Sindicales
12/12/2025
Neuquén: paro y movilización masiva en la jornada de las CTAs
Una conquista de las asambleas y las seccionales recuperadas y la oposición.
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Movilización.
En el último plenario de Aten, que recogió los mandatos de las asambleas provinciales, se impuso por más de 2.000 votos la moción impulsada por las seccionales opositoras. En esa moción estaba incluído que en el marco de la jornada que convocaron las CTAs para el 11/12 nuestro sindicato convocaría a paro y movilización provincial a Casa de Gobierno. Sin embargo, la conducción provincial (TEP-Celeste) cuando publicó las resoluciones de ese plenario no incluyó este paro y movilización. Lo ignoró olímpicamente.
Pero cuando se acercaba la fecha y las seccionales de Capital y Plottier convocamos a parar y movilizar, a las pocas horas la conducción provincial convocó al paro.
Así que este jueves 11, junto a los sectores estatales y hospitalarios (estos últimos en el marco del paro convocado por la CTA-A de Neuquén), marchamos por el centro de Neuquén. Una columna de más de 3.000 trabajadoras y trabajadores, a los que se sumaron otros sectores sindicales y sociales.
El gobierno recibió una fuerte respuesta de la base de Aten, y también la recibieron aquellos dirigentes como el secretario general de ATE que aceptó sin chistar la oferta oficial que mantiene a los salarios bajo la línea de pobreza y en la perspectiva de seguir perdiendo poder adquisitivo.
El discurso del fin de mandato
El próximo 13/12 en Aten asumen las nuevas directivas electas el pasado 29/5. Por lo tanto esta movilización y el acto que se realizó en Casa de Gobierno fue la despedida como secretario general de Aten de parte de Marcelo Guagliardo.
Fue un discurso preventivo. En el cual se dedicó fundamentalmente a criticar a la oposición y trazó entrelíneas como piensa los próximos pasos el TEP-Celeste.
Se dedicó a recitar las viejas recetas de las burocracias sindicales (y se quejó que así lo caractericemos) cuando abren el paraguas hacia lo que viene. Dijo que las huelgas nunca son a todo o nada. Una verdad de perogrullo, porque el desenlace de una lucha depende de la relación de fuerzas entre la patronal y las y los trabajadores, y no es una cuestión ultimatista. Pero es una de las frases preferidas para, luego de rechazar la propuesta oficial porque no era anual, la actualización no era mensual, no se incluía el presentismo al básico y otros reclamos, preparar el consabido argumento “esto es todo lo que vamos a conseguir, mejor aceptemos”, que el TEP-Celeste ya utilizó muchas veces, y en especial en la huelga del segundo semestre pasado y fue sistemáticamente rechazada por las asambleas hasta que la impusieron con los “votos encuestas”.
Quien sugiere que no se puede todo, cuando el movimiento de lucha no ha desplegado aún todas sus energías, en el contexto de la necesidad de derrotar la reforma laboral y teniendo votado abrumadoramente el no inicio del ciclo 2026, es un anticipo de tirar los guantes ante cualquier maquillaje a la misma propuesta oficial que ya ha sido rechazada.
No por casualidad habló sobre la importancia de la responsabilidad en una dirigencia sindical, como si pudiera reivindicarse lo contrario. Lo que ocurre es que para Guagliardo, aunque no se anime a decirlo abiertamente, el no inicio 2026 ya votado es una “irresponsabilidad” que miles votaron en asambleas a mano alzada.
La reforma educativa de Milei
En este aspecto afirmó que la propuesta del liberfacho es un ataque a las reformas curriculares que el TEP-Celeste impulsa desde hace 10 años en distintos niveles y modalidades de la mano con las y los ministros de educación, antes del MPN y ahora de La Neuquinidad.
Está claro que el objetivo de Milei y los gobernadores de todo pelaje es liquidar las conquistas de las y los trabajadores de la educación. Pero esos reformas promovidas de conjunto entre el TEP-Celeste y la patronal no colisionan en lo esencial del objetivo de Milei: lavar los contenidos científicos de la educación, deseducar con los “tránsitos o trayectos”, la eliminación de las especificidades de las asignaturas y las modalidades y la polifuncionalidad docente con salarios bajo la línea de pobreza. Para enfrentar la cruzada antieducativa de Milei y los gobernadores hay que defender más contenidos científicos en las escuelas, imponer la ESI en todos lados, recuperar la tarea docente plena, y no transformarlos en “llenadores de planillas” e informes.
Las y los trabajadores de la educación de Neuquén, hemos dado muestras titánicas cuando defendimos estos puntos contra la Ley Federal de Menem.
La gran K
Otra receta discursiva del secretario general de Aten fue en lo referido a cómo posicionarse ante los diferentes y los antagónicos. Un llamado a suprimir toda crítica interna en función del famoso “enemigo principal”. Algo que es sacado del arcón del peronismo como chicana contra la izquierda y el clasismo.
Era para Guagliardo un mal menor Scioli que Macri, hoy dos sostenes de la política de Milei. Lo era Massa a Milei, cuando hoy en el tema central de la vida de las y los trabajadores, Sergio Massa ha convocado a la CGT a no rechazar la reforma laboral.
El recurso del mal menor sí que es la vía muerta. No la independencia política de todas las variantes patronales, las que fungen de oficialistas y las que lo hacen de “opositoras”.
Este discurso de fin de su mandato refleja una cuestión: el TEP-Celeste, como expresión de una variante de seguidismo al PJ, vive una crisis muy aguda. Aun conduce Aten porque adelantó lo suficiente las elecciones (en mayo 2025, casi siete meses antes del vencimiento de los mandatos).
Un recurso que esta vez le salió bien. Pero no alcanza con ganar elecciones, un sindicato para dirigirse debe ser con una estrategia, un método democrático y la independencia absoluta, irrenunciable, de la patronal.
No ha sido ni es la estrategia ni los métodos del TEP-Celeste. Tampoco la independencia política de las variantes patronales. De allí que su secretario general por los últimos cuatro mandatos, haya terminado hoy con un discurso donde el gobierno de Figueroa pasó inadvertido. Estuvo más preocupado por las seccionales recuperadas y la oposición.
Ahora hay que poner toda la carne a la parrilla el 18/12, para derrotar una reforma laboral (o modernización laboral en palabras de Cristina Fernández). Y siempre como guía el no inicio 2026 y su preparación desde ahora mismo.
