El sábado 3 de diciembre tuvo lugar, en la Facultad de Medicina de la UBA, el Congreso Ordinario de la Federación Universitaria Argentina (FUA). Plagado de maniobras y vaciado adrede por la actual conducción, Franja Morada, la instancia estuvo muy lejos de discutir las problemáticas reales de les estudiantes y de la educación pública.

Con la ausencia de La Cámpora y un sector del peronismo/kirchnerismo (JUP, Miles, La Mella, CEPA, MPE, entre otros), Franja Morada retuvo la conducción de la FUA con 322 delegados. Con 59 delegados, un frente de peronistas que sí participaron del Congreso, encabezado por la UES de Sociales-UBA, se quedó con la Secretaría General. 57 votos obtuvo la lista del MNR-PS y Libres del Sur y 35 votos la lista de La Izquierda en la FUA, encabezada por la UJS-PO.

Catalina Jure, estudiante de la UNA, sobre el contexto de este nuevo congreso de la Federación Universitaria de Argentina
🗣️ "Es importante la intervención de la izquierda y de los sectores independientes frente a este congreso que se desarrolla a espalda de los estudiantes" pic.twitter.com/iSZxxddheD

— Prensa Obrera (@prensaobrera) December 3, 2022

Una Federación paralizada frente al ajuste

Cuatro años pasaron desde el último congreso ordinario, realizado en Rosario. Entremedio, la FUA no jugó ningún papel relevante frente al ajuste del gobierno macrista primero y de los Fernández después, ni tampoco frente a la crisis educativa derivada de la pandemia. La Junta Ejecutiva electa en ese entonces se reunió apenas 4 veces, aún cuando el estatuto estipula reuniones periódicas de los organismos de la Federación.

Mientras la situación nacional reclama una intervención masiva del movimiento estudiantil, por sus propios reclamos y ligado a las luchas populares, la FUA no mueve un pelo contra el recorte del 15% al presupuesto en educación. Ni la Franja Morada ni el peronismo, en todas sus facetas, quieren hacerlo por sus complicidades políticas. Todos (y) Juntos son, finalmente, corresponsables del ajuste dictado por el FMI.

El congreso del pasado sábado fue una continuidad y una muestra más de esa parálisis y del vaciamiento de la Federación. Lejos de promover la participación y deliberación estudiantil, Franja Morada y el peronismo habían acordado el pasado 4 de octubre convocar en una fecha donde ya no hubiera clases en la mayoría de las universidades y en coincidencia con uno de los partidos de la selección argentina en el Mundial. La única oposición a ese tipo de convocatoria fue la que expresó la UJS-PO en la Junta Ejecutiva, votando en soledad otra propuesta de fecha y de congreso.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de UJS – Partido Obrero (@ujspo)

El papel de La Cámpora y el peronismo

Sin dudas, un dato llamativo del congreso fue la ausencia de La Cámpora y de una parte importante del peronismo y agrupaciones ligadas al Frente de Todos. Fueron, hasta esta instancia, largos años de acuerdos espurios entre estas agrupaciones y la Franja Morada para repartirse la representación de cada congreso y los cargos de la Junta Ejecutiva. Estos acuerdos siempre se explicaron por la convivencia de peronistas y radicales al frente del régimen universitario, cogobernando en sintonía con el gobierno de turno. Nada indica, de hecho, que la ausencia del peronismo en esta instancia repercuta en esos acuerdos. El principal interés de ambos sectores, en definitiva, es sostener un régimen universitario que siga el camino del ajuste y la privatización que reclaman el FMI y los capitalistas.

Dicho esto, la crisis y posterior retiro del peronismo del congreso se desató por una definición política que, según indican diversos medios, fue tomada desde el Ministerio de Educación. Para el ministro Jaime Perczyk (rector en uso de licencia de la UNAHur) y para el gobierno de los Fernández el control directo de la FUA importaba para mantener a raya al movimiento estudiantil en épocas de crisis y recortes. Lógicamente, una victoria del peronismo también pretendía ser explotada como un reforzamiento de un Frente de Todos, que está en caída libre, contra la Franja, la representación de Juntos en el movimiento estudiantil.

