Sindicales

14/8/2020

Enorme reagrupamiento obrero, programático y de lucha

El Plenario del Sindicalismo Combativo votó No pago de la deuda, repudio a la entrega de la CGT-CTA y una jornada nacional de lucha.

Foto: Willy Monea

Un nuevo Plenario Nacional del Sindicalismo Combativo (segundo virtual) volvió a ser el ámbito de debate y de organización de las luchas obreras que están en curso, con más de 50 conflictos presentes: Latam, Campo del Tesoro, Clínica Plaza de Escobar ocupada por sus trabajadores, Luz y Fuerza Córdoba, Cerámica Loimar de Tandil también ocupada, Gate Gourmet, municipales de Perito Moreno, Municipales de Jesús María (Córdoba), despedidos del Hospital de Esquel (Chubut), residentes y concurrentes de CABA, trabajadores de Uta Córdoba, delegados de Siderca (UOM), Asamblea de prestadores de salud de Ioma, las agrupaciones opositoras de Comercio de Carrefour y Coto, la Multicolor de Atech Madryn Chubut en lucha por el pago de dos meses de salarios atrasados y el pago en cuotas del aguinaldo, la triunfante Mendicrim, Algodonera Avellaneda (adhesión, debido a una acción de lucha superpuesta), trabajadores de los Casinos, delegados de Luz y Fuerza de Mar del Plata, compañeros de la organización piquetera “Votamos Luchar”, que se unieron por primera vez al Plenario, despedidos de Clínica El Talar, entre muchos otros.

Junto a estos numerosos conflictos, estuvieron las luchas de los sindicatos integrantes del PSC, como la gran batalla del Sutna para imponer el protocolo sanitario elaborado por el sindicato y aprobado unánimemente por su cuerpo de delegados, que venían de un paro en Fate para obligar a la patronal a cumplirlo, después de un paro nacional del gremio y varios paros en Bridgestone, con más de 700 casos que fueron aislados ; la lucha de la Seccional de la Unión Ferroviaria Oeste, también por los protocolos ante contagios en el Sarmiento; las huelgas virtuales de la AGD-UBA y de los Sutebas Multicolores; las huelgas y manifestaciones arrancadas a la burocracia celeste de Aten por las seccionales y minorías multicolores, las jornadas del Polo Obrero y Frente Piquetero Nacional; las 72 horas de paro virtual de Ademys de No Inicio y la caravana de la semana siguiente; la jornada del Sindicato Ceramista de Neuquén en defensa de las fábricas recuperadas bajo gestión obrera; las luchas de los trabajadores de la salud –como la Cicop, la
Asamblea de Residentes y Concurrentes de CABA, o la comisión interna del Hospital Italiano o la UTS de Córdoba, entre otros- ; de la Comisión Interna del Inti por el pase a planta permanente; de la comisión interna de Ate-Educación La Plata por la reincorporación de los despedidos; de la Comisión Interna Gráfica de Morvillo también por protocolos, y la lista sigue.

Con este enorme reagrupamiento obrero, sesionaron 350 compañeros y compañeras, representantes de sindicatos, seccionales, comisiones internas, cuerpos delegados, decenas de ellos secretarios generales, y cientos de delegados y activistas. Al mismo tiempo fue seguido por distintas plataformas por más de mil trabajadoras y trabajadores.

El Plenario fue abierto por el secretario general del Sutna, Alejandro Crespo, y cerrado por Romina Del Plá, secretaria general del Suteba Matanza. Entre los dirigentes que integraron la mesa de apertura y de cierre hicieron uso de la palabra Rubén Pollo Sobrero, secretario general de UF Oeste; Guillermo Pacagnini, secretario general de la Cicop; Ileana Celotto, secretaria general de la AGD-UBA; Cristina Mena del MTR 12 de Abril; Alejandro López, secretario general del Sindicato Ceramista de Neuquén; Lorena Gentile, activista de Mondelez; Eduardo Belliboni del Polo Obrero; César Latorre, secretario general de la Comisión Interna del Hospital Italiano; Claudio Dellecarbonara, minoría de la AGTSyP, y Angélica Lagunas, minoría de Aten-Capital.

Un programa obrero y un plan de acción

Este amplio crisol clasista fue el laboratorio de resoluciones programáticas y de lucha estratégicas, que arman a la clase trabajadora para intervenir en el actual cuadro de ofensiva del gobierno y de las patronales que descargan su crisis con la complicidad de la burocracia. Buscan avanzar con la agenda fondomonetarista de reformas laboral y jubilatoria para que la histórica bancarrota a la que los capitalistas llevaron al país la paguemos los trabajadores.

