El dirigente sindical del gremio de gastronómicos, Luis Barrionuevo, volvió a dar detalles de los acuerdos que viene gestando con Javier Milei, tanto en el apoyo con el aparato gastronómico para las próximas elecciones, como de respaldo para un eventual gobierno “liberal” que impulse reformas antiobreras. Ahora, el histórico dirigente de la peor casta sindical señala la existencia de un pacto para que Milei le entregue los planes sociales a la burocracia sindical, al servicio de más precarización en los gremios.

Según Barrionuevo, estaría pactado con Milei que los gremios se encarguen de “administrar” los planes sociales y a sus beneficiarios para terminar con el “arreo” de las organizaciones sociales y piqueteras y “darles inserción” en el mercado laboral a los trabajadores desocupados.

Las palabras de Barrionuevo implican una impostura en toda la línea. Provienen de una burocracia sindical que le ha dado sistemáticamente la espalda a los trabajadores desocupados y que es cómplice del ajuste y los despidos en el mercado laboral. Además de una política de precarización laboral para garantizarle mano de obra barata a las patronales que rabian contra los planes sociales.

El fracaso del empalme y la reforma laboral

La tesis de que los trabajadores precarizados del Potenciar Trabajo se reinsertarán en el mercado laboral de la mano de los gremios y las exenciones impositivas a las patronales ya ha sido enterrada por la experiencia.

El propio Barrionuevo es un ilustre repetidor de este fracaso. En 2017 fue uno de los primeros en suscribir al Programa Empalme del macrismo, con la promesa de generar 800.000 puestos de trabajo: un rotundo fracaso que solo redundó en un mayor crecimiento de los programas sociales.

Bajo el gobierno actual, Barrionuevo volvió a suscribir un acuerdo de iguales características para la inclusión laboral de apenas 4.000 trabajadores. Para casi mediados de este año solo el 3% de los beneficiarios del Potenciar Trabajo había logrado obtener un empleo registrado.

La propuesta de Barrionuevo y Milei no va de la mano de la generación de trabajo genuino, sino de su destrucción. Barrionuevo volvió a precisar que acompañará una reforma laboral de Mieli y las patronales que extienda el régimen de Fondo de Desempleo de la construcción, empezando por aplicarlo en su propio gremio: “El gremio de los gastronómicos nos estamos adecuando (…) Los gastronómicos vamos a implementar el seguro de desempleo. El fondo de despido que tiene la Uocra”.

La inserción laboral de los trabajadores precarizados del Potenciar Trabajo sería sobre la base de una destrucción de las condiciones de empleo formal existentes, el abaratamiento de los despidos futuros y, por supuesto, una baja salarial generalizada producto de una mayor oferta de mano de obra sin un piso salarial real de referencia como alternativa para los trabajadores.

Recordemos que se trata de la misma burocracia sindical que recientemente impulsó la desindexación de los programas sociales al salario mínimo, como punto para que las patronales puedan deprimir aún más las condiciones mínimas de contrataciones, particularmente en industrias como la construcción y gastronómicos donde se impone la informalidad y el fraude laboral.

Barrionuevo habla de “arreo” de los trabajadores desocupados para hacerse de los programas sociales y ponerlos al servicio de las patronales, lo que de pasada le permitiría crear y gestionar un nuevo kiosco con la administración de los beneficios que dicha “integración” podría reportar para las patronales en un contexto de despidos exprés.

La casta sindical con la que pacta La Libertad Avanza da cuenta de la naturaleza política del gobierno que quieren imponer de ganar las elecciones presidenciales. Donde los trabajadores serán puestos en las manos de un confeso “alcahuete” de los políticos capitalistas, las patronales y los ajustadores.

La única inclusión laboral posible en defensa de los trabajadores solo puede darse con la ampliación de los derechos laborales, y no con la liquidación de estos, algo que requiere en primer término de la unidad trabajadores ocupados y desocupados en su lucha contra las patronales y por el trabajo y las condiciones laborales. Un planteo que desenvuelve la Unidad Piquetera y el Frente de izquierda Unidad, en un cuadro electoral donde los candidatos patronales acuerdan la perspectiva de fondo de un ajuste mayor sobre los trabajadores.

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