En un documento que busca ser ambiguo, las autoridades de la Facultad de Económicas de la UBA dicen que el canje entre el Tesoro y la Anses de bonos de bonos en dólares por bonos en pesos resultaría beneficioso para la caja de los jubilados. Esta afirmación es construida sobre la base de la estafa contable propuesta por el gobierno, que consiste en que, una vez realizado el intercambio, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad pase de valuar sus títulos al valor que tienen en el mercado a contabilizarlos al valor que técnicamente deberían tener. Es decir, comparan bonos nominados en dólares cuya cotización de mercado es del 25% del valor nominal con bonos duales en pesos al 100% del valor técnico. Esto genera que los bonos en pesos se inflen artificialmente, y que la cuenta termine siendo positiva.

Sin embargo, la realidad esta a la vista de todos y es sencilla. El gobierno obtiene bonos nominados en dólares y otorga bonos nominados en pesos. Adquirir pesos, una moneda que se deprecia en un 104% anual, es desfavorable. Sino preguntémosle a las autoridades de la FCE, o a cualquier financiera, si están dispuestos a vender sus dólares por pesos. Cualquier empresa a la que le propusieran este intercambio estaría en contra.

Con esto el gobierno se hace de activos que le permiten intervenir en el mercado para contener las cotizaciones dolar MEP y CCL, financiando la fuga de capitales. Obliga también a la Anses a vender una parte de sus bonos a precios de remate: 20 centavos de dólar por cada 1 dólar que cobraría al vencimiento. De esta manera se usan los recursos de la Anses para garantizar la salida de capitales, a la vez que se aumenta la deuda en manos privadas. Se calcula que el total de deuda canjeada sería alrededor de USD 5.000 millones. El robo es sideral. Los bancos y financieras se están agolpando para comprar estos bonos que, frente al panorama de una derrota electoral del oficialismo bien pueden aumentar su cotización y arrojar cuantiosas ganancias en dólares, que pueden ser directamente fugadas al exterior. 

Lo que une a las autoridades ligadas a Juntos por el Cambio con el gobierno es sin duda el acuerdo en la política de ajuste y saqueo del FMI. También pueden haber favores políticos de cara a las Paso.

Quienes firman el documento son dos docentes de la facultad que, si bien especializados en finanzas, forman parte del armado político de Nuevo Espacio. Cobardemente, ningún representante importante del decanato quiso poner la firma, intentando no quedar pegados con la medida y resguardándose frente a posibles juicios sobre el asunto. De esta manera, un puñado de burócratas enquistados en el poder decide en nombre de la UBA, sin debate ni consulta alguna a los cientos de miles de docentes y estudiantes, que somos los que mayoritariamente componemos la facultad.

La salida frente al robo de nuestras jubilaciones pasa por la organización. A la agenda del FMI la componen nuevas reformas laborales y jubilatorias para profundizar este régimen de hambre y saqueo. Tenemos que juntar fuerzas para enfrentarlas. Es con esa perspectiva que invitamos a construir la agrupación Movimiento por Económicas y a organizarnos de manera independiente de los gobiernos en el Partido Obrero – Frente de Izquierda, porque la salida a la crisis empieza por la organización y la lucha en defensa de nuestros derechos.