El secretario general de Aoma, Javier Castro, golpeó salvajemente a José Schiaffino, un compañero minero trabajador de Enaex (empresa de explosivos que presta servicio para Yamana Gold) que fue a preguntarle por su situación laboral. La burocracia sindical se dedica a pegarle a los trabajadores que dice representar.

José, como otros cientos de compañeros, fue parte de la medida de fuerza que se llevó a cabo en el yacimiento hace poco tiempo. Una lucha ejemplar que demostró lo que pasaba en la minera respecto a salarios, seguridad y condiciones de la ruta que lleva a la mina. Con esta medida se buscaba la mejora para cada obrera y obrero, pero también para cada transportista, que diariamente transitan esa ruta provincial dirigidos o no al yacimiento.

El reclamo terminó en un acuerdo de partes donde existiría personal dispensado de tareas hasta que la justicia dictamine si la medida había sido legal o no. El papel del Sindicato Aoma Santa Cruz fue lamentable. Abandonó a quienes deberían representar, incluso hasta enviaron una carta al directorio de empresa manifestando que no apoyaban la medida de fuerza. Entre los mas de 30 compañeros dispensados se encuentra José que, como todos los compañeros, quiere volver a trabajar.

A pesar de que el acta acuerdo avalado por el Ministerio de Trabajo tiene como cláusula el no despedir, en Yamana Gold recientemente despidieron a dos trabajadores. Debido a esto, Jose Schiaffrino consultó al secretario general de Aoma sobre su situación laboral, pero en lugar de una respuesta recibió una golpiza por parte de este, lo que le provocó una lesión en el ojo derecho y la rotura de sus lentes de aumento. El accionar violento de quienes dicen defender al trabajador pinta de cuerpo entero lo que realmente son las burocracias sindicales. Todo el apoyo a los mineros de Cerro Moro y a Jose Schiaffino.