El fin de semana nos enteramos de la triste noticia de la muerte de Víctor, residente de la Villa 31 y trabajador del Programa Juegotecas Barriales de la Dirección General de Niñez y Adolescencia del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires.

La muerte de Víctor es la radiografía de las condiciones de vida y de trabajo en la que nos encontramos miles de municipales de la Ciudad. Salarios muy por debajo de la canasta básica familiar, sin la posibilidad de acceder a una vivienda con los servicios esenciales y arriesgando nuestra salud al trabajar sin que se nos garantice la prevención al contagio de coronavirus.

Las trabajadoras y trabajadores del MDHyH desarrollan sus tareas en los territorios más vulnerables, entregando los escasos bolsones de comida que otorga el gobierno (denuncian que en algunos casos deben seleccionar ellos mismos a qué comedores se entregarán), realizando los operativos para detectar casos de Covid-19, atendiendo a mujeres víctimas de violencia, entre otras funciones.

Mientras que en distintos organismos de la Ciudad se multiplican las denuncias de trabajadores por la prestación de tareas sin ningún tipo de protocolo sanitario y con escasos elementos de seguridad, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta lanzó el programa de “servidores públicos” para intimidar a los municipales y obligarlos a tomar tareas presenciales. Quienes se niegan pierden su trabajo, como ya sucedió en el propio MDHyH.

Desde Tribuna Municipal exigimos justicia por Víctor. Reclamamos la implementación de protocolos de actuación y la provisión de todos los elementos de protección para el desarrollo de las tareas que sean realmente esenciales, y un plus de 20.000 pesos a quienes las realicen por el riesgo y el estrés que conllevan. Abajo el programa de “servidores públicos”, por un aumento salarial para todos los municipales de la Ciudad.