Políticas
17/11/2025
Los números de la motosierra y la necesidad de movilizar contra el Presupuesto de Milei
La ejecución presupuestaria del gobierno nacional muestra que el peso del ajuste recae sobre el pueblo trabajador.

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El superávit fiscal fue a costa de las mayorías.
La proximidad del tratamiento del Presupuesto 2026 en el Congreso, que supone severos recortes en las partidas relacionadas con las necesidades sociales, reactualiza la necesidad de enfrentar esta política de ajuste que pisotea los derechos más elementales de la población. Finalmente, el plan motosierra consistió en una enorme transferencias de ingresos hacia los bolsillos del capital financiero y de los grandes empresarios, bajo la forma de pagos de intereses de deuda y rebajas impositivas.
El superávit fiscal que tanto celebra el gobierno fue a expensas de las mayorías populares. Según un informe elaborado por el Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía, en base a datos oficiales, desde que asumió Milei hasta octubre 2025, la reducción del gasto público equivalió a $87,8 billones, a precios corrientes, de los cuales $76 billones corresponden a recortes realizados sobre las partidas de obra pública, jubilaciones, programas sociales, subsidios a la energía (con sus correspondientes tarifazos), salarios estatales y educación.
El 25% de ese "ahorro" ($19,1 billones) fue destinado al pago de intereses de deuda pública durante el 2024 y lo que va de este año, según figura en la página de Presupuesto Abierto del Ministerio de Economía. Como vemos, Milei hundió al pueblo para acrecentar la fortuna de un puñado de especuladores. Otro tanto lo embolsaron capitalistas como Galperín por medio de beneficios fiscales. Sin ir más lejos, por las reducciones de Ganancias y cargas sociales, Mercado Libre dejó de tributar el equivalente a 373 millones de dólares bajo la gestión libertaria.
Así las cosas, la bonanza de los sectores más acaudalados es a costa del derecho a la educación, la salud y la vivienda del conjunto de los trabajadores. Según un informe publicado por el Centro de Economía Política Argentina (Cepa), entre enero y octubre 2025, la ejecución presupuestaria de la Administración Pública Nacional sufrió una caída real del 31%, en comparación con el mismo período de 2023. La misma fue particularmente brutal en el caso de los hospitales nacionales como el Sommer (-33,5%), el Bonaparte (-38,1%), el Posadas (-28,7) y el Carrillo (-30,7%). Asimismo, se redujeron ostensiblemente las partidas dedicadas a la prevención y tratamiento de enfermedades trasmisibles y no trasmisibles.
Los programas del Ministerio de Educación también tuvieron un ajuste de gran envergadura. Además de la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), le ejecución presupuestaria cayó 80,8% para la formación docente, 89% en el fortalecimiento edilicio de jardines infantiles, 77,1% en las becas para estudiantes y 49,2% en infraestructura y equipamiento escolar. Por otra parte, el retroceso presupuestario en materia de vivienda y urbanización se refleja, por mencionar algunos ejemplos, en los recortes sobre áreas de Consolidación urbana y mejoramiento de barrios (-74,5%) y de Desarrollo e infraestructura hidráulica (-86,4%), dejando a las barriadas aún más expuestas a eventuales inundaciones.
El gobierno profundizará su rumbo ajustador, como lo indica el proyecto de Presupuesto 2026 que ya tiene dictamen de mayoría y posiblemente se trate en diciembre. A su vez, la reforma tributaria prevista comprende nuevas exenciones impositivas para el capital, lo cual será compensado con impuestazos regresivos y con un mayor ajuste sobre la población trabajadora. Se vuelve urgente organizar la lucha para derrotar esta agenda reaccionaria.




