Desde la madrugada del miércoles 7 de abril, los piquetes de los trabajadores de la salud de Neuquén bloquean de manera permanente las rutas petroleras de acceso a los yacimientos (Fortín de Piedra y otros) en la zona de Añelo, en Vaca Muerta se mantienen permanentemente. Las comunidades mapuches también han cerrado las tranqueras de sus campos, para impedir el paso por caminos alternativos.

La voluntad de lucha está asentada en el enorme apoyo popular a los reclamos de los trabajadores de la salud.
El jueves 8, luego de una reunión en las puertas del Hospital Castro Rendón, a donde confluyó una columna de varias cuadras de la movilización del Polo Obrero, partió una caravana para reforzar los piquetes en la zona petrolera. En Cutral Co se convoca a movilizar nuevamente, en Chos Malal hubo movilizaciones la mañana del jueves, y así en toda la provincia.

La actividad petrolera ha comenzado a sentir los efectos de los piquetes. Hay 31 equipos que han debido paralizar su actividad, 18 de los cuales son de perforación (Río Negro, 8/4). Las filas de camiones y equipos varados se extienden por kilómetros.

El gobierno de Omar Gutiérrez esta jaqueado. Además, el viernes se realizará una marcha en Neuquén en apoyo a los trabajadores, y desde el Partido Obrero estamos impulsando la realización de cacerolazos en las barriadas. La huelga de la salud debe triunfar, porque si triunfa ganamos todas/os.

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