Sociedad

24/7/2020

Bariloche: apertura del cerro Catedral en plena circulación comunitaria de Covid-19

La empresa Catedral Alta Patagonia no cumplió con los protocolos correspondientes.

Partido Obrero Bariloche

La presión empresarial ganó la pulseada en Bariloche una vez más y contra todos los pronósticos, el cerro Catedral inauguró la temporada de invierno 2020. Reprogramada para el jueves 23, debido a las intensas nevadas del día anterior que azotaron a toda la región, la apertura del cerro no podría darse en un contexto más desfavorable, demostrando que los intereses sanitarios han sido barridos de plano ante el avance del capital.

Esta semana se conoció la noticia que desde el hospital zonal se advertía por la inminente saturación de camas disponibles, producto de las necesidades estacionales, las cirugías reprogramadas al inicio de la cuarentena y los continuos casos de coronavirus que hay en la ciudad.

También fue noticia, el mismo día que abrió el cerro Catedral, el informe que declaró que Bariloche volvió a ser zona de circulación comunitaria del coronavirus. Al día de publicación de este artículo, la ciudad tiene un total de 408 personas afectadas por este virus, de las cuales 16 fallecieron, 324 se recuperaron y 68 casos activos en aislamiento y/o internación (Río Negro, 23/7).

Ante este cuadro de situación la imagen que circuló desde temprano en las redes, donde se ve a personas en la base del cerro Catedral el día de su apertura sin distanciamiento social, no deja de ser un mal presagio de lo que pueda ocurrir en los próximos días. Lejos de ser responsabilidad de las personas, lo que se vio en esta imagen es consecuencia de la irresponsabilidad del Estado que autorizó la actividad y de la empresa Catedral Alta Patagonia (Capsa) que no cumplió con los protocolos correspondientes.

El caso del cerro Catedral, con una escandalosa extensión del contrato, representa un negocio redondo, donde la ganancia empresarial está garantizada por el Estado. Los trabajadores de Capsa son contratados en calidad de temporarios, por lo que, si bien están en blanco, esta modalidad de contrato permite al empleador a emplearlos por una determinada cantidad de meses al año. Ante esta situación, la empresa y la Asociación de Empleados de Comercio (AEC) anunciaron la semana pasada que se había logrado un acuerdo en el cual los trabajadores van a percibir $100.000 por la temporada invernal y que la suma será abonada por el Estado nacional y la empresa (Río Negro, 11/6).

En este municipio, como en la provincia de Río Negro, el poder concentrado del sector turístico opera en función de sus propios intereses y legisla de hecho en cualquier contexto. Ni siquiera una pandemia ha logrado frenar al empresariado turístico de tomar una decisión tan absurda como abrir el centro de actividades invernales en el cerro Catedral. Las prioridades del Estado, entonces, estarán puestas en la asignación de recursos para el desarrollo de estas actividades, cuando hay familias trabajadoras que en los últimos cuatro meses han recibido como única fuente de ingresos el IFE en dos oportunidades, es decir $20.000.

Desde el Partido Obrero Bariloche reiteramos la necesidad de una centralización de todo el sistema de salud; el no pago de la deuda externa y el aumento del presupuesto para ese sector; la formación de comités de seguridad e higiene en todos los hospitales públicos y privados integrados por trabajadores electos en asamblea; la prohibición de toda actividad no esencial; la prohibición de los despidos; licencias sin afectar el salario; asignación de un salario de $30 mil mensual a todos los trabajadores desocupados y monotributistas, garantizado con el pago de un impuesto a las grandes fortunas.