Un alto acatamiento del paro puso de manifiesto lo sentido del reclamo, cuando la masa de los municipales cobra salarios de indigencia.

Según los propios gremios unos 1700 municipales cobran menos de 30 mil pesos, y una mayoría ronda los 40 mil. Trabajadores con 10, 15 y 20 años de antigüedad están muy lejos de la canasta básica hoy en 100 mil pesos, tienen salarios de indigencia.

El intendente macrista cerró por decreto un aumento del 51% anual cuando la inflación no bajará del 80% mientras crece mes a mes esa estimación.

La miseria salarial también tiene las huellas del PJ

El PJ lanusense sacó un tardío comunicado en “apoyo” a la lucha con frases desopilantes. Dicen apoyar a los que luchan y reclaman una recomposición salarial acorde a los índices inflacionarios del país, mientras sus propios gobierno nacional y provincial vienen aplicando un ajuste al conjunto de los trabajadores, y particularmente a los estatales, con pérdida salarial frente a la inflación durante los últimos 3 años.

En primer lugar debemos decir que este derrumbe salarial de los municipales comenzó en años anteriores de intendencias peronistas, ya que históricamente el salario municipal es de los peores convenios de trabajo del país. En segundo lugar, los intendentes peronistas vecinos, y en general de todo el conurbano, mantienen los mismos salarios de miseria.

Hoy, Grindetti coincide con Cristina Kirchner y el conjunto de los intendentes peronistas en el objetivo de transformar a los desocupados, que cobran un programa social de $20 mil pesos, en mano de obra barata, sin derechos y fuera de convenio para realizar tareas municipales, y que eso sea una presión aún mayor para bajar los salarios de los municipales, lo que denunció Belliboni del Polo Obrero. La precarización laboral y miseria salarial es una política de Estado, de los Fernández, Batakis y compañía para cumplirle al FMI.

¿Cómo sigue la lucha?

Uno de los sindicatos, el Semla (Sindicato de Empleados Municipales de Lanús), liderado por Chazarreta, miembro a su vez del PJ lanusense, no convocó a las medidas de fuerza y se reunió con Grindetti sin ningún mandato de los municipales. Lo que pinta de cuerpo entero a esta conducción gremial es que en dicha reunión “pidieron” que ¡los mensualizados tengan un salario por encima del Potenciar Trabajo de $20 mil! Es decir que ¡hoy ganan menos!

Es necesario profundizar el plan de lucha, como lo han resuelto los trabajadores municipales nucleados en el STML, llevando adelante la medida de 72hs. El reclamo salarial no puede quedar por detrás de la inflación que hoy no baja de 80%, y con cláusula gatillo frente a una posible disparada inflacionaria o hiper. Ningún salario puede estar por debajo de la canasta básica, la línea de pobreza, hoy en 104 mil pesos. Por último, levantar el reclamo de todos a planta permanente.

Todo el apoyo a los municipales de Lanús. Es urgente un paro nacional y plan de lucha por salario y trabajo, contra el hambre y la pobreza.