Los “Trabajadores del Transporte” que integran los cuerpos de delegados de la 60, la 540, agrupaciones combativas de numerosas líneas y un nutrido activismo, convocan nuevamente a medidas de acción este 11 de mayo, en diferentes puntos de la zona metropolitana: Puente Pueyrredón, Liniers, Ingeniero Maschwitz y Estación San Miguel, en el marco del plan de lucha resuelto.

El reclamo de los “autoconvocados” del transporte por los $100 mil de salario como principal reivindicación, y un plan de vacunación y protocolos obreros, ha cobrado un gran impulso los últimos días al calor de los cortes de rutas y puentes. Por su magnitud, ha llegado a los ojos de cada trabajador del transporte del país. Es la respuesta al completo estancamiento de la paritaria y la parálisis absoluta de la burocracia sindical, cuando nuestros salarios están por debajo de la canasta de pobreza hoy en 60 mil pesos. Roberto Fernández, abiertamente cuestionado, de espaldas al movimiento de lucha de los choferes, usa al gremio como un factor de presión propatronal, para obtener mayores subsidios para las empresas. Miguel Bustinduy, por su parte, -de la otra ala de la burocracia, la Agrupación Palacios- tuvo el descaro de decir que esta lucha “la maneja Fernández”. Como se ve, la burocracia sindical de todo pelaje ataca nuestro reclamo.

Amenaza de lockout patronal por tarifazos y subsidios

Las cámaras empresarias amenazaron con realizar un lockout patronal a partir del 7 de mayo, aunque por el momento la dejaron sin efecto ante una comunicación del Ministerio de Transporte comprometiéndose al desembolso de subsidios adeudados. Esta medida anunciada por parte de las cámaras patronales, la complementan con la extorsión con el no pago de salarios y mucho menos de un aumento. Exigen la actualización de los subsidios en base a los nuevos “costos” para mantener el servicio, que nadie conoce, lo que plantea la exigencia de apertura de los libros de las empresas bajo control de los trabajadores para conocer costos y destino de los subsidios. El gobierno de los Fernández guiado por la política de ajuste dictada por el FMI, pretende reducir el peso de los subsidios que tendrá por contrapartida el aumento de las tarifas, es decir un nuevo golpe al bolsillo popular, lo que lo condiciona porque aviva las tensiones sociales y encima en un año electoral. Se mira en el espejo de Colombia.

 

Por un planteo independiente de las patronales y del gobierno

En este cuadro de puja entre el gobierno y las patronales hay un punto en el que coinciden, y es en la rebaja de los salarios, ya que es un punto nodal del ajuste del gobierno de Fernández, sino veamos el “nuevo” salario mínimo de indigencia que está ahora en $23500. La movilización y los cortes “autoconvocados” deben profundizarse y extenderse, tomando el ejemplo de los trabajadores de Salud de Neuquén que obtuvieron un triunfo con el 53% de aumento. Esta lucha muestra un camino para todos los choferes en la perspectiva de construir una alternativa clasista en todo el gremio.

-Vamos por los $100 mil que reclamamos.

-Que los subsidios sean depositados directamente en las cuentas sueldo de los trabajadores como se hizo en el interior para garantizar pago de salarios. Apertura de los libros de las empresas bajo control de los trabajadores para conocer costos y destino de los subsidios

-Plan de vacunación para el transporte y protocolos obreros.

-Plan de lucha y paro del transporte por todas las reivindicaciones