Sociedad

14/9/2020

La Matanza: la ocupación de tierras en Los Ceibos

La lucha por la tierra y la vivienda es una lucha de clases. Tierra para los trabajadores, no para los especuladores.

Hace casi un mes que los vecinos, en la búsqueda de la vivienda propia, han ocupado entre tres y cuatro manzanas en el barrio Los Ceibos, en el distrito bonaerense de La Matanza. La ocupación se lleva a cabo en viviendas sociales del “plan federal” sin terminar -poco más de un centenar- que los sucesivos gobiernos han abandonado por más de una década y que habrían estado destinadas para que Acumar reubique a la población afectada por la cercanía al río Matanza-Riachuelo, en los fracasados planes de “reurbanización”. Además se ocuparon los terrenos ociosos aledaños sin ningún tipo de edificación, que pretendían ser para la construcción de escuelas y una plaza que buscaban absorber la demanda de la población reubicada, así nos comenta con detalle Samuel Miranda, un vecino que sin formar parte de la ocupación, se solidariza con la causa de las familias ocupantes.

El pasado domingo, con la presencia de compañeras y compañeros del barrio La Justina, de González Catán, realizamos una recorrida por el predio y las viviendas tomadas hace ya tres semanas, con la presencia de integrantes de la Mesa Nacional del Polo Obrero. Tuvimos la oportunidad de hablar con vecinos que se reunieron expresando sus situaciones y hablaron para Prensa Obrera.

En estos terrenos brotan el abandono y negligencia, pululan las aguas cloacales por toda la zona a cielo abierto, aguas que son la descarga de las viviendas sociales entregadas del barrio de al lado. El olor por momentos se vuelve insoportable. Las casas abandonadas por el Estado no cuentan con cloacas, electricidad, ventanas, revoques, pisos y sus calles, más que irregulares, presentan acumulaciones de aguas servidas y basura.

 

En plena pandemia, en el distrito se registra que los hogares albergan hasta entre tres y cuatro familias. En algunos casos tres generaciones en el mismo terreno edificado. El hacinamiento es otra clara demostración de que “con hambre no hay cuarentena”, sumado a eso el pago de los alquileres es insostenible.

Es el caso de Julia, mamá de siete hijos que sostiene una olla popular en el barrio y que aún dependía de sus suegros para tener donde dormir. Ella reclama un plan de pagos financiado por el gobierno para tener su espacio propio. Unos 300 metros cuadrados (10 de frente por 30 de fondo) es lo que los vecinos organizados han definido para lotear y repartir la zona del baldío mediante el censo y el perimetraje por ellos organizado.

El intendente Fernando Espinoza hizo declaraciones profundamente contradictorias. “Las tomas de tierra son una acción ilegal y la justicia tiene que actuar inmediatamente”, dijo. Para luego aclarar: “Nosotros nunca vamos a criminalizar a la pobreza” y explica que, según el intendente, estas necesidades aparecen como legado de los cuatro años del gobierno anterior. El mandatario parece ignorar que el Instituto de la Vivienda de la provincia de Buenos Aires, en el año 2017, presentó un informe que ubicaba, de los 12,2 millones de casos de déficit habitacional a nivel nacional, el 50% en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. En la provincia de Buenos Aires, el %17 de estos casos son de La Matanza (132 mil casos aproximadamente). Municipio que en no mucho tiempo sumará 40 años de intendencias del Partido Justicialista y ya tiene 15 años de Fernando Espinoza, interrumpidos solamente por un mandato de su compañera de equipo y actual vicegobernadora, Verónica Magario.

Todo el arco político patronal, propios y ajenos al gobierno, entiende que “hacer cumplir la ley” es reprimir a estas familias y dejarlas en la calle, como hicieron en la localidad matancera de Ciudad Evita, por la noche del viernes 11 de septiembre, donde sin orden judicial la Bonaerense desalojó con una violenta represión, enviando un grupo de matones no identificados, custodiados por la policía, que prendieron fuego el comedor y expulsaron a fuerza de golpes a las familias. El Frente de Izquierda Unidad, en la vereda opuesta, presentó en la Cámara de Diputados un proyecto de ley para prohibir los desalojos a nivel nacional hasta el 2022.

En la ocupación de Los Ceibos las manzanas que cuentan con estructuras sin terminar lograron dar un salto organizativo y cuentan con delegados y asamblea permanente. Están a la espera de que el gobierno de la cara y entable una mesa negociadora para avanzar con planes de pagos accesibles, que los nuevos habitantes puedan afrontar. Por el momento el único rostro del aparato estatal que conocen los vecinos es la innumerable cantidad de móviles policiales y de Gendarmería Nacional que cercaron los terrenos y que prohíben que los vecinos ingresen materiales y herramientas para terminar las viviendas.

El Polo Obrero, como en toda lucha obrera, se ha solidarizado apoyando esta y todas las tomas como un derecho legítimo para los trabajadores. Es un canal por el que se abre otro frente en la lucha de clases, donde se chocan los intereses de los grandes especuladores inmobiliarios, los negocios de los gobiernos en todos sus niveles y la expulsión de las familias al sometimiento y la miseria social. Comienzan a resquebrajarse los diques de contención que hasta ahora sostiene el gobierno, que utiliza, en alianza con la burocracia sindical y piquetera –y las iglesias-, para apaciguar el descontento popular frente a la falta de trabajo y el agravamiento económico por la pandemia y la crisis. La expresión de esto es el fenómeno de las ocupaciones en todo el país.

En la toma de Los Ceibos se puso en pie un comedor popular que sostienen los compañeros del Polo Obrero y los vecinos, y se abrirá uno más frente a la acuciante necesidad de un plato de comida caliente o merienda para los cientos de niñes que viven allí.

Para que triunfe la toma es necesario completar la elección de delegados en todas las manzanas y exigir una mesa negociadora con el municipio, la provincia y el Estado nacional, para iniciar el traspaso de propiedad, exigir la inversión estatal para la urbanización y pactar un plan de cuotas para los habitantes que no pretenden que nadie les regale nada.

La defensa incondicional de los vecinos ocupantes es fundamental en Los Ceibos y en todas las tomas del país. El triunfo de cualquiera de ellas es el triunfo de todas en la pelea por la vivienda digna y fortalecerá a la clase obrera en la lucha contra el ajuste y por sus reivindicaciones.

En este sentido, invitamos a los delegados barriales y vecinos a participar de la gran jornada nacional que tiene preparada el Plenario del Sindicalismo Combativo, único espacio que levanta las banderas del movimiento obrero y sale a las calles. Donde se expresará la consigna de “tierra para los trabajadores y no para los especuladores. Prohibición de los desalojos”.

La pronta organización de cada metro cuadrado es necesaria, al igual que la coordinación entre las distintas tomas que se suceden en el distrito junto a las organizaciones sociales, políticas y sindicales. Desde el Polo Obrero y el Partido Obrero proponemos la realización de un congreso nacional por la tierra y la vivienda que resuelva un plan de lucha por el triunfo de las ocupaciones.

https://prensaobrera.com/libertades-democraticas/desalojan-violentamente-una-toma-de-tierras-en-ciudad-evita/

https://prensaobrera.com/sociedad/sigue-la-amenaza-de-desalojo-en-la-ocupacion-de-guernica-y-crece-la-organizacion/