El plenario votó una declaración que plantea que el acuerdo con los bonistas y la “poscuarentena” de las patronales marcan el rumbo del gobierno. Caracterizó el acuerdo del gobierno de los Fernández con los fondos de inversión como un pacto colonial, que nos lleva de cabeza a las garras del FMI con su conocida agenda ajustadora. Denunció y caracterizó a la burocracia sindical de la CGT y las CTA como pivotes de la ofensiva del capital contra los trabajadores, y ratificó su estrategia de independencia política de las organizaciones obreras.

https://prensaobrera.com/sindicales/protocolo-del-sutna-una-propuesta-para-enfrentar-el-covid-19/

El programa votado incluye, entre otros puntos: rechazo a cualquier tipo de flexibilidad o reforma laboral; defensa de los convenios colectivos; sistema único de salud, nacionalizando el sector privado, tanto la rama de servicios como los laboratorios, bajo control de sus trabajadores; protocolos obreros en defensa de la salud de todos los trabajadores, elaborados y supervisados por las organizaciones obreras recuperadas o por comités obreros de seguridad e higiene electos en cada lugar de trabajo; prohibición de despidos, ocupación de toda fábrica que cierre y estatización bajo control obrero; reparto de horas; asistencia estatal a las gestiones obreras y recuperadas; expropiación sin pago de Vicentin, para recuperar el desfalco al Estado y como parte de un plan real de soberanía alimentaria y preservación de los puestos de trabajo; no al pago de la deuda externa; ruptura con el FMI; impuesto progresivo a las grandes rentas y fortunas, para recaudar 15 mil millones de dólares para asistir la emergencia sanitaria y económica; paritarias y salarios ajustados por inflación; 82% móvil de haber jubilatorio; seguro universal de 40 mil pesos; defensa del poder adquisitivo del salario; desmantelamiento del aparato de represión, fuera el ejército de los barrios, aparición con vida de Facundo Castro y Fuera Berni.

Con este programa de independencia obrera, el plenario nacional votó apoyar a todas las acciones –decenas de ellas- planteadas por las numerosos luchas que asistieron-, una jornada nacional de lucha para las primeras semanas de setiembre, y plenarios regionales en Tierra del Fuego-Santa Cruz-Chubut, y Río Negro-Neuquén.

El PSC resolvió así un programa de emergencia obrero para enfrentar la actual crisis sanitaria y económica, que coloca al Plenario del Sindicalismo Combativo como la única corriente del movimiento obrero que enfrenta la entrega nacional del gobierno y de la burguesía nativa. Reafirmó, con un método de debate y frente único, su rol de referencia nacional del clasismo contra el pacto social en marcha de las direcciones integradas al gobierno, tanto de los sindicatos como de las organizaciones sociales.

Polémica

En un marco de acuerdo mayoritario, uno de los debates que se desenvolvió en el encuentro fue el carácter que debía adoptar la jornada nacional. Un sector de los participantes planteó que la jornada nacional convocada por los sindicatos clasistas debía ser convocada en común por la izquierda, concretamente el FIT-U.

Por varios motivos fue rechazada y con diversos argumentos desde distintos sectores. La Coordinadora Sindical Clasista la rechazó desde una posición política histórica del trotskismo. Los sindicatos recuperados agrupan a la masa de sus afiliados y tienen precisamente la virtud de agrupar al conjunto de la rama que representan y luchar con la masa de los compañeros cuando hay disposición para ello. Pero porque representan a la totalidad de los afiliados, no pueden convocar como brazos de la izquierda que es a ojos vista minoritaria todavía en la base del movimiento obrero. Sería una convocatoria inútilmente divisionista que no contribuye a la evolución de los trabajadores y de sus mejores activistas todavía no ligados a la izquierda.

Por otro lado su contenido es profundamente electoralista, porque pretende poner a los candidatos del FIT al frente de una movilización a la que se convoca a las organizaciones de trabajadores como telón de fondo. Es electoralista y de aparato. El favor de la vanguardia obrera la izquierda revolucionaria lo tiene que ganar con su propia agitación de conjunto, mostrando por cuál camino los trabajadores pueden hacer pagar la crisis a los capitalistas y formular las consignas y programa que marquen una salida de conjunto a la crisis, al tiempo que gravita en la arena política de la lucha de clases como alternativa obrera y socialista.

De nada sirve una sustitución que no corresponde del papel de los sindicatos clasistas que deben tomar en sus manos la lucha, y colocar al PSC como canal de organización de los trabajadores que en todos los gremios chocan todos los días con la entrega de la burocracia sindical, pero que están muy lejos de haber adherido a las posturas de la izquierda en plano político.

La CSC, explicaron sus dirigentes, ha impulsado la adhesión de asambleas en favor del impuesto a las grandes rentas y fortunas del FIT (AGD, Sutebas, etc) y reunido 5.000 firmas en favor de este proyecto, lo cual muestra la línea de politización de la vanguardia obrera sin ultimátum, sin demagogia y sin electoralismo.

