Políticas

18/11/2022

El Ahora 30 no saca el consumo del freezer

Los salarios caen en picada y ponen en jaque la capacidad de compra y endeudamiento de los consumidores.

El Ahora 30 no logra revertir la caída del consumo.

La inflación continúa en niveles récord y el programa Ahora 30 para electrodomésticos no logra revertir la caída del consumo, así lo informan las principales firmas. Esto es principalmente producto de la pulverización de los salarios, lo que pone en jaque la capacidad de compra y de endeudamiento de los consumidores, y es algo que el gobierno viene reforzando con sus políticas.

Incluso a pesar de que la tasa de financiamiento es menor a la tasa de referencia del mercado, esa tasa implica que el recargo sobre el precio sea casi del 100%, por eso muchos consumidores prefieren pagar en efectivo, utilizar las cuotas sin interés o los descuentos como los que aparecen en el CyberMonday, sobre todo porque las empresas incorporaron la diferencia entre las tasas al precio del producto, sobre el que luego ofrecen la financiación. Además no todos tienen límites en las tarjetas que alcancen para cubrir el costo de los productos, y las entidades financieras no actualizan estos topes producto de que los ingresos no acompañan las subas de precios. “Nunca nos había pasado que más de la mitad de los rechazos sean por el tema del límite”, precisó uno de los ejecutivos (Infobae 18/11).

A esta realidad se le suma el hecho de que muchos consumidores tienen las tarjetas pasadas de cuotas, porque la inflación ha logrado que hasta los alimentos tengan planes de pago, lo que achica aún más el margen para seguir consumiendo y lleva a elegir entre comer o comprar una televisión para mirar el mundial. En tanto, los otros programas como el Ahora12 o Ahora18 aumentaron sus tasas de interés para que los bancos acepten financiar este programa a una tasa menor que la del mercado. Un favor a la banca que pone otro palo en la rueda al consumo de los trabajadores y refuerza la recesión. De esta forma, el gobierno mantiene altas las tasas de interés y continúa pagándole millonadas de intereses a la banca, mientras los trabajadores no podemos comprar un aire porque es carísimo financiarlo.

Lo que necesitamos es la recomposición de nuestros salarios. Tal como hizo el Sutna y continúan haciéndolo los residentes, la pelea estratégica que tenemos por delante para poder gastar algo del bolsillo a fin de mes es luchar por paritarias que superen la inflación. Y es precisamente lo que busca desviar el gobierno, al que esta última le reporta un negocio redondo para engrosar la recaudación fiscal por la vía de los impuestos al consumo.