Este fin de semana se desarrollaron multitudinarios actos del Partido Obrero en Córdoba, Neuquén, Mar del Plata, Rio Negro, Salta y San Juan, bajo la consigna “Abajo los políticos capitalistas. Pongamos en pie un nuevo movimiento popular con banderas socialistas”. La iniciativa es parte de una agenda nacional de actos, la cual tendrá su epicentro el sábado 29 en Plaza de Mayo.

El acto en Córdoba tuvo una participación de 12 mil luchadores: referentes del Sutna, el Polo Obrero, la docencia provincial y municipal. En la ciudad de Mar del Plata movilizaron 1500 compañeros, con la presencia de delegaciones de toda la zona (Tandil, Villa Gesell, Santa Clara, Necochea y Miramar) lo que revela un salto mayúsculo en el desarrollo organizativo y político. En Neuquén capital se reunieron 3000 luchadores entre trabajadores de la educación, ceramistas, elefantes de la salud, estatales, miembros de comunidades mapuches, artistas y una destacadísima presencia del Polo Obrero. En San Juan, con 500 compañeros, el acto significó un salto cualitativo en la intervención de la izquierda sanjuanina y particularmente del Partido Obrero. En Fiske Menuco (General Roca), Río Negro, se realizó un acto con la participación de más de un centenar de compañeros y compañeras.

Todos estos actos son precedidos por campañas de agitación política en los lugares de trabajo, las barriadas, los lugares de estudio. Son tan masivos, en un punto, porque en ellos estuvieron representadas las principales luchas obreras y populares del último periodo, las cuales el Partido Obrero impulsa y refuerza. Como el Polo Obrero, que lleva adelante una gran lucha contra el hambre, o los trabajadores del Sutna que vienen de una conquista histórica que marca el camino para todos los trabajadores; docentes provinciales y universitarixs, prestadores precarizadxs y otros trabajadores de salud en lucha, compañeros de pueblos originarios, activistas ambientales, como así también una enorme representación de las mujeres y diversidades que vienen de participar del Encuentro Plurinacional en San Luis.

Estas últimas semanas el Partido Obrero fue blanco de enormes ataques que reunieron la fuerza de todo el elenco patronal: cámaras empresariales, los principales medios de comunicación, los gobiernos, el oficialismo, la oposición, la Justicia y la burocracia sindical. Es el caso de la lucha de los trabajadores del neumático, a la que los periódicos acusaban de “salvaje” y de representar “intereses partidarios” del PO, dado que Alejandro Crespo es dirigente de nuestro partido. Lo mismo, al caso, con los ataques al movimiento piquetero y los desocupados, con diatribas a nuestro dirigente Eduardo Belliboni. Una campaña de guerra de los ajustadores contra los que enfrentamos el ajuste.

La crisis del peronismo que quedó expuesta en los actos del 17 de octubre tiene, como ya señalamos, un carácter histórico. El Frente de Todos de Massa, Alberto y Cristina ha puesto al pueblo trabajador de rodillas frente al FMI, acompañado por la oposición derechista de Juntos por el Cambio, como se ve expresado en el acuerdo del presupuesto 2023. “Fuera los políticos capitalistas”. Esta última tiene el valor de repudiar a los dos grandes bloques que se turnaron para gobernarnos en las últimas décadas y nos arrastraron a esta catástrofe, pero repudia también a los fenómenos que se presentan “novedosos” ante la crisis política y el descrédito popular con los gobiernos, como los “liberales”, que en los hechos vienen con figuras y políticas recicladas que ya fracasaron.

La izquierda debe tomar nota de esta situación y sacar todas las conclusiones. De lo que se trata es de valerse de esta crisis para formular un planteo de superación del peronismo, poniendo en pie un movimiento popular con banderas socialistas. Para ello reforzar la organización de la juventud, de los trabajadores ocupados y desocupados, en cada barrio. Vamos al acto central en Plaza de Mayo el 29 de octubre y a los actos masivos en la mayoría de las provincias del país.