Después de cuatro cuatrimestres virtuales, sin que los estudiantes pudiéramos promocionar las materias que cursamos, esta semana comenzaron de forma presencial los exámenes promocionales del conjunto de las asignaturas de todas las carreras de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA. Es, sin duda, la victoria estudiantil más importante de la Facultad en los últimos años, junto con la recuperación de los finales de forma virtual durante la cuarentena y la reforma edilicia del Aula Magna antes de la llegada de la pandemia.

Es también una de las conquistas del movimiento estudiantil más importantes en lo que va de la pandemia dentro de la universidad, luego del triunfo de los finales virtuales en Económicas en abril y los cupos ganados en Psicología a principio de cuatrimestre (ambas arrancadas a gestiones y centros de estudiantes alineados a los mismos espacios políticos que la decana Arranz en Farmacia).

Promocionar es un derecho

Así lo dejamos en claro los estudiantes, que junto al CEFyB dimos una pelea categórica para recuperar los “promos”; logro que no hubiera sido posible sin un Centro de Estudiantes independiente de las autoridades y del gobierno.

El prontuario de esta pelea es enorme: se organizaron tres mailazos masivos, un tuitazo (donde fuimos 10° tendencia nacional), incontables reuniones abiertas entre docentes y estudiantes, más de 3.000 firmas estudiantiles a favor, seis proyectos presentados en el Consejo Directivo, pronunciamientos de distintas cátedras, apoyo de gremios docentes y un cartelazo autoconvocado en la puerta de la facultad en medio del confinamiento.

El contraataque de las autoridades en esta lucha también se sintió. Censuraron los comentarios en las redes sociales (que al día de hoy siguen en Instagram), bloquearon la casilla de mails para frenar los mailazos, cajonearon nuestros proyectos para dejar de debatirlos en el Consejo y, mientras la Decana Arranz realizaba elecciones presenciales en pleno pico de contagios, seguía negándose nuestro derecho. Pero, pese a todas estas trabas, los estudiantes demostramos la fuerza que tenemos para defender nuestras cursadas, y después de dos años de una intensa pelea, finalmente recuperamos los promocionales.

Sigamos organizándonos

Ya recuperamos “los promos”, y eso quedará marcado en la historia de la lucha en defensa de la Educación dentro de nuestra facultad. Pero la pelea por la defensa de FFyB sigue. En la sesión del Consejo Directivo del 14 de septiembre nos enteramos que las autoridades de la Facultad de Medicina quieren quedarse con aulas y laboratorios que pertenecen a la Facultad de Farmacia y Bioquímica, donde cursan cientos de estudiantes por año y laburan diariamente más de 70 docentes e investigadores (quienes esta semana fueron amedrentados cuando quisieron ingresar a sus áreas de trabajo).

La falta de espacios de estudio e investigación en la UBA es tan vieja como las injusticias, y es consecuencia de las políticas de recorte presupuestario y vaciamiento de recursos, tanto de las autoridades de la Universidad como de los que han gobernado el país todos estos años. Pero a todas luces es claro que la solución a esta falta de recursos y espacios no puede ser que una facultad se quede con los de otra.

Al día de hoy se desconocen los alcances de la disputa entre las autoridades de ambas facultades, pero lo que es claro es que quienes no queremos pagar los platos rotos de esta “interna” somos los estudiantes y los docentes de FFyB. Por eso, desde el CEFyB nos solidarizamos con el conjunto de investigadores y docentes del departamento de Química Biológica, e invitamos a todos los estudiantes de la facultad a sumar su firma en apoyo a la defensa de nuestros espacios de estudio y al abrazo solidario a la facultad el 4 de octubre a las 15 horas.

¡Con la misma fuerza que recuperamos los promos, ahora defendamos FFyB!

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