Políticas

11/1/2024

Ecuador: el narcotráfico y la dolarización

Un spoiler de la política que impulsan Milei y Patricia Bullrich.

Narcotráfico.

Luego de la fuga de “Fito”, el líder de un cartel mexicano llamado “Los Choneros”, los narcotraficantes sembraron terror en el país tomando las instalaciones de un canal de televisión y el control de las cárceles mediante motines, manteniendo cautivos a los oficiales y el resto del personal que se encontraba trabajando en las mismas, e incluyó balaceras, asesinatos, secuestros, vehículos incendiados y coches bomba.

No es el único caso: en la madrugada del martes, un motín en una cárcel permitió la fuga de 39 detenidos, entre ellos Fabricio Colón Pico, el jefe de la banda “Los Lobos”. Luego de declarar el estado de excepción y sacar a las Fuerzas Armadas a la calle, bajo la premisa de que el país se encuentra en “un conflicto armado interno”, el presidente, Daniel Noboa, reconoció que la dolarización es un caldo de cultivo para que prolifere el crimen organizado.

Este proceso se abrió a partir de los 2000. La dolarización vendría a combatir la inflación, sin embargo, devaluó exponencialmente los ingresos de la población, contribuyó a la desindustrialización (y con ella a la crisis de empleo), la primarización de la economía y transformó al país en un paraíso para capitales golondrinas que financian el narcotráfico, porque facilita el lavado de dinero de las organizaciones criminales.

Resulta notorio que, en Ecuador, el sector de más alto crecimiento de los últimos años fue el bancario, en una economía que en términos reales tiene menor empleo formal que el de 2019. Sucede que el sistema financiero es uno de los principales cómplices de este tipo de negocios espurios. Gracias a eso es que los cárteles pueden operar dentro del país e incluso girar dinero al exterior, sin hacer operaciones de cambio y sin rendir cuentas de dónde proviene.

También lo es la privatización de los puertos, carentes de cualquier tipo de control, lo que viabiliza la venta de drogas al exterior. Así, Ecuador se ha convertido en un país de tránsito, transporte, acopio y envío a los mercados internacionales a través de la contaminación de las exportaciones formales y eso le da la ventaja a las organizaciones criminales de producir en pesos o en soles, y luego llevar la droga a un mercado en dólares, con una cotización en dólares a los mercados europeos.

Sin ir más lejos, el puerto más activo de Europa anunció recientemente el descubrimiento de casi 9 toneladas de cocaína ocultas en un cargamento de plátanos proveniente de Ecuador, donde el padre del presidente es el magnate bananero del país, lo cual no es menor. La semana pasada, los Países Bajos anunciaron la incautación récord en Rotterdam, el mayor puerto de Europa, de cocaína procedente de Ecuador por valor de 660 millones de dólares.

Lejos de ser esta una “respuesta al aumento de la presión del gobierno sobre los grupos criminales”, como quisieron instalar algunos voceros oficiales, el Estado ecuatoriano es el principal impulsor del narcotráfico en el país, no solo implementando medidas como la dolarización, sino también empobreciendo a la población, dejándola vulnerable frente a la cooptación por parte del narcotráfico; incluso desarticuló el aparato de la inteligencia militar que había armado para hacerle frente al crimen organizado, como hizo Lenin Moreno en el 2017 en el marco de un fuerte ajuste fiscal para pagar deuda externa; un sistema penal superpoblado, carente de cualquier tipo de reinserción laboral, corrupto (muchos policías, militares y funcionarios de prisiones han estado vinculados al tráfico de drogas) y mal financiado, se ha convertido en un caldo de cultivo para las bandas de presos que se han aliado con poderosos cárteles de droga, y los vínculos entre bandas de narcotraficantes y funcionarios del gobierno y políticos que reciben tajada por estos negocios son algunas de las aristas que impulsan este tipo de crimen organizado.

En Argentina, el presidente, Javier Milei, presentó un DNU y una Ley Ómnibus que aspiran, en primer lugar, a desregular el mercado con la perspectiva declarada de Milei de ir hacia una dolarización, favoreciendo escenarios como el de Ecuador, donde el narcotráfico opera bajo el amparo estatal y del sistema financiero, sin ningún tipo de control. A su vez, promueve un cambio en el régimen de financiamiento de los partidos políticos, eliminando los límites que este tiene y poniendo la corrupción se pone a la orden del día. Las bandas narcotraficantes podrán financiar completamente la campaña de cualquier partido político, garantizando que sus intereses se vean representados, algo por lo cual algunos referentes de La Libertad Avanza ya tienen denuncias, como es el caso de Espert.

Al mismo tiempo, este paquete de medidas agravarán la aguda crisis económica y social existente, lo cual empujará cada vez más a la población, sobre todo a la juventud, a encontrar una salida en el crimen organizado, el cual opera principalmente en las villas y los barrios bajos de la ciudad.

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, hizo toda su campaña sobre las políticas implementadas por su gestión para combatir al narcotráfico, una mentira que se echa por tierra solamente viendo a ciudades sitiadas por el narcotráfico como Rosario, o incluso barrios de la Capital Federal como Constitución. Sin embargo, luego de asumir, sus medidas fueron orientadas pura y exclusivamente a sacar de la calle a quienes protestan contra el hambre y la miseria en la que este gobierno y todos los anteriores nos hundieron, mientras los pibes en las barriadas siguen muriendo a mano de choques entre bandas narco.

Este tipo de políticas, orientadas a otorgar beneficios a los capitalistas, son contrarias a los intereses de la población, la cual vela por preservar sus condiciones de vida. Estas se ven vulneradas en materia económica y de seguridad por el fortalecimiento del crimen organizado, el cual opera bajo tutela del Estado. La única manera de terminar de sacarse de encima el yunque del narcotráfico es terminando con los gobiernos que nos trajeron a esta situación, y reorganizar al país sobre nuevas bases sociales, nacionalizando el comercio exterior y el sistema financiero bajo control obrero.

https://prensaobrera.com/politicas/lo-que-dejo-el-primer-mes-de-milei-devaluacion-decretazos-y-ajuste