Universidad

6/5/2022

Hospital de Clínicas-Córdoba: renuncias masivas por salarios de pobreza y precarización laboral

Ocho trabajadorxs de la salud dejaron al Hospital Escuela, cobraban $ 60.000 por turnos de 7 o 8 horas.

Hospital de Clínicas de Córdoba

El pasado lunes 2 de mayo se dio a conocer la noticia de la renuncia masiva de médicxs en el Hospital Nacional de Clínicas. Lxs profesionales tomaron la decisión en un contexto de bajos salarios y precarización laboral. Así las cosas, comunicaron su decisión en un diálogo con el director del hospital Alberto Pons y con el Dr. Rogelio D. Pizzi, decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNC.

De hecho, el director del Hospital reconoció que el vacío de las renuncias se estaría cubriendo con otros profesionales que ya forman parte de la planta del hospital, que habrían ofrecido trabajar más horas para que no se vea resentido el servicio del nosocomio.

Por otro lado, las autoridades también plantearon que los salarios y las condiciones de trabajo en el hospital son asimilables a las que se desarrollan en el municipio, la provincia y los hospitales privados. Es decir que la Nación se escuda en que la precarización laboral para los trabajadores de la salud no es exclusiva de ellos, sino que se extiende a la mayoría de los trabajadores estatales. El Estado es el primer precarizador.

Las personas que renunciaron trabajaban como monotributistas en el hospital. Es decir que ni siquiera eran trabajadores de planta. Ellas trabajaron durante toda la pandemia, defendiendo la salud de la población cordobesa, a pesar de los salarios de miseria. Hay que remarcar que los 60.000 pesos que cobraban están por debajo de la canasta básica. Por lo tanto, un profesional de la medicina es pobre a pesar de trabajar para el prestigioso Hospital Nacional de Clínicas.

La pérdida de poder adquisitivo de los salarios forma parte de una política de ajuste sobre lxs trabajadores, que se complementa con modificaciones en las condiciones de trabajo, lo que constituye una reforma laboral de facto que se está imponiendo. Por eso, lxs profesionales perdieron un 56% de los ingresos en la última década. Lo que hace imposible continuar prestando servicios en estas míseras condiciones de trabajo.

De esta realidad quienes se postulan para ser elegidos para rector de la UNC nada dicen. Por acción u omisión están dejando pasar el ajuste que recae sobre trabajadores y estudiantes.

El ajuste golpea de lleno a el mencionado centro de salud y al presupuesto universitario en el que se incluye al hospital de clínicas. Es necesario ir en la dirección contraria, es fundamental la lucha por un salario igual a la canasta familiar. El pase a planta de todo el personal contratado y los monotributistas. Aumento de presupuesto de la Universidad.

La lista del FIT-U contempla las demandas de estudiantes y trabajadores de la UNC. Cada voto será un refuerzo a la lucha contra el ajuste y por mejorar las condiciones de trabajo y estudio.