Desde Tribuna Estatal Astillero Río Santiago (ARS) repudiamos los despidos arbitrarios y sin causa de dos trabajadores del sector comedor, una medida plagada de irregularidades basada en un hecho sin mayores trascendencias sucedido el 10 de septiembre en el horario de salida respectivo de los trabajadores. Recién el 4 de octubre, a raíz de aquel suceso, los trabajadores se anotician de la existencia de telegramas de despido para ambos acusándolos de “falta grave, circunstancia que origina la pérdida confianza”, por lo que la empresa argumenta despido con justa causa.

Para que la patronal proceda de esta manera sin dudas cuenta con la inacción de la conducción de ATE Ensenada que no apoyó a los trabajadores despedidos, dejando pasar un largo tiempo, primero tratando de ocultar el hecho y luego de “apaciguar” cualquier medida que pudieran sacar desde el sector sus compañeros. ATE renuncia a su razón de ser y concentra todas sus energías en intentar cambiar la denominación jurídica del ARS; para tal fin cuenta con el apoyo del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio, tal como sucedió tanto en la Legislatura provincial como en el Concejo Deliberante de Berisso.

Estos despidos sin ninguna causa sientan un precedente grave no solo para las y los trabajadores del sector comedor sino también para el resto de la planta naval, por lo tanto es una señal de alerta para todo el colectivo obrero.

El contexto que atraviesa ARS posterior a las elecciones legislativas y la intención de privatizar la fábrica vía Sociedad del Estado, al igual que el Instituto Biológico en la Plata, sigue dominado por el abandono y falta de inversión que se corresponde con el ajuste general que se está dando en la provincia de Buenos Aires de la mano del gobernador Axel Kicillof. Desentenderse financieramente de empresas estratégicas como ARS y el Biológico son la orientación de la administración bonaerense.

Al día de la fecha y ya con todas las restricciones por el Covid-19 levantadas por el gobierno y el avance de la vacunación en la población, la naviera ensenadense se encuentra funcionando solamente con una parte de su personal y con un horario reducido a seis horas; un exabrupto de la empresa con la cogestión de la conducción gremial que dejan pasar la parálisis de la fábrica, y es que precisamente sigue ausente un plan de industria naval que permita el despegue del sector y en particular del Astillero Río Santiago.

Situación salarial

La inflación y la constante suba de precios viene erosionando los salarios de todos los trabajadores estatales. Se hace necesaria una urgente reapertura de paritarias para paliar la situación. La pérdida de poder adquisitivo es alarmante y deteriora las condiciones de vida de los trabajadores. Desde Tribuna Estatal insistimos en la necesidad de realizar una asamblea general que permita la deliberación de los trabajadores y poder sacar al Astillero de este impasse, algo que la conducción gremial y la Junta Interna niegan sistemáticamente.

Abajo la Sociedad del Estado, reincorporación ya y en pleno de sus derechos de los compañeros despedidos.