Los gremios marítimos y portuarios están luchando fundamentalmente contra la flexibilización laboral y por el salario.

 

El 30% de los trabajadores se encuentra en negro, los grandes pulpos que 'desembarcaron' con la privatización, como es el caso de Exolgan, enrolan a los trabajadores como empleados de comercio y tercerizan tareas en empresas de cualquier tipo.

 

El jueves 11 una coordinadora de doce gremios del sector inició un paro de 24 horas, con una movilización frente a la Administración General de Puertos, para reclamar el reencuadramiento de los trabajadores, un aumento general de salarios y diversas medidas contra la política oficial en materia de seguridad e higiene en los puertos. El sindicato de los marítimos (Somu), uno de los más importantes, ya había iniciado medidas de fuerza una semana antes en los buques remolcadores. Ahora amenaza extenderlas a los buques transportadores de combustible y cerealeros.

 

Los grandes importadores y exportadores han reclamado del gobierno la aplicación del artículo 24 de la Ley de Emergencia Económica para impedir las medidas de fuerza (“servicios esenciales”).