Políticas

23/4/2023

“Es una lucha política contra un sistema judicial perverso y las instituciones que deben velar por los derechos de nuestros hijos”

Dialogamos con Ivana Galdeano, tras la 5ta Mesa Nacional Contra el Abuso Sexual a Infancias y Adolescencias.

En el Museo de Antropología de Córdoba.

El viernes 21 de abril, en el Museo de Antopología de la ciudad de Córdoba, se llevó adelante la 5ª Mesa Nacional de lucha contra el abuso sexual a infancias y adolescencias. Durante cuatro horas madres protectoras, sobrevivientes y especialistas desarrollaron sobre esta grave problemática. Como antesala, por la mañana se realizó un pañuelazo en el Palacio de Justicia de la provincia.

También participó de la mesa nuestra diputada nacional Romina Del Plá, quien ha elaborado un proyecto de ley integral con el objetivo de implementar medidas de prevención, protección y asistencia a los niños, niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual y violencia, así como a las personas sobrevivientes de dicho delito y a las madres protectoras y personas que los defienden y acompañan.

Hay que destacar que desde que se constituyó la Mesa, en 2022, es la primera vez que sale de la circunferencia del Congreso Nacional y se realiza en una provincia vecina. Un hecho muy oportuno, cuando en Córdoba hay “una larguísima lucha por las tremendas violencias que sufrimos mamás, que sufren las infancias, las adolescencias y todo aquel que pretenda que los derechos de niños, niñas y adolescentes sean garantizados”, tal como se expresó durante la apertura, poniendo de relieve los casos de Flavia Saganías, Gilda Morales, Sathya Aldana; así como los abusos en los establecimientos educativos Collegium, La Casita del Hornero, Juan Gaviota, Jardín de Parque Santa Ana, el IPEM 387 de Agua de Oro, el jardín de Coronel Olmedo y las recientes denuncias en el Jardín de infantes Primera Junta.

No es un dato menor la presencia policial, que desde temprano llenó de vallas la vereda del museo, apartando a la comunidad que circulaba como si la mesa se tratara de un grupo de delincuentes, o como si el debate no tuviera que ver con una forma horrorosa de violencia que nos interpela y nos daña profundamente como sociedad. El cierre se tiñó de cántico y de rojo, con un gran pañuelazo al grito de “Yo sí te creo”.

Con la intención de integrar el abordaje de la jornada, Prensa Obrera dialogó con Ivana Galdeano, de “Akelarre Feminismo Popular”, una de las organizadoras de esta 5ª Mesa.

A modo preliminar, Ivana indicó que “en todas sus instancias, a lo largo y a lo ancho del país, está claro que los operadores judiciales y quienes deben fallar con perspectiva de género y de infancia, no lo hacen. Puede ser por falta de formación, puede ser por un cambio cultural que todavía no ha transcurrido, pero en gran medida sucede que la Justicia actúa de manera corporativa y mafiosa, y se abroquela sobre sí”. Y agregó: “Son innumerables los casos de mamás protectoras que dan cuenta que cuando llegan a las instancias de pericias psicológicas o físicas, quienes hacen las pericias de repente no ven los indicadores físicos que los médicos habían visto; las psicólogas del Estado, las peritos oficiales, muchísimas veces terminan aplicando el Síndrome de Alienación Parental (SAP) porque básicamente cuando lxs niñxs tienen la posibilidad de hablar -que no siempre la tienen-, no siempre pueden hacerlo como la Justicia espera en términos de pruebas. La Justicia espera que las niñas puedan dar cuenta del lugar y el momento en el que acontecieron los hechos; y si una situación de abuso es atrozmente traumática para una persona adulta, ¡imagínense para un niño que tiene que responder como si fuera un adulto en una Cámara Gesell! En muchos casos esas cámaras se aplican en el ‘período de retractación’, que es generalmente cuando los niños después de hablar pasan a negar lo que dijeron, a decir que no es verdad, porque empiezan a vislumbrar los efectos familiares que eso tiene; muchas veces las cámaras se utilizan en ese momento en que el niño no puede, no quiere, no sabe cómo, no está dispuesto a hablar”.

“Tenemos una Justicia que no escucha a las psicólogas de las niñas y a las madres, porque somos las mujeres quienes en la mayoría de los casos nos hacemos cargo del cuidado de las infancias. Las madres protectoras muchísimas veces son las únicas o las primeras en escuchar al niñe, las que siempre creen en la palabra de sus hijes y las que notan los cambios de comportamiento. Hay informes de psicólogas de parte que dan cuenta de esos cambios de comportamiento, dan cuenta de los indicadores de abuso sexual en las infancias, y los peritos oficiales y la Justicia desoyen absolutamente estas pruebas y empieza a sugerir que las memorias de los niños están influenciadas por la madre. Es decir, como la Justicia no puede recabar pruebas adultocéntricas, empieza a decir que quien ha inventado el relato del niño es la madre, porque es la que sostiene la protección del niño, y entonces lo que la Justicia hace de manera sistemática, en todo el país, es una persecución contra las madres protectoras”.

