Políticas

8/11/2021

La Matanza: en vísperas electorales, Espinoza y Magario financian el oscurantismo

El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, y la exintendenta y actual vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Verónica Magario, participaron este 31 de octubre del festejo del día de las iglesias evangélicas en la localidad de Aldo Bonzi. En ese marco se realizó una celebración donde participaron cerca de 2.000 personas, de las cuales 800 eran pastores y dirigentes de las iglesias y el gobierno provincial y municipal.

Hace cuatro años, de la mano de la entonces intendenta Verónica Magario, salía como ordenanza municipal la Declaración de Interés Social y Cultural el 31 de Octubre como día festivo de las iglesias evangélicas. Junto con los representantes de las iglesias evangélicas, católicas, la Secretaría de Cultura y Educación del distrito y el jefe de gabinete sellaban uno de los pasos para financiar con recursos del Estado la alianza del gobierno municipal con las iglesias. En este camino, en 2018 se convocó a Aciera (Alianza Cristiana de las Iglesias Evangélicas de la República Argentina) a una mesa de diálogo con las burocracias sindicales locales de la CTA y la CGT. Este recorrido, continuó en mayo de 2019 cuando se creó la Subsecretaría de Culto a nivel municipal bajo un acuerdo al que arribaron la intendencia con Aciera y la Junta de Consejos Pastorales de La Matanza.

En La Matanza avanza el oscurantismo

Haciendo referencia a “celebrar la diversidad”, Espinoza afirmó que “las iglesias evangélicas son un pilar social importante para nuestro distrito. Nos une el trabajo y la construcción desde la palabra, la solidaridad y el amor por el otro. Un claro ejemplo fueron las tareas de contención y asistencia durante los meses más duros de la pandemia”. Y continúa con la referencia a la amplitud del gobierno “por eso, en 2019, creamos la Subsecretaría de Culto para ratificar la convicción sobre el libre ejercicio religioso para todas las confesiones”.

Como afirma Espinoza, no es una cuestión de fe, sino que el municipio (al igual a que el poder político provincial y nacional) sostiene gran parte de un armado de contención a la protesta social en esta crisis con el respaldo de las iglesias evangélicas y católicas. Se puede observar cómo crece la tercerización de una política pública de asistencia en situaciones de adicciones, hambre y violencia hacia la mujer, entre otros. Por eso mismo cabe preguntarse qué diversidad busca celebrar el gobierno municipal y provincial, cuando en realidad fortalece una alianza con sectores que se manifiestan abiertamente en contra de los derechos conquistados de mujeres y diversidades como el aborto legal, la ESI laica y científica y bloquean el acceso a la aplicación efectiva del cupo laboral travesti-trans.

Simbiosis de contención en las elecciones

El acto de celebración del Día de las Iglesias Evangélicas se presenta como un intento de revertir el retroceso electoral que dejaron las Paso el 13 de septiembre. Espinoza recurre al despliegue de su aparato punteril-territorial y las iglesias ocupan un lugar destacado. En este intento, también llegó al territorio matancero el derechista y católico Juan Manzur, flamante jefe de gabinete. El nombramiento del exgobernador de Tucumán, miembro del Opus Dei, es otro paso más en la integración de las iglesias y un régimen que profundiza su crisis.

Sin embargo, Espinoza sigue sin ofrecer una respuesta a los problemas concretos de lxs trabajadorxs. Es el caso de los municipales que hace más de un año vienen peleando por un aumento salarial que pueda alcanzar el costo de la canasta familiar. Tampoco dan respuesta a lxs vecinxs de los barrios que luchan por tener una vivienda. Al contrario, han reprimido recientemente a lxs vecinxs en la toma del 22 de Enero de Ciudad Evita. La lucha es por las necesidades materiales más báscias. Como decía una compañera de la toma, al hacer referencia al comedor que la policía en alianza con el gobierno municipal prendió fuego, lo que se busca es “que cada niño tenga una merienda y cena por lo menos”.

A separar al Estado de las Iglesias

En este marco, de alianza entre los partidos del régimen y las iglesias, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores - Unidad es la única herramienta política totalmente independiente de las iglesias.

En este sentido, desde el Plenario de Trabajadoras y el Partido Obrero hemos luchado décadas por conquistar la legalización del aborto. Consecuentemente, planteamos hoy un efectivo cumplimiento del derecho al aborto legal en todo el país. Nos pronunciamos por la prohibición de la objeción de conciencia -que solo sirve para bloquear derechos de las mujeres y las disidencias- en el ámbito de la salud. Necesitamos una efectiva y general educación sexual integral laica, científica y contemplativa de la diversidad sexual y de género en todos los niveles educativos. Vamos por la anulación de todos los decretos y leyes que establecen el financiamiento estatal de las iglesias, los curas y obispos. Ningún subsidio a las iglesias, ni a la educación y la salud confesionales. Basta de protección a los curas abusadores, juicio y castigo. Rechazamos la Subsecretaría de Culto del municipio.

En esta lucha que venimos dando, el ingreso de la izquierda al Congreso de la Nación y al Concejo Deliberante de La Matanza colocaría en el centro de la escena el planteo de la separación de las Iglesias del Estado y reforzaría cada una de las luchas de la clase trabajadora, especialmente del colectivo lgbti+ y de las mujeres.

https://prensaobrera.com/lgbti/30-marcha-del-orgullo-copemos-las-calles-para-luchar-por-nuestros-derechos/