A medida que las comunidades en todo el mundo continúan lidiando para contener la propagación del coronavirus y con la rápida proliferación de casos y nuevas cepas, decenas de estudio informan las consecuencias psicológicas de los trabajadores de la salud tras cargarse la pandemia de Covid-19 al hombro.

Los resultados son preocupantes. Más del 60% de los trabajadores informaron síntomas de depresión, mientras que más del 70% síntomas de angustia psicológica, según la última encuesta publicada por la OMS el pasado 24 de noviembre. Esto no es casual: la situación en Argentina de lxs trabajadores de salud muestra en carne viva el abandono de años en materia de condiciones laborales, salario y equipamiento sanitario.

Las UFUs como modelo de explotación y colapso

En este sentido, las llamadas UFUs (Unidad Febril de Urgencia), dispositivos elementales para la detección y aislamiento de pacientes Covid-19 positivos, se transformaron rápidamente en el ejemplo de explotación y denigración de los profesionales. El contrato inicial en CABA es por dos meses, con el plazo de 5 meses extra de renovación, una herramienta para sostener la precarización laboral de lxs llamados “trabajadores esenciales”. El salario de un/a coordinador/a médico/a no supera los 40 mil pesos por mes, y las tareas extras que platea la jornada laboral no terminan en las 8 horas porque todo el tiempo se tiene que estar improvisando en la marcha, ya que la demanda de los gobiernos es enorme con poco personal y recurso.

Incluso, ahora el Gobierno de la Ciudad pretende sostener el verano, el rebrote y la pandemia con los “testeos masivos a turistas” a cargo de las UFUs también y 4 dispositivos extras abiertos en la Ciudad. Es decir, el doble de tareas y responsabilidades pero con el mismo salario. Esto trajo el quiebre absoluto de la moral de muchxs profesionales de la mano de renuncias masivas, hartos de un maltrato permanente que parte desde el propio Estado que dice cuidarlxs y valorarlxs.

No se puede sostener el ánimo ni las ganas de luchar contra la pandemia en estas condiciones. Necesitamos el pase a planta permanente de todxs lxs contratadxs en las UFUs, salarios acorde a la canasta familiar, recursos y personal pertinente para el cuadro de rebrote que tenemos en Argentina. Que los gobiernos de turno valoren realmente a los trabajadores de la salud, denunciando estos contratos miseria, y la descarga de presiones y responsabilidades sobre la espalda de los mismos.

Necesitamos intervenir de conjunto todxs lxs trabajadores de la salud, así como en las últimas movilizaciones y paros de residentes y concurrentes y de Enfermería gran parte de las UFUs mostraron su presencia saliendo a la calle para luchar por sus condiciones laborales, mostrando solidaridad, respeto y compromiso, no solo por los pacientes, sino valorando el esfuerzo de cada trabajador que lucha codo a codo con sus compañerxs. Pongamos en marcha un gran pliego de reclamos en todas las UFUs:

Pase a planta permanente de todxs lxs contratadxs

Salarios igual a la canasta familiar

Que se respete la jornada laboral sin presiones por fuera de la prestación de guardia

Por el reconocimiento profesional de Enfermería