El gobierno volvió a ofrecer una propuesta que ya había sido rechazada por 21 departamentos de la provincia y por la totalidad de la asamblea de delegada-os de Capital. En la propuesta se contempla una primera cuota del 10%, a cobrar en mayo, que ya fue superada por la inflación de enero y febrero.  La propuesta que se vendió como superadora es la misma del 17, 5% hasta julio que la docencia había rechazado, más el 17,5% en cuotas del tramo que va de julio a diciembre, con cláusula de revisión. Este punto que agrega es peor, porque la cláusula aparece cuando se termina el ciclo lectivo y porque la última cuota, a cobrar en diciembre, es el reaseguro que consiguió el gobierno para clausurar la lucha salarial durante todo el 2021. Frente a una inflación anual del 50%, el 35% de la propuesta del gobernador Juan Schiaretti y y Juan Monserrat (titular de la UEPC) nos hace perder 15 puntos, en un salario docente que ya está 20 mil pesos debajo de la línea de pobreza, hoy en 57 mil pesos.

 

https://fb.watch/4hUJkHgK58/

 

A pesar del rechazo masivo a la propuesta, la conducción Celeste puso en marcha un operativo al que sumó a la lista Naranja-Pluricolor (una armado kirchnerista que agrupa a inspectores y funcionarios del propio gobierno) para desconocer la voluntad de las escuelas y malversar los órganos deliberativos y resolutivos de los departamentos.  Para terminar el trámite,  aprobó como por decreto el acuerdo en la Asamblea Departamental, con el rechazo de más del 60% de la docencia. Así, a través de la antidemocrática asamblea provincial ese rechazo de más del 60% se transformó en 51 votos y la aceptación, en 81, debido a que este organismo sobreestima la representación de departamentos minoritarios por sobre los que concentran a la mayoría de la-os docentes.

 

El rechazo ahora convertido en aceptación, tuvo una manifestación activa, de escuelas y delegado-as que se venían organizando de manera autoconvocada junto a la oposición. La lucha por las condiciones laborales y la defensa de una presencialidad segura se organizó desde abajo y gracias a esa organización se pudo denunciar la violación del protocolo por parte del Ministerio de Educación y conseguir que se refaccionen edificios; se entreguen elementos de bioseguridad; se desinfecten las escuelas y se aumente el personal de limpieza. Toda un batalla firme contra el apriete de las Inspecciones y las direcciones de escuela que, con el aval de UEPC, impulsaban la apertura de establecimientos y burbujas a como dé lugar, incluso con profusos casos de contagios de Covid.

 

Esta unidad en la lucha por condiciones seguras y la defensa del salario por parte de las escuelas y la oposición es el germen que tenemos que desarrollar para continuar la pelea por todas y cada una de las reivindicaciones de la docencia, que se manifiestan en un ajuste desmedido y una sobrecarga de trabajo convertida en reforma laboral de hecho.

Todos los sectores de la Pluricolor y lo-as delegado-as  que junto al Furu (Frente de Unidad por la Recuperación de UEPC) en la última votación de la  asamblea de Capital superaron por más del 50% de los votos las mociones de la lista Celeste y la Naranja, deben conformar un frente común que permita recuperar el sindicato y conquistar todo el pliego de demandas. En definitiva, es la unidad de la oposición que se plasmó en las acciones activas y callejeras y que constituye un frente único que hay que hacer efectivo para superar a la burocracia.

En esta perspectiva, consideramos necesario un nuevo plenario de la oposición y las escuelas, que siga desarrollando la lucha para conquistar los reclamos de una presencialidad segura, la defensa del salario,  las jubilaciones y  sea el punto concreto y activo de la unidad por la recuperación de UEPC.