Políticas

7/9/2018

Respuesta a la mesa del Frente de Izquierda

Reproducimos a continuación respuesta del Comité Ejecutivo del Partido Obrero a la mesa del Frente de Izquierda, respecto de una propuesta de declaración política enviada por el PTS y sobre el carácter de una campaña política frente a la crisis nacional (ver aquí nuestro texto).


Compañeros:


Hemos recibido la propuesta del PTS para la salida de una “declaración de emergencia frente a la crisis nacional”, así como las enmiendas aportadas por los compañeros de IS. Sobre este texto, y la marcha de nuestros debates en relación a la política del FIT frente a la actual crisis, queremos señalar lo siguiente:


1.-El texto presentado inicialmente por el PTS coloca a la Asamblea Constituyente como “soberana” sólo en el sentido de que “ninguna de las instituciones de este régimen tenga derecho a sustituir o suspender medidas”. Pero en ese caso, ustedes admiten que se trataría de una Constituyente que conviviría con “este régimen”. Nosotros luchamos por una Constituyente que sustituya al actual poder político –“fuera Macri, el FMI y los gobernadores del ajuste”– y tome en sus manos la ejecución de las medidas elementales para terminar con el saqueo del país y de sus trabajadores. La omisión del planteo de que se vaya Macri y todo el régimen convierte al planteo de la Constituyente en una variante parlamentaria dentro de los términos del actual régimen. Por otro lado, le quita el filo de lucha por la independencia política de los explotados de todas las variantes pejotistas y en particular del kirchnerismo, elemento de disputa en numerosos frentes de la lucha de clases. El PTS señala en su texto que el gobierno “no va más”. Pero a esa conclusión genérica pueden haber llegado diversas fracciones de los explotadores –ustedes mismos colocan en su texto la variante de una “unidad nacional” con el pejotismo. Si efectivamente “no va más”, el FIT tiene la responsabilidad de plantear una salida política, que debe tender un puente entre la envergadura de la crisis de régimen, de un lado, y una conciencia política de las masas que aún no han asumido la lucha por un gobierno propio, del otro. Por eso asociamos “Fuera Macri…” a la lucha por una constituyente libre, soberana y con poder.


2.-En las modificaciones de los compañeros de IS a ese texto, se acentúa una posición negativa a desarrollar un planteo político frente a la crisis, a la cuestión del poder y por lo tanto a la negación del alcance que reviste la crisis misma. La reivindicación de la Constituyente aparece aún más subalternizada. Los compañeros rechazan que el pacto con el FMI haya fracasado, y limitan el texto presentado a la enumeración de los agravios contra las masas. Pero el pacto con el FMI y el propio gobierno… han fracasado, al punto que una cuestión de fondo de la crisis actual –la negativa del capital internacional a refinanciar la deuda externa argentina– es el resultado de que los mismos fondos especulativos que lucraron durante tres años con los títulos locales hoy se desprenden en masa de ellos, después de las pérdidas sufridas con las devaluaciones posteriores al acuerdo con el Fondo. Es necesario que les expliquemos a los trabajadores que luchamos contra un gobierno quebrado económica y políticamente, al cual, por lo tanto, se lo puede derrotar. Lo contrario, la presentación de un gobierno que “planifica” cuidadosamente y sin fisuras sus ataques, semeja a la visión que nos presentan el kirchnerismo y sus agentes sindicales, y que se sirven de esa supuesta “fortaleza” para paralizar las luchas y llamar a “esperar al 2019”.


3.-En oposición a esa parálisis, es crucial que el FIT levante una perspectiva de lucha sostenida hasta derrotar el plan de guerra oficial –o sea, paro activo de 36 horas, plan de lucha, huelga general. Este camino de lucha le imprime también un contenido social definido al planteo de que se vaya al gobierno, puesto que asociamos el “Fuera Macri…” a una acción histórica de los trabajadores. Los compañeros de IS eliminaron ese planteo –la huelga general– de la declaración propuesta. Sin esa perspectiva, los planteos de plan de lucha o paros activos sólo serían una variante radicalizada de las propuestas de las burocracias, cuyo horizonte de lucha no tiene presente de ningún modo la derrota del gobierno. Al contrario, colocan a la izquierda del movimiento obrero como grupo de presión de la burocracia sindical. Por último, y en relación a la declaración, se plantean diferencias en cuanto al tratamiento de la “criminalización” de los líderes nacionalistas –CFK y Lula. En un texto nuestro anterior, hemos planteado que la filiación imperialista de estos operativos –para desplazar a la burguesía nacional de los recursos y del presupuesto público de Brasil o Argentina– no puede implicar solidaridad alguna con los que han gobernado para facilitarle a los parásitos capitalistas –los Odebrecht, Techint o Roggio– su acumulación de capital a costa de los trabajadores y del Presupuesto. Reivindicamos la continuidad de esa línea adoptada.


4.-El hilo conductor de estas diferencias políticas, compañeros, se concentra en la comprensión del alcance de la crisis –que no pasa por un episodio pasajero o un mero ajuste por fuerte y brutal que este sea, sino por una crisis de régimen, caracterizada por el derrumbe económico y político del macrismo, en el marco de un agravamiento de la crisis mundial capitalista y como emergente de ella; por los hechos que han colocado a buena parte de la clase capitalista en el banquillo de los acusados (´cuadernogate´) y, como consecuencia de lo anterior, la irrupción creciente de los trabajadores y la juventud. Por este escenario de conjunto, el PO reiteró, en la última reunión de la mesa del FIT, la propuesta de una campaña inmediata, incluso propusimos un acto para fin de la presente semana. En las dos versiones de la declaración –tanto la del PTS como IS– se soslaya esta posibilidad, y se sostiene la perspectiva de un acto… en noviembre, y la alusión difusa a actividades del interior. Consideramos que una cuestión –el carácter de la declaración propuesta– y la otra –la dilación de una campaña política– no están separadas. En efecto: una caracterización política que no valora el alcance de la crisis actual, conduce a una acción política “dilatada” y rutinaria, y a un acto tardío que sólo puede ser interpretado como un prolegómeno electoral. Criticamos a los que afirman que “hay 2019”. Pero si actuamos así, no los estaríamos superando en términos de caracterización y de acción política.


En una carta anterior, hemos señalado que nuestras divergencias sobre la etapa no nos eximen de compromisos políticos dirigidos a enhebrar una acción común frente a la crisis. Nada más ni nada menos que colocar al FIT como referencia política que motorice la acción de las masas y que muestre una salida de poder, transicional, en el sentido del gobierno de trabajadores que es el planteo estratégico del FIT. De hecho, y si concretáramos un acto ahora, cada fuerza política expresaría su perspectiva, en el marco de una iniciativa frentista. En vez de ello, el camino que se nos ha propuesto es el contrario: o sea, una declaración defectuosa, amalgamando posiciones políticas divergentes, y que sólo estaría encubriendo la ausencia de una iniciativa inmediata frente a la crisis. En esta línea, hacemos constar que, en la última reunión de la Mesa, fuimos informados de que el PTS prepara un acto en Argentinos Juniors para el mes de octubre. Todo indica, en este cuadro, que la declaración propuesta, además de confusa, no será sucedida por iniciativas prácticas frentistas.


Reiteramos la posición expuesta en la última reunión: el debate político debe desarrollarse y conducir a una necesaria clarificación de posiciones y, sobre esta base, el FIT debe iniciar ya una campaña política de carácter nacional.


Partido Obrero, Comité Ejecutivo, 7.9.2018