“La promoción 97 del Colegio Militar rindió en sus instalaciones un homenaje ‘a los caídos en la lucha contra la guerrilla marxista’ y se descubrió una placa alusiva en ese sentido aunque aún no fue colocada.”, informa la agencia Télam (18/10).

En el acto, realizado el pasado 14 de octubre, los egresados de la institución homenajearon de esta manera a los militares Héctor Cáceres y Carlos María Casagrande, partícipes del Operativo Independencia.

¿Qué fue el Operativo Independencia?

El Operativo Independencia fue decretado por el gobierno de Isabel Martínez de Perón en 1975, con el objetivo de vencer la insurgencia obrera que no había podido contener la vuelta de Perón en 1973. Con la excusa de combatir un foco guerrillero del Ejército Revolucionario del Pueblo, se envió al Ejército para ocupar la provincia de Tucumán.

Por el asesinato masivo de activistas, la existencia de campos de concentración y tortura y la aplicación del terrorismo estatal sobre el conjunto de la población, el operativo es considerado un adelanto del plan sistemático de genocidio de la dictadura.

En la actualidad, se lleva adelante un megajuicio a los genocidas participantes. Isabel Perón, sin embargo, se encuentra fuera del banquillo de los acusados. 

Por su parte, el ex funcionario kirchnerista César Milani fue citado recientemente a indagatoria por parte de la Justicia riojana, por su vínculo con el operativo.

Agua para que naden los peces

Desde el Ministerio de Defensa, negaron tener conocimiento del acto en el Colegio Militar (ídem). El contenido del mismo, sin embargo, está en sintonía con las políticas de impunidad para los genocidas (“reconciliación”) fomentadas por el gobierno nacional. De hecho, el reciente desfile militar por el Bicentenario de la Independencia contó con la presencia de los veteranos del Operativo Independencia.

El episodio del 9 de julio, a su turno, estuvo a tono con el cuestionamiento del ex funcionario macrista Darío Lopérfido al número de desaparecidos, las reuniones del secretario de derechos humanos Claudio Avruj con familiares de genocidas y el restablecimiento de la “teoría de los dos demonios”.

El macrismo apunta, asimismo, a reincorporar a los militares en la represión interna, para dirigirla en especial contra quienes enfrentan el ajuste en curso.

En ese cuadro, los epígonos del genocidio se sienten a sus anchas.