Sindicales

26/1/2021

EDUCACION

Córdoba: el salario docente cada vez más lejos de la canasta de pobreza

La burocracia de Uepc y el gobierno especulan contra el salario. Es necesaria la intervención de los docentes para establecer el reclamo salarial, el plan de lucha y las condiciones para la vuelta a las clases presenciales.

A días de que venza el último acuerdo salarial entre el gobierno provincial y la conducción de Uepc y mientras se proclama la vuelta a clases con presencialidad para febrero y marzo, se vuelve cada vez más palpable y pronunciado el atraso del salario docente. Tanto desde el gobierno provincial como desde la conducción de Uepc, vaticinan la cuestión como problemática y han comenzado a barajar sus líneas para evitar la posible conflictividad entre los docentes frente a la paritaria.

El salario docente está cada vez más lejos incluso de la canasta de pobreza y de garantizar las condiciones de vida y subsistencia de los educadores. El inicial del cargo testigo, incluyendo el incentivo docente y el bono extraordinario del Fonid, acordado en la paritaria nacional, está hoy en $39.700, muy por debajo de la canasta básica total que se ubica en los $54.207, según informó el Indec. Apenas esta exigua línea de pobreza se coloca para la docencia de Córdoba como una meta u horizonte que permita recomponer un salario derrumbado.

El acuerdo salarial de 2020, dividido en cuotas y discriminado según la diferencia de cargos y escalafón, significó un incremento máximo total de 25%. En la primera instancia paritaria de marzo de 2020, previa a la explosión de la pandemia y a la forzosa virtualización de las tareas educativas, la docencia rechazó la propuesta del gobierno que era de un total de 16% en cuotas, desperdigado en diversos ítems del salario (sólo un 2% era al básico en la primera cuota).

El rechazo de la docencia y hasta de la propia asamblea provincial del sindicato se fundamentó en el ajuste jubilatorio que entrañaba esta propuesta, puesto que para conformar el total del aumento reducía los aportes personales a la Caja, armonizándolos con el régimen ordinario nacional. Pese al rechazo de la asamblea, la conducción firmó la aceptación de la propuesta, desconociendo la decisión del propio sindicato en su organismo de deliberación y abriéndole la puerta al ajuste previsional de Schiaretti que tomaría la forma de la ley 10.694 unos meses después. La pauta total del año se completaría a finales de octubre con un incremento de 9% dividido entre los meses de octubre y el presente enero 2021.

Como resultado de esta política acordada entre el gobierno y la conducción sindical, el salario docente ha perdido al menos 11 puntos contra el aumento de los precios. Pero la diferencia entre la inflación anual (36,1%) y el aumento total del salario de los docentes (25%) no ilustra realmente y de forma completa el retroceso del poder adquisitivo y las condiciones de vida de los trabajadores de la educación. Con un salario devaluado, sumergiéndose cada vez más por debajo de la pobreza, la mayor parte de los ingresos de la docencia se va en alimentos y en insumos de primera necesidad, rubros en los que los aumentos de precios fueron superiores a la inflación total. Según cifras del Indec, la pobreza y la indigencia aumentaron más que la inflación total, un 39,1% y un 45,5% respectivamente. Sólo en diciembre el Índice de Precios al Consumidor de Córdoba aumentó un 4,33% respecto a noviembre, completando un aumento anual de 33,07%. El retroceso del salario docente se vuelve cada vez más grave y manifiesto.

Para comenzar la discusión del salario, la conducción celeste de Uepc vuelve a poner el eje en las especulaciones ligadas a las finanzas provinciales, alejando el debate de las necesidades materiales y concretas de la docencia. La conducción de Monserrat y compañía pretende despegar el salario del problema de la subsistencia y encajonar la discusión en las operaciones financieras del gobierno. Por eso pero evita decir cuánto es lo que necesita de aumento un docente en la provincia para recuperar el poder adquisitivo y la capacidad de subsistencia que le da el salario, y evita sobre todo convocar a los docentes y llamar a asambleas para determinar un monto, un reclamo y un plan de acción.

Exigimos que Uepc convoque inmediatamente a asambleas para que la docencia discuta el reclamo salarial y el plan de lucha, junto con las condiciones para la vuelta a las clases presenciales. Para preparar esta intervención proponemos al conjunto de los docentes, delegados, activistas y agrupaciones de la oposición, convocarnos en un Plenario Docente la semana del 8 de febrero que discuta, resuelva y organice el programa y la acción de los educadores frente a la paritaria, el salario y las vuelta a clases.

La intervención de la docencia se vuelve indispensable para superar el límite que quiere imponer la conducción celeste de Monserrat y compañía. Es el eje que está en el germen de la convocatoria al XIII Congreso Nacional de Tribuna Docente que se desarrollará los próximos 20 y 21 de febrero en donde debatiremos y resolveremos un programa y un plan de acción para la docencia de Córdoba y de todo el país.