Salud

8/7/2020

Lanús ante el aumento de los contagios de coronavirus

2.436 casos en el distrito.

A casi cuatro meses de la llegada de la pandemia de Covid-19 a la Argentina, es posible verificar cómo la expansión del virus y su impacto es un reflejo de la realidad socioeconómica del país y sus distintas jurisdicciones. De acuerdo a los datos oficiales brindados por el Ministerio de Salud de la provincia, en Lanús, al día de la fecha, se contabilizan 2.436 casos, 1.172 recuperados y 41 fallecidos.

Un primer elemento a evaluar es el motivo por el cual crecen los contagios. A la habilitación de industrias y comercios no esenciales dispuesta por los distintos gobiernos se suma la necesidad de los trabajadores precarizados de salir de sus casas para obtener algún ingreso, habida cuenta la inexistencia de un verdadero plan de asistencia por parte del Estado. Lanús registra un mayor porcentaje de contagios (21%) por contacto estrecho que el resto de la provincia, lo que es una consecuencia del hacinamiento en los barrios -que vuelve imposible para las familias aislar a un familiar contagiado o con síntomas- y de la falta de medidas sanitarias en los lugares de trabajo, como se ve en el Coto de Lanús Oeste o en los talleres ferroviarios de Remedios de Escalada. De acuerdo a las estadísticas oficiales de la provincia un 6,9% de los contagiados son trabajadores de la salud, lo que ratifica la explosión de casos de Covid-19 entre el personal del Hospital Evita.

El rango etario en que prevalecen los contagios (entre los 20 y los 50 años) refleja que se trata de la población económicamente activa, es decir que son contagios de aquellos que deben salir de sus hogares para ir a trabajar. La gran mayoría de los decesos (el 72%) es de mayores de 70 años, en una prevalencia mayor a la del conjunto de la provincia donde son el 60% de los fallecidos. Da cuenta de una situación de particular desprotección de la tercera edad, ya sea de aquellos que viven en sus hogares como en instituciones; el reciente caso de ocho adultos mayores contagiados en el geriátrico Cumelén es sintomático de este escenario.

Un 72,3% de los contagiados en el distrito se atiende mediante su obra social o prepaga, lo que vuelve más difícil la contención del virus, ya que nadie controla que los infectados del sistema privado sean aislados o las condiciones de su internación y de altas. Con un sistema público al limite de su capacidad de atención, contar con los recursos de los monopolios de la salud privada se torna esencial. Por eso urge una centralización del sistema de salud, como plantea el Partido Obrero.

La política desarrollada por los gobiernos nacional, provincial y municipal va a contramano de un verdadero enfrentamiento a la pandemia. Las supuestas medidas de equipamiento del sistema de salud contrastan con el colapso de los hospitales y la falta de insumos y personal, problema que en los nosocomios de Lanús como el Evita o el Arturo Melo está al rojo vivo.

Para que los vecinos y trabajadores del distrito no sean víctimas de esta crisis es necesario adoptar otro rumbo político, partiendo de la centralización del sistema salud y su equipamiento mediante una partida presupuestaria extraordinaria con fondos que deben salir del desconocimiento de la deuda externa y de un impuesto a las grandes fortunas, como el que plantea el Frente de Izquierda. Un subsidio a los desocupados de 30.000 pesos, la elevación de la jubilación mínima al mismo monto, la prohibición efectiva de despidos y rebajas salariales junto con la reducción de la actividad económica a las ramas verdaderamente esenciales, se vuelven urgentes como medidas para enfrentar este cuadro de bancarrota económica y sanitaria.