Sindicales

12/8/2022

No docentes: Fatun cierra otra paritaria a la baja y refuerza su alineamiento con el gobierno ajustador

21% de acá a fin de año en 3 cuotas, lo que constituye un incremento del 62% anual, frente a una inflación proyectada del 90%.

Delegado APUBA Sociales/Agrupación Bordó

Reapertura paritaria no docente

Una vez más, la burocracia de la federación nacional no docente cierra una paritaria a la baja y de espaldas a las y los trabajadores de las Universidades Nacionales para los próximos 5 meses (de agosto a diciembre), con un 21% en 3 cuotas (7% en agosto, 5% en septiembre y 9% en diciembre), que da un total de marzo a diciembre del 62%, muy por debajo de la proyección de la inflación anual del 90%. Como lo venimos sufriendo desde 2014, bajo tres gobiernos distintos, nuestros salarios seguirán cayendo frente a la inflación, consolidando una pérdida de alrededor del 30% y una transferencia enorme desde las y los trabajadores a los sectores capitalistas.

El acuerdo paritario también establece un monto fijo, no remunerativo ni bonificable, para las categorías iniciales a cuenta de futuros aumentos para los próximos 5 meses de $8 mil para la categoría 7 y $4 mil para la categoría 6. Se vuelve así a las sumas fijas, como durante el macrismo, en lugar de reclamar un mayor aumento salarial en el básico que impacte también en los adicionales y, además, distorsiona y achata el escalafón del convenio no docente.

En el caso de las y los no docentes de la UBA, desde hace 14 meses tenemos congelada la paritaria local que negocia la Directiva del sindicato Apuba con el Rectorado, mientras que en el mismo período ningún otro valor de la economía se mantuvo sin cambios y los precios de alimentos se han más que duplicado.

El cierre de la paritaria se dio un día antes de que se conociera la inflación del 7,4% de julio, la más alta desde 2002, y unos días después de que la Fatun saludara, mediante un comunicado donde no dice nada sobre las condiciones salariales y de trabajo no docentes, la asunción de Massa como superministro de Economía, que desembarcó después de la devaluación de Batakis con una serie de anuncios de tarifazos en los servicios públicos y ratificación del equilibrio fiscal. Esto significa un recorte de lo subejecutado del presupuesto universitario ($51 mil millones) para cumplir con el pacto del gobierno con el FMI. No hace más que golpear los bolsillos de las trabajadoras y los trabajadores, que ya venimos soportando el ajuste sin una reacción por parte de las burocracias sindicales que, frente a la profundización de la crisis, salen a respaldar esta última ficha que se juega el gobierno del Frente de Todos con la designación de Massa. 

La entrega del salario con la firma de la paritaria por parte de las burocracias de Fatun y Apuba, el mismo día que las y los docentes universitarixs de AGD UBA y Conadu Histórica estaban de paro por la paritaria y un aumento de emergencia, junto al conjunto de la docencia de todos los niveles, también es un golpe a esa lucha por el salario.

Mientras la Fatun y la CGT convocan a una movilización para el 17 de agosto al Congreso en apoyo al gobierno, sin llamar a un paro frente a la devaluación de nuestro salario y condiciones de vida, desde el sindicalismo combativo, junto al movimiento piquetero que viene de grandes movilizaciones en todo el país y un acampe, estamos convocando a movilizar ese mismo día a Plaza de Mayo, al centro del poder político responsable de la crisis y el ajuste en curso para ponerle un freno. Frente al plan del gobierno y el FMI, las y los trabajadores tenemos que intervenir y salir a las calles para reclamar y reforzar la campaña por un paro activo nacional y un plan de lucha.