobierno de Milei se acrecienta. A la vorágine fue arrastrada ahora Diana Mondino, la canciller, que no participará de la cumbre del G7 a la que concurrirá el presidente. En su lugar irá Karina Milei, que gana peso en la camarilla oficialista y viene de sacarle la Agencia de Promoción de Inversiones a Cancillería.
La Agencia de Promoción de Inversiones, que hasta ahora dependía de Cancillería, pasará a estar en manos de la Secretaría General de la Presidencia, presidida por la hermana del mandatario. Gracias a esta maniobra, Karina podrá enchufarle los gastos de los viajes presidenciales a Cancillería. Esto, en momentos en los que Milei viene de ser denunciado por utilizar fondos públicos para asistir a un acto del partido ultraderechista español Vox.
Así, la no participación de Mondino en el cónclave del G7, organización conformada por algunas de las potencias capitalistas más poderosas del mundo, se inscribe en un cuadro de acumulación de tensiones en el armado camarillesco del oficialismo. Recordemos que varios analistas adjudicaban la salida del exjefe de Gabinete, Nicolás Posse, tejedor clave de los vínculos con Estados Unidos y hombre de lazos con la CIA, por su cercanía con el demócrata Joe Biden. Esto, cuando Milei se juega abiertamente por un retorno del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales norteamericanas por venir.
El último episodio de crisis con Mondino ocurrió cuando el presidente se bajó a último momento de una reunión que la canciller tuvo con 19 embajadores de países árabes, por la presencia de un funcionario de la embajada de Palestina. Es que Milei apoya fervorosamente la política de limpieza étnica que el Estado de Israel está llevando adelante contra la población gazatí, que ya dejó más de 37.000 muertos; hasta se diferenció de la reciente posición de los yanquis de promover un alto al fuego temporal y un intercambio de rehenes.
Mondino ha venido tratando de reducir los daños que Milei produce a las relaciones entre China y Argentina. Por ejemplo, negó que la base espacial que está emplazada en Neuquén fuese una sucursal militar que responde a los jerarcas del PC chino. El presidente, entretanto, avanzó en un alineamiento proyanqui con Taiwán, país por cuyo dominio pelean China y Estados Unidos; tal vez el tema más sensible para Beijing.
Las consecuencias podrían ser inmediatas, ya que si China no renueva el swap (intercambio de monedas) el BCRA tendrá que devolver 5.000 millones de dólares más intereses por haber activado ese préstamo, en un contexto de caída de sus reservas internacionales. Lo mismo vale para la negociación de los créditos para la finalización de la represas de Santa Cruz e incluso buena parte del comercio exterior argentino que depende de las relaciones con el gigante asiático.
Argentina no puede sustraerse a la crisis capitalista internacional ni a las disputas por el mercado mundial protagonizadas por las principales potencias, que son un resultado de ella. Los yanquis y los chinos tienen apetitos económicos en el país y luchan por ellos. A esta pelea, asimismo, se suman capitales europeos y japoneses. En este sentido, Estados Unidos viene de frenar la licitación de la Hidrovía, una arteria por donde pasa el 80% del comercio argentino, para que no sea usufructuada por empresas chinas.
La crisis mundial, caracterizada por guerras, crisis políticas, y convulsiones económicas y sociales, golpea las bases de sustentación del gobierno libertario. En un cuadro de descenso de las inversiones en el planeta, producto de la caída de la tasa de ganancia del capital, es en extremo difícil que Argentina logre captar fondos que le permitan ir hacia un despegue económico que a su vez le sirva al gobierno para fortalecerse.
Los trabajadores debemos aprovechar esta crisis por arriba para irrumpir por abajo con nuestros propios reclamos.