MAC: faccionalismo rupturista

El Movimiento de Agrupaciones Clasistas, orientado por el PTS, debutó en el plenario –luego de dos años de boicotearlo– con una acción de provocación y divisionismo inaceptable. Centró sus intervenciones en atacar al Sutna, uno de los sindicatos fundadores del PSC. Sus principales dirigentes acusaron a este sindicato clasista de burocrático, antidemocrático y, en el colmo de las bajezas, patotero (una injuria a partir del violentamiento de una reunión de delegados del Sutna de parte de un dirigente de esta corriente). Asimismo, a pesar de haberse integrado a la mesa nacional del PSC, atacaron al plenario de antidemocrático (“nosotros promovemos plenarios amplios, que sean un espacio libre, dijeron”), y pusieron como ejemplo los plenarios de su agrupación, sin el programa ni los objetivos del PSC, “para apoyar a las luchas”. A dos semanas de su integración proponen disolver al PSC en “espacios amplios” y en un campo de confusión política y de disolución de su composición de trabajadores ocupados y desocupados organizados. Tampoco se manifestaron a favor de las resoluciones de lucha, punto crucial para su continuidad en un frente único de acción.

Los planteos de los dirigentes del MAC fueron duramente enfrentados por todos los sindicatos y corrientes sindicales presentes, pero resultó muy contundente el repudio efectuado por compañeras despedidas de la Clínica El Talar, que respondieron a la acción rupturista señalando que “los que tratan de romper o no paran de provocar son los que nos orientaron mal y por su culpa estamos despedidas”.

Las representaciones sindicales del MAC solicitaron y se les aceptó el ingreso al PSC luego de que públicamente señalaran que acordaban plenamente con el programa del PSC y su método de funcionamiento, basado en la democracia sindical. En su condición de miembros de la mesa nacional del PSC, a partir de ese compromiso, tienen la responsabilidad de defender este campo de independencia política obrera y de luchar con él.

La inmensa mayoría del plenario del PSC rechazó que quienes durante dos años lo atacaron desde afuera pretendan hacer lo mismo desde adentro, lo que solo refuerza a la burocracia sindical completamente integrada al gobierno en su cruzada contra los sindicatos recuperados, burocracia que para ello recurre a todo el peso del aparato del Estado.

En cambio numerosos activistas pusieron otro eje en el activismo obrero en la aparición con vida de Facundo, planteando Fuera Berni, que la CSC desenvolvió de entrada en la intervención de Celotto y que jamás el MAC ni el PTS hacen propia a pesar de que fue adoptada por el EMVyJ.

https://prensaobrera.com/sindicales/reformas-antiobreras-del-fmi-otro-capitulo-del-pacto-colonial-con-los-bonistas/

Contra el pacto social, Congreso de delegados con mandato y plan de lucha

La Coordinadora Sindical Clasista fue enlazando su propia inserción en las luchas de todas las provincias, algunas con fuertes manifestaciones obreras como la Córdoba de Luz y Fuerza, de la rebelión de UTA, de los grandes movimientos de municipales de la provincia. Los cordobeses de la Coordinadora Sindical Clasista impulsan el paro general en la Provincia, donde se enfrenta una ofensiva de conjunto de Schiaretti y que ha sido escenario además de ocupaciones de tierras y al otro día de nuestro plenario de una movilización de masas contra el gatillo fácil y la represión.

Desde la CSC defendimos a rajatabla la declaración acordada, la agenda de apoyo a las luchas sea Latam, Algodonera y tantas otras que se expresaron, haciéndolo como PSC para referenciar esta gran corriente que interviene en los sindicatos de todas las centrales. Justamente, nuestras compañeras y compañeros se destacaron por delimitar de cada ala de la burocracia: denunciamos la paritaria a la baja de Moyano y Palazzo, la especial entrega de las CTA, mostrando que la integración al gobierno fondomonetarista abarca no solo a los Daer y a los Cavalieri, sino a todas las alas incluida la centroizquierda degennarista y la izquierda maoísta de la CCC.

La intervención del Polo Obrero sumó el planteamiento reivindicativo de los $30.000 como seguro al parado e hizo especial hincapié en ocupar cada fábrica que cierre o despide masivamente, con el planteo programático fundacional del PSC que es la estatización bajo gestión obrera de las empresas en quiebra. Esto cuando son centenares las empresas en convocatoria y media Argentina es Vicentin y cuando AF retrocedió en chancletas en ese punto.

Hemos planteado también al debate de los participantes la exigencia de ruptura de las organizaciones obreras con el gobierno, impulsar un congreso de delegados mandatados por asambleas y un plan de lucha. Consignas que ganarán cada día más vigencia al calor de la crisis histórica que atraviesa el capitalismo y nuestro país. Ahora a organizar con todo los plenarios resueltos en el interior y la Jornada Nacional de Lucha la primera quincena de setiembre.

https://prensaobrera.com/sindicales/los-protocolos-en-los-lugares-de-trabajo-frente-al-aumento-de-los-contagios/