Persecución 

“Claramente, después de que el niño habla, la madre protege al niño, y en la enorme mayoría de los casos de abuso intrafamiliar son los mismos progenitores quienes abusan de sus hijas. Entonces, lo que sucede es que las madres protegen a las infancias, le creen a sus hijes, que no quieren ir con su abusador. Como la madre los protege, la Justicia empieza a perseguirlas a través del SAP, además del señalamiento de que son madres locas, perversas, que implantan memorias en sus hijos por despecho. Utilizan la Ley de Impedimento de Contacto para decir que las madres impiden el contacto con los progenitores, y empieza una persecución judicial que tiene a diferentes madres en el país que han terminado en la cárcel o con prisiones domiciliarias. Ese es el accionar de la Justicia. Además, cuando suceden las revinculaciones forzadas -y esto es de manual-, los niños obviamente vuelven a presentar síntomas de abuso sexual, porque un abusador no cambia por sí solo. De esta manera, la Justicia se vuelve directamente responsable de los abusos sexuales reincidentes en las infancias, y ahí es cuando se abroquela y empieza a actuar de manera corporativa y mafiosa, mediante una persecución altamente violenta contra las madres protectoras”.

En este punto, para sintetizar, Galdeano expresó: “Las causas por abusos sexuales se archivan en un segundo; las causas por las investigaciones propias del abuso sexual no llegan nunca a buen término. Sin embargo, en un tiempo récord las causas por impedimento de contacto y la persecución judicial hacia la madre protectora suceden sin miramiento”.

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Líneas de acción

Ivana puso énfasis en que “la lucha continúa, y como toda lucha es social y política”. Es decir, “continúa con la visibilización de los abusos sexuales hacia las infancias, hablando, permitiéndole a las sobrevivientes que dejen en claro que en los distintos tribunales de la Argentina, si bien existe la Ley Piazza del 2015, es mentira que los delitos por abuso sexual no prescriben. En el país prescriben un montón de causas y por lo tanto es necesario que exista una perspectiva en la aplicación de las leyes, de respeto al tiempo de las víctimas. Hay excepciones, lugares, hay casos particulares donde sí la ley es correctamente interpretada. Entre los casos más emblemáticos están los de la provincia del Chaco, donde verdaderamente muchas mujeres y disidencias adultas han podido denunciar los abusos que vivieron en la infancia. Pero es importante dejar en claro que la lucha sigue para que la imprescriptibilidad sea un hecho real, fáctico y jurídico, que se respete verdaderamente el tiempo de las personas, de las víctimas y sobrevivientes”.

“Seguimos trabajando para realizar una modificación de la Ley de Impedimento de Contacto, porque si bien es una ley que está muy bien que exista porque tiene un objetivo que es correcto -garantizar que las infancias tengan vínculos con sus padres, con sus cuidadores-, es necesario modificarla porque no se le puede pedir a una madre -o a cualquier progenitor- que permita la vinculación de su hije con quien está denunciado por abuso sexual. La lucha sigue poniendo en agenda esta temática, pidiendo que las instituciones como Defensoría y Senaf, que tienen potestad para proteger, actuar, intervenir en los expedientes, constituirse como coquerellantes en las causas, que realmente lo hagan”.

Para concluir, destacó: “Esta es una lucha política, porque no se trata solamente de que el sistema judicial es perverso, son perversas todas las instituciones que deben velar por los derechos de nuestros hijos. Entonces, si las defensorías y si la Senaf, que son los organismos creados para garantizar el cuidado de sus derechos, no lo hacen, no actúan, no intervienen, eso también es parte de lo que esta lucha tiene que garantizar. Esta lucha tiene que ganarse”.

Al respecto, durante su intervención, Romina Del Plá remarcó que se trata de “un trabajo muy de fondo, muy profundo, de enfrentamiento de todo este sistema que tenemos que desbaratar”. Entonces, “no veamos solamente las dificultades que surgen al momento de alzar la voz, de denunciar, de empezar este tránsito, sino que veamos lo necesario que es, que aquellas valientes, aquellos valientes que se animan, son un ejemplo para arrastrar a todas y todos los demás. Y eso es fundamental, porque del mismo modo que el Ni Una Menos puso sobre la mesa todas las situaciones de violencia hacia las mujeres y las diversidades, eso no salió de un día para el otro, y vamos viendo también cómo cada uno de los procesos también se va resignificando”. Por esta razón, dejó en claro que es muy importante tomar todos los marcos de acción, que van desde las acciones que en cada tribuna de lucha podemos tener y hay que desenvolver, hasta la movilización independiente de todos los poderes, algo imprescindible. Con estas conclusiones, vamos a una gran jornada nacional de lucha el próximo 9 de junio.

https://prensaobrera.com/sociedad/cordoba-familias-reclaman-por-casos-de-abuso-sexual-en-un-jardin-de-infantes

https://prensaobrera.com/politicas/pasos-al-costado