La Cámara Federal de Casación, máximo tribunal penal del país, anuló el beneficio de la prisión domiciliaria de Miguel Etchecolatz, ex jefe policial de la bonaerense durante la última dictadura militar, que había sido concedida por un tribunal porteño. El fallo ordena que se dicte una nueva resolución tomando en cuenta los informes médicos de peritos oficiales y la posición contraria de la fiscalía de otorgar ese beneficio.

El fallo fue firmado por los camaristas Mariano Borinsky y Gustavo Hornos; el tercer miembro de la sala de Casación, Juan Carlos Gemignani, votó en disidencia y se pronunció a favor del otorgamiento de la prisión domiciliaria al genocida, informó Télam.

La decisión de Casación anula un fallo de la Sala I de la Cámara Federal porteña, que en agosto pasado concedió a Etchecolatz el arresto domiciliario por supuestas razones de salud, en una de las causas por delitos de lesa humanidad por las que fue condenado a prisión perpetua. Se sospecha que el informe de los médicos penitenciarios consignaba datos fraguados.

Etchecolatz fue condenado a prisión perpetua en el 2012, por los crímenes cometidos en el llamado “Circuito Camps”. La decisión de la Cámara de otorgarle el beneficio de la prisión domiciliaria fue repudiada por los organismos de derechos humanos y las organizaciones políticas y gremiales que luchan contra la impunidad. Miles de personas marcharon en La Plata para rechazarla. Para peor, la excarcelación de Etchecolatz hubiera coincidido con el décimo aniversario de la segunda desaparición de Julio López.

El gobierno de Mauricio Macri resolvió no apelar el otorgamiento de este beneficio a los genocidas condenados, como parte de su política de “reconciliación” con las fuerzas armadas. Ante el rechazo generalizado, su secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, anunció que haría una “excepción” en el caso de Etchecolatz.

La movilización le puso un límite a esta tentativa conciliadora, en momentos en que el gobierno se prepara para volcar a las fuerzas armadas a la represión interior.

Debemos continuar con una movilización a fondo para terminar con la impunidad de los Etchecolatz y los Milani.