Políticas

11/3/2022

más imposturas

Itaí Hagman se abstiene de votar contra el FMI

Patria Grande no obstaculizó la aprobación del pacto.

El diputado Itaí Hagman en la sesión de ayer.

Itaí Hagman, diputado nacional por Patria Grande en el Frente de Todos, se abstuvo de votar el acuerdo con el FMI. Luego de un discurso pretendidamente crítico, donde situó al organismo multilateral como partícipe necesario en todas las últimas bancarrotas nacionales, procedió a dar su abstención, colaborando en garantías a no obstaculizar la ingeniería de oficialistas y opositores para que el pacto sea aprobado. Ocurre a poco de que el parlamentario cediera su lugar en la Comisión de Presupuesto, donde podría haber hecho valer su lugar para denunciarlo y votar en contra del dictamen.

Pese a los votos negativos de Natalia Zaracho y Federico Fagioli, el rol canallesco de Patria Grande y la centroizquierda oficialista no puede esconderse así como así. La abstención de Hagman, quedando incluso a la derecha de Máximo Kirchner y otros diputados del Frente de Todos, reveló que este espacio político siquiera tiene un planteo común. Esto ya había sido habilitado por Grabois en días anteriores, cuando solamente se limitó a definir que Patria Grande “no acompañaría” el acuerdo, sin confirmar tampoco un rechazo y dejando la posibilidad abierta de que el voto no fuera uniforme. Dicho y hecho.

No obstante, esto no puede tomar por sorpresa. Previamente, Grabois había anticipado incluso que Patria Grande ¡hasta votaría a favor! si a cambio se estableciera un salario básico universal. Vale decir, la confesión de que en la Argentina del FMI no habrá trabajo genuino ni perspectiva de desarrollo posible. Algo que planteó una vez más Hagman en la intervención del día de ayer, confirmándolo incluso aún más claro al señalar que este acuerdo, el mismo que se negó a votar en contra, agravará inevitablemente la aguda crisis social, al turno en que tampoco resolverá la crisis económica del país y que nos somete a un cogobierno directo con el Fondo.

Ahora bien, la clarividencia sobre el papel que desempeña Patria Grande en la coalición de gobierno vino de la mano de su absolución al conjunto de los legisladores del Frente de Todos, de todo pelaje, incluyendo también a quienes votaron a favor; postulando que “está convencido que lo hacen con las mismas intenciones” que su espacio. Una vez más la centroizquierda oficia como dique de contención al enorme descontento popular que traerá este acuerdo de hambre y de saqueo, el mismo descontento que se expresó en una Plaza del Congreso repleta para repudiar tamaña entrega. Patria Grande le dice a un país con la pobreza merodeando el 40% que no hay otra alternativa que agachar la cabeza y resignarse a la profundización del ajuste y la penuria generalizada, así como hizo, por ejemplo, Grabois con su carta abierta en la antesala de las elecciones generales del año pasado.

La canallada que nos vienen a proponer los patriagrandistas debe ser denunciada y repudiada como tal. Contrariando esta maniobra para que el acuerdo avance sin obstáculos, el Frente de Izquierda – Unidad convocó en el día de ayer una movilización masiva, tanto en Plaza Congreso como en todo el país, para rechazar esta entrega sin precedentes de los trabajadores y las mayorías populares a un plan de guerra descomunal. El FIT-U se posicionó a las claras como la única fuerza que plantea romper este acuerdo de coloniaje y de saqueo permanente que supone el pago de la deuda externa, poniendo sobre la mesa un verdadero programa de transformación social que prosiga por la creación de una única banca nacional, la nacionalización del comercio exterior y los recursos estratégicos bajo control de los trabajadores y su entera disposición a movilizar y organizar la lucha por conquistarlo.