El paro por tiempo indeterminado resuelto por la asamblea del Cedems hace una semana sacudió la provincia con marchas masivas y contagió al resto de los trabajadores estatales que repudian el 2% de aumento impuesto en octubre (que no cubre todos los tarifazos en curso). El reclamo de los docentes de media y superior que nuclea el Cedems también abarca el rechazo a la eliminación del Fonid, el blanqueo del salario, ya que un 80% del mismo está en negro y que los “ítems” se repitan en cada cargo que tienen los docente. 

Las jornadas de protesta rebalsaron las calles comenzando el lunes con una marcha de antorchas que se replicó en varias localidades del interior y confluyó con docentes y estudiantes de la universidad, la base docente de primaria y sectores de la población que se sumaron en apoyo. El miércoles se movilizó la intergremial junto a organizaciones sociales y hubo una olla popular del Cedems y del Polo Obrero levantando la bandera de la unidad de ocupados y desocupados. El viernes culminó con una nueva marcha de antorchas. 

Sadir apuesta a quebrar la lucha apoyándose en la burocracia sindical traidora

El contundente paro del Cedems con alto acatamiento y el contagio al resto de los trabajadores estatales puso en jaque al gobierno de Carlos Sadir que apostaba al fracaso de la medida.  Ante esto, el gobierno accionó con el objetivo de aislar al Cedems con su medida y apostar al desgaste. 

Sadir anunció un bono miserable de fin de año de 200 mil pesos para los que cobran menos de $1 millón y de 140 mil pesos para los que lo superan. El bono es no bonificable ni remunerativo y en 4 cuotas, y se da por única vez. Una provocación con la que pretenden cerrar el año dejando a los/as trabajadores /as sin paritaria hasta marzo. 

Lógicamente, el anuncio causó rechazo en los trabajadores, pero el gobierno cuenta con el apoyo de la burocracia sindical traidora de UPCN, Atsa, ATE y, tristemente, Adep (Asociación de Educadores Provinciales) que apuesta a la derrota de los colegas del Cedems. UPCN y ATE, por este bono, “dieron de baja” un paro que nunca iban a hacer. 

Párrafo aparte para Adep: la conducción cruzó una línea roja

Luego del accionar en la huelga de 2023, la conducción de Adep profundiza su traición a los trabajadores para ser un alfil del gobierno en el gremio docente.  Mientras los colegas del Cedems están en pie de lucha contra el 2% (que también fue rechazado por Adep), Silvia Vélez (secretaria general de Adep) se reunió con el gobierno para aceptar el bono de fin de año y luego presentar como una conquista un ítem de 25 mil pesos por el “reconocimiento al desarrollo en la infancia”. 

Esto no sólo muestra que el gobierno intenta meterse en la campaña electoral de Adep, sino que es una provocación de la directiva contra los colegas del Cedems que están haciendo esfuerzos inconmensurables sosteniendo el paro. La directiva de Adep juega a que el Cedems pierda y, así, reforzar la idea de que luchar no sirve y que lo que se necesita es un sindicato alineado al gobierno para “conseguir” limosnas.  

¡Unidad de los trabajadores en la lucha para ganar!

Los que no luchan ya perdieron. El gobierno tampoco les da nada a sus aliados. El 2% es para todos. El ajuste es para todos los trabajadores. Sólo si luchamos, podemos ganar. 

Para eso es necesario la mayor unidad de los trabajadores en la calle y, luego, en la coordinación. En primer lugar, con una gran campaña de solidaridad con la huelga del Cedems.  En segundo lugar, continuar la exigencia de asambleas urgentes en Adep para plegarse al paro. El atajo de establecer negociaciones por separado que hacen muchos sindicatos para conseguir alguna reivindicación pequeña es pan para hoy y hambre para mañana porque se divide a los trabajadores y el ajuste generalizado avanza. 

Construyamos una gran movilización por el salario para la próxima semana. Si nos unimos, podemos ganar. Por el triunfo de la huelga docente. Hacia un plenario de ocupados y desocupados para derrotar a Milei y a Sadir.

El gobierno felicita a la burocracia sindical por facilitar el ajuste y “portarse bien”

Los trabajadores enfrentan los despidos y las paritarias a la baja, con movilizaciones, paros y la acción directa. –

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