La empresa transnacional de capitales chino-japonesa Midea-Carrier, con su planta de producción en Río Grande, aplicó descuentos salariales totalmente regresivos que van desde los 600 mil hasta 700 mil pesos a los salarios netos de bolsillo de los operarios por los 10 días del paro metalúrgico en el mes de mayo, desobedeciendo claramente el acuerdo que establecía el pago de los días de huelga por tiempo indeterminado. Los trabajadores se declararon en estado de alerta y movilización, y mediante asambleas lideradas por los propios trabajadores, votaron en unanimidad ir al paro como medida contundente paralizado la producción. El descuento  afectó también a supervisores de línea de producción nucleados en la entidad gremial de Asimra.

La lucha obrera no se detiene ante el ataque de las patronales

El paro comenzó a las 21 horas del miércoles. Ante el clima de incertidumbre, las "partes" se reunieron para resolver el conflicto, con la presencia de directivos de la empresa, integrantes de otras empresas (Mirgor), funcionarios provinciales y dirigentes de la UOM. Finalmente, se acordó el pago de los días del conflicto. La noticia corrió como reguero de pólvora por el resto del parque industrial y generó una enorme solidaridad. El hecho real muestra que las patronales quieren aprovechar estos meses para presionar por un acuerdo sobre el régimen de promoción y los aranceles que los beneficie, lo que incluiría nuevos ataques a los trabajadores y trabajadoras. La rápida reacción obrera fue clave para frenar este intento. Queda claro que no hay una verdadera "paz social". Los empresarios y las patronales electrónicas continúan buscando golpear al colectivo de los trabajadores ante la finalización de los contratos o en las en nueva instancias en las negociaciones en las paritarias. Por eso es clave mantenerse movilizados, reclamando asambleas periódicas para ver la marcha de las negociaciones y fortalecer la lucha.

La organización y la intervención de los metalúrgicos es la clave de la victoria

Las conducciones gremiales deben convocar a un debate abierto y verdaderamente democrático, realizando plenarios abiertos y asambleas generales con todos los sectores que componen la gran comunidad trabajadora de la provincia, para preparar la intervención y la resistencia mediante una gran huelga general provincial como tarea central, reforzándola con  movilizaciones masivas en toda la provincia. No podemos confiar en las promesas de la patronal ni en el gobierno nacional reaccionario de Milei ni en el provincial, que ha calificado este acuerdo como "bueno". Solo la organización independiente de las y los trabajadores podrá derrotar este plan económico del FMI y garantizar la defensa irrestricta de la soberanía, la industria fueguina con sus puestos de trabajo, toda la matriz productiva regional y el derecho a seguir habitando Tierra del Fuego.

Vamos por el triunfo del Garrahan y de todas la luchas

Paso a los trabajadores. -

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