Se realizaron las elecciones para renovar el cuerpo de delegados en la fábrica Pirelli. La Lista Negra logró recuperar 12 de los 14 cargos en juego, obteniendo una votación general de casi el 70% de los votos. El cuerpo de delegados de Pirelli permanecía en manos de la lista Violeta de Wasiejko (ex dirección del Sutna), lo que implicaba un bloqueo para el desarrollo de la organización de la seccional recuperada y el sindicato. El rechazo a la Violeta se había manifestado hace dos años -en la última elección de delegados- cuando dos compañeros que se habían presentado en forma independiente, ganaron sus sectores. Ellos mismos fueron víctimas de una enorme persecución por parte de la burocracia y la patronal, que lograron su objetivo de quebrarlos.

 

En esta oportunidad, y ya con el sindicato y la seccional recuperadas, los compañeros de la Lista Negra barrieron con los delegados violetas. Los trabajadores de Pirelli apoyaron masivamente un cambio rotundo en los métodos y la orientación de la organización gremial desde la recuperación de la seccional y el sindicato, a pesar de las represalias patronales. Durante los últimos meses se convocaron dos asambleas generales de fábrica y asambleas en todos los turnos, sumado a la asamblea general del gremio. Todas ellas paralizaron la fábrica. También se pararon las armadoras por un accidente de trabajo, sumado a las inspecciones del Ministerio de Trabajo. El viernes anterior a la elección, la patronal descontó a todos los trabajadores el 50% o todo el premio de producción, por los paros realizados contra los despidos de trabajadores de agencia. A pesar de la represalia patronal, la campaña por el reingreso de estos compañeros fortaleció la organización de los trabajadores de Pirelli.

 

No sólo hay un salto respecto de la elección previa del cuerpo de delegados, sino también un crecimiento en la cantidad de compañeros que votaron a la Lista Negra en relación con la elección de Seccional de hace sólo siete meses. Los 700 trabajadores de Pirelli que se pronunciaron en las urnas han fortalecido a la actual conducción del sindicato y de la seccional. Al mismo tiempo, esta nueva etapa tendrá el desafío de llevar adelante un plan de acción que conquiste las reivindicaciones pendientes.

La campaña por la recuperación del cuerpo de delegados llamaba a “fortalecer nuestro sindicato, lograr las mejoras en cada sector y terminar con el atraso salarial”.

 

La votación contó con una altísima participación (90%). Los compañeros de la Lista Negra ganaron en los sectores de Semielaborado y Armado, los dos más grandes de la fábrica, con el 80% del apoyo. En Galpón B y Mantenimiento, la Negra se impuso frente a los candidatos de la Violeta por el 70%. El sector de Vulcanizado recuperó el cargo de delegado con una votación cercana al 63%. A pesar de estos triunfos, en el sector del Banbury la Negra no pudo alzarse con el triunfo. La organización antiburocrática en este sector, donde reinan las condiciones de insalubridad, será un punto central para desarrollar en la próxima etapa.

 

Estamos ante un salto en la organización clasista de los trabajadores de Pirelli, y un ejemplo para el movimiento obrero, demostrando con qué métodos se puede echar a la burocracia. Con este nuevo paso, la dirección del Sutna recuperado reúne mayor fuerza para enfrentar los ataques a los trabajadores del neumático y prepara las condiciones para una pelea del conjunto del gremio por las principales reivindicaciones.