Este lunes, los trabajadores portuarios de Terminal Puerto Rosario se movilizaron masivamente hasta las puertas del sindicato Supa. Le exigieron a la conducción del gremio que profundice la lucha por la reincorporación de todos los despedidos y el pago de los salarios caídos.

Los trabajadores reclamaron una asamblea, y el Supa respondió con el envío de una patota y con un operativo represivo en las puertas del sindicato que contó con casi media centena de efectivos policiales. Mientras tanto, los voceros del Supa salieron por los medios diciendo que ya no había vuelta atrás y que los 5 despidos que restaban tenían causa.

Pero los trabajadores permanecieron movilizados y tras varias horas entraron a una reunión con el sindicato. Los trabajadores decidieron que la lucha seguirá hasta que se reincorporen a todos los compañeros portuarios.

Todavía se tiene que definir cómo los trabajadores van a seguir con esta lucha. Es necesario un paro regional para poner en jaque a todas las terminales portuarias (son 9 y en TPR hay solo 2). Y con todas las terminales portuarias de la región paradas, convocar a todas las organizaciones de lucha y sindicatos combativos a una gran movilización hacia el poder político. Es necesario rodear de solidaridad esta enorme lucha, reclamar la reincorporación de los despedidos, el pago de los salarios adeudados y seguir la pelea a fondo.

Un plan de flexibilización laboral a la medida de las patronales

El conflicto se profundizó la semana pasada, cuando en una audiencia en el Ministerio de Trabajo en Buenos Aires, las partes acordaron una prórroga de la conciliación obligatoria por 5 días. Tras dictarse la conciliación, al día siguiente los trabajadores fueron a los portones de ingreso, pero ninguno pudo entrar. La empresa Terminal Puerto Rosario, comandada por Vicentín y la chilena Ultramar, desconocieron la conciliación y demostraron que siguen ensañados en sus planes. El gobierno nacional, el gobierno provincial, el ministerio y el Enapro (ente regulador) miran para otro lado, mientras estas empresas multimillonarias desconocen todo y pretenden atropellar al colectivo obrero.

En este marco, se está discutiendo la necesidad de aplicar un plan de flexibilización laboral, y al mismo tiempo se desarrollan disputas  entre los grupos empresariales por la concesión. El conflicto comenzó con un justo reclamo salarial frente a la pérdida por la inflación. Pero luego la empresa arremetió con 25 telegramas de despidos, para luego intentar avanzar más e ir por un plan de precarización de las condiciones de trabajo, llevando los turnos de 6 a 8 horas y eliminando de esa manera un turno.

La última propuesta de la patronal es dejar en la calle a 5 compañeros, en una clara intención de golpear la organización obrera al interior de la terminal portuaria, para luego avanzar en sus planes de flexibilización.

Viva la lucha de los trabajadores portuarios, tienen todo nuestro apoyo.