En notas anteriores hemos descripto la grave situación de Hurlingham en cuanto a la cobertura de servicios básicos como agua y cloacas. Pero sin dudas esta situación de vulnerabilidad se magnifica cuando estamos en medio de una ola de calor con temperaturas récord que superan los 40° C en contexto de pandemia.

El Municipio de Hurlingham es uno de los distritos con menor cobertura de agua potable: solo el 27% de los vecinos accede al servicio de agua corriente suministrado por Aysa y cooperativas barriales. O sea, menos de 3 cada 10 vecinos de Hurlingham tienen agua potable en su casa.

Las grandes obras y proyectos presentados con bombos y platillos por la titular de Aysa, Malena Galmarini, y por el entonces intendente Zabaleta quedaron como meros spot de campaña.
La larga fila de personas que día a día deben ir a proveerse de agua en las canillas comunales del predio municipal lo atestigua y son prueba concreta de la desidia, corrupción y la falta de políticas públicas destinadas a satisfacer las necesidades más básicas de las familias trabajadoras.

Frente a esta problemática, el actual Intendente, Damián Selci (de la Cámpora), mira para otro lado y no da ningún tipo de respuesta, justificando que estas obras “son de plazos más lentos” (Diario Primera Plana Online, 8/11/21 ).

Hace décadas que les vecines de Hurlingham esperan la llegada agua en sus barrios para dejar de acarrear bidones de 20 litros por largas cuadras.

Frente a esta situación, tanto Selci como el resto del Frente de Todos avalan el pago de la deuda con el FMI contraída por Macri pretendiendo que seamos los trabajadores los paguemos con más desigualdad, pobreza y precariedad en nuestras condiciones socioambientales.

En el actual contexto de crisis ambiental (sequía, incendios, contaminación, pandemia), el intendente Selci, que pide paciencia a los vecinos porque las obras son “de plazos lentos”, promueve junto al intendente del Pro, Valenzuela, la construcción de una autovía sobre el arroyo Morón, destruyendo el humedal y su biodiversidad con el solo propósito de generar rentabilidad a los grupos inmobiliarios.

Prometiendo progreso y desarrollo con la llegada de la autovía depredadora, mientras les vecines Barrio Newbery no cuentan con servicio de agua potable y viven expuestos a la contaminación en el arroyo Morón, producto de años de inexistentes políticas públicas de saneamiento, nulo control sobre los permanentes vuelcos industriales, que, junto a la falta de red de cloacas, da como resultado altos niveles de contaminación sobre sus aguas.

Desde Tribuna Ambiental nos organizamos exigiendo:

*No al pago del FMI. Presupuesto para agua potable, redes cloacales y saneamiento.
*Derecho al agua potable.
*Agua en todos los barrios ya.

 

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