Sindicales

24/9/2020

Se realizó un paro nacional en la Anses por la apertura de la paritaria

Plan de lucha y asambleas con mandato: que se vote el pliego paritario.

Tribuna Estatal Anses

El lunes 22, mientras el Anses llegaba a todos los medios de comunicación por la disputa en torno a las bases de datos que habilitarían la compra del dólar ahorro a través del home banking de los bancos, sus trabajadores realizamos un paro nacional con una desconexión masiva, “un apagón informático”, como parte de las medidas propuestas por Apops, uno de los cuatro sindicatos que junto a ATE, UPCN y Secasfpi deben discutir la paritaria sectorial. Luego del Conicet, es el segundo paro nacional de un organismo público contra el congelamiento salarial del gobierno y por la apertura de la paritaria. Según Apops, la adhesión fue del 90%.

La paritaria de los estatales nacionales llegó con cuatro meses de atraso.  El gobierno, en complicidad con los gremios, dejó pasar las cláusulas de revisión de noviembre y marzo, previstas en la discusión 2019/2020. Según los datos oficiales del Indec, la inflación interanual a mayo 2020, cuando venció nuestra paritaria, se colocaba en el orden del 43,4%. Es decir, casi 14 puntos por encima de nuestra paritaria. A este desfasaje hay que sumarle la inflación de junio (2,2), julio (1,9), agosto (2,7) y por supuesto el mes en curso. Un punto no menor, es el dato de la canasta familiar, calculada por la junta interna de ATE-Indec en $70.600 al 31/7, ningún trabajador debería ganar menos que eso.

Límites de la convocatoria

Aun con un discurso combativo, la directiva de Apops no saca los pies del plato. Si bien mediante comunicados y  cartas documento a la directora ejecutiva Fernanda Raverta, ha puesto en debate la apertura de la paritaria específica de Anses, las asambleas que se realizaron tuvieron como objetivo contener el descontento de los trabajadores, por ello la dirección se negó a votar un pliego de reivindicaciones y un plan de lucha para llevarlo adelante, incluso cuando en las mismas se pusieron de manifiesto una inmensa cantidad de reclamos, como la falta de recategorización, la situación de los tercerizados o la cuestión del incumplimiento de los protocolos por Covid-19 en una cantidad de las UDAI (Unidades de Atención Integral).

Sin ir más lejos, cargan las responsabilidades sobre Raverta, que las tiene. Pero lo hacen para desligar de las mismas al gobierno nacional, que ha priorizado el acuerdo con los bonistas y ahora con el FMI antes que el salario de los estatales.

Por el salario y todas las reivindicaciones

La “estrategia”  de no colocar un número a la discusión y no discutirlo con el conjunto de los compañeros, solo es afín a mantener el pacto social con el gobierno, que viene manteniendo a raya las paritarias del conjunto del movimiento obrero a excepción del Sutna, que hace algunos días rompió todos los techos salariales firmando un 37% retroactivo y hasta marzo. Semejante logro se hizo mediante la organización y la lucha, con asambleas con mandato, movilizaciones al Ministerio de Trabajo y un plan de lucha nacional. Los trabajadores de Anses tenemos las condiciones para salir a la pelea por el salario.

Es necesario realizar asambleas en cada lugar de trabajo, sin distinción de gremio, para deliberar y resolver un plan de lucha por la apertura de las paritarias, de la Copeca (Comisión Permanente de Carrera) y para garantizar las condiciones del organismo para la atención presencial en medio de la pandemia. Que no se cierre ningún acuerdo sin ser discutido y votado por los trabajadores.

Aumento salarial del 40% equivalente a la estimación inflacionaria para este año. Cláusula gatillo automática si se dispara la inflación.

Apertura de la Copeca: recategorización de todos los compañeros que atienden al público con categorías menores a la 15.

Pase a planta permanente de todos los trabajadores contratados y tercerizados.

Reincorporación de todos los despedidos.

Por un protocolo de bioseguridad elaborado y controlado por los trabajadores.