Para llevar adelante este objetivo de quedarse con la FUA, el peronismo metió mano a los mismos métodos que utiliza cotidianamente Franja Morada: las maniobras fraudulentas de todo tipo y color. Pretendían imponerse no como resultado de una representación mayoritaria en los centros, sino distorsionando en su favor la distribución de delegados. Por supuesto, el accionar de Franja Morada en todo el proceso y su libre interpretación de los estatutos (solo vale lo que favorece a Franja…) no tuvo nada que envidiarle.

Para coronar su actuación, las agrupaciones del gobierno decidieron recurrir a la Justicia para impugnar el congreso, no a les estudiantes. Lo mismo que hizo Franja Morada (Nuevo Espacio) hace unos años contra la Fuba piquetera.

La UJS-PO y la lista de izquierda, la única oposición independiente a Franja Morada

Frente a las maniobras fraudulentas que se sucedieron durante la previa y en el propio congreso, la UJS-PO actuó con una posición clara. Señalamos desde un comienzo que no había bandos progresivos en la “rosca” que dividió aguas esta vez. No acompañamos ni a Franja ni al peronismo, y peleamos por una FUA que sea realmente de los estudiantes, para luchar por todos los reclamos. Somos opositores, en la FUA y en cada centro, a los ajustadores de Juntos por el Cambio y del Frente de Todos. Rechazamos de plano el intento de judicializar la Federación por parte del peronismo/kirchnerismo, como rechazamos cualquier injerencia del Estado y del régimen universitario en los centros y federaciones regionales.

En ese sentido, participamos del congreso defendiendo una posición independiente, con nuestra representación, surgida de la pelea cotidiana que damos en cada centro de estudiantes del país. Junto a les compañeres del MST e Izquierda Socialista logramos conformar una vez más la Lista “La Izquierda en la FUA”, encabezada por la UJS-PO que aportó el 85% de los delegados al frente y una importante movilización de compañeres.

Párrafo aparte merece la política del PTS, que tomó en sus manos hace varias semanas la campaña del peronismo. En primer lugar, defendieron que se contaran elecciones de hace más de 3 años, cuestión que beneficiaba únicamente al peronismo. Durante el congreso, al que no llevaron más que 5 personas, presentaron, junto al Nuevo MAS, una moción de “cuarto intermedio” hasta mayo, para que participen “todos los centros”, es decir, los del peronismo. Siendo serios, un cuarto intermedio no modificaría la composición del Congreso. Con esta moción, el PTS y el Nuevo MAS centraron su política en la defensa de las agrupaciones peronistas, sin reparar siquiera en que esas mismas agrupaciones fueron las que votaron esta fecha de realización del Congreso. Descartada la moción, ambas agrupaciones optaron por retirarse sin presentar lista. Posiblemente, la posición del PTS, además de un marcado seguidismo al nacionalismo, estuvo motivada por su casi nula representación, con tan solo 3 delegados, al igual que el Nuevo MAS.

Finalmente, con una votación de 35 delegados, la lista de La Izquierda en la FUA plantó bandera contra el ajuste, siendo la única que planteó la necesidad de abrir un canal de organización independiente para el movimiento estudiantil. Una vez más, retuvimos la secretaría de la izquierda en la Junta Ejecutiva, que será ocupada ahora por la compañera Catalina Jure (UJS-PO), de la Universidad Nacional de las Artes (UNA). Como en el pasado, pondremos esta secretaría, conquistada por nuestra militancia cotidiana, al servicio de las luchas del movimiento estudiantil, de los trabajadores y del movimiento popular en general, contra el ajuste de todo el régimen fondomonetarista.

https://prensaobrera.com/universidad/congreso-historico-avanzo-el-fraude-de-nuevo-espacio-franja-morada

https://prensaobrera.com/universidad/pasantias-de-verano-agroecologicas-de-la-ujs-y-tribuna-ambiental