En su gira por Estados Unidos, Massa anunciará un nuevo acuerdo de inversiones con la minera yanqui Livent, que explota uno de los dos yacimientos de litio activos en el país. Se profundiza así la entrega de este mineral estratégico a una multinacional señalada por defraudar al Estado argentino declarando sus exportaciones a menos de la quinta parte del precio que se comercializa a nivel internacional. Es un convenio con los que saquean al país.

Livent explota el Salar del Hombre Muerto en Catamarca, y fue multada por la Aduana por declarar un precio de exportación del mineral a 6.000 dólares la tonelada, cuando el promedio del mercado mundial era de 33.000 dólares. También estimó que ello implicó una defraudación al fisco por 8.000 millones de pesos en concepto de derechos de exportación no pagados.

Sin perjuicio de esto, ahora el ministro de Economía estaría firmando nuevos negocios con la minera, ampliando concesiones. De hecho, la semana previa a subirse al avión Massa anunció un régimen especial para que las multinacionales mineras puedan acceder a dólares a la cotización oficial para girar sus ganancias al extranjero. Un premio a los fugadores, que contrasta con lo que privan al grueso de la población.

Todo esto convierte en una pantomima el discurso de Massa amenazando con ponerse estricto con aquellas empresas que subfacturen exportaciones o sobrefacturen importaciones, como mecanismo para quedarse con las divisas y fraguar el pago de impuestos. Para controlarlo, anunció que en esta gira gestionará acuerdos… con los tribunales estadounidenses. El “esfuerzo” fiscal, como vemos, solo cuenta a la hora de ajustar a los trabajadores.

Es un botón de muestra de la orientación del gobierno, que apunta a congraciarse con el FMI y el imperialismo yanqui a base de entregar los recursos estratégicos para negocios que nada le dejan al país. Esto a costa de avasallar a las comunidades originarias que viven en la región de los salares y se ven perjudicadas por el consumo de agua de las mineras, como se expresó en movilizaciones en Salta.

Derrotemos este curso de sometimiento nacional.