Ambiente

21/8/2020

Acuerdo con China: el 25 de agosto movilizamos contra la instalación granjas industriales de cerdos

En todo el país, rechacemos este ataque a la salud y el ambiente.

Numerosas organizaciones ambientalistas, y junto a ellas Tribuna Ambiental y el Partido Obrero, nos movilizaremos a las plazas principales de cada ciudad en distintos puntos del país el próximo martes 25 de agosto para repudiar el acuerdo (o memorándum de entendimiento o carta de intención) que el gobierno nacional busca firmar con China para la instalación de grandes granjas industriales para la producción de cerdos.

Un importante y creciente número de población se ha manifestado abiertamente en contra por múltiples razones: porque traerá enormes consecuencias ambientales en cada sitio donde se instale, por la posibilidad que se generen enfermedades zoonóticas -como ya ha ocurrido en China y en otras partes-, todo ello en función de un negociado que no le dejará nada al país.

De hecho, el país asiático está viviendo una crisis ambiental y productiva como resultado de este tipo de explotación. La voluntad de instalar las granjas en Argentina responde justamente a la iniciativa del gobierno chino de deslocalizar la producción, que ha llevado a enfermedades que obligaron a sacrificar millones de cerdos.

Desde la Cancillería argentina informan que se trata de un acuerdo entre privados (a través de la Asociación China para la Promoción del Desarrollo Industrial y la Asociación Argentina de Productores Porcinos), y que se encuentran en tratativas con China para la redacción de un memorándum de entendimiento que prevé hasta 25 unidades integradas productivas de 12.000 madres cada uno, a ubicarse en diferentes puntos del país. Esgrimen que con ell0 se agregaría valor a la producción agrícola, disminuiría el costo del flete a puerto y generaría empleo en las provincias más postergadas del país. Además remarcan que el proyecto generará 110 millones de dólares al año de ingresos fiscales por derechos de exportación, que es en definitiva el único motivo que vale para el gobierno.

De la contaminación, la alta probabilidad de generar enfermedades, la necesidad de realizar estudios de impacto ambiental previos a la instalación, el gobierno no dice nada… en plena pandemia de coronavirus.

La perspectiva de conseguir dólares para garantizar el pago de la deuda externa ya llevó al gobierno de Alberto Fernández y al gobernador de Mendoza Rodolfo Suárez (de Cambiemos) a chocarse con una formidable movilización popular al intentar habilitar la minería contaminante en la provincia. Ahora en Chubut se desarrolla una importante campaña para frenar la instalación de megaemprendimientos mineros. A su vez, la flexibilización de las normas ambientales, para salvar las ganancias de los pulpos bajo en medio de la crisis capitalista, es una política de Estado.

La jornada movilización nacional del 25 de agosto también reclamará el fin de la deforestación y las quemas de pastizales en el Delta entrerriano. Es en esa línea que desde la banca de la diputada nacional Romina Del Plá presentamos el año pasado un proyecto de ley para suspender todo tipo de desmontes, y reclamamos que sea tratado en forma urgente para frenar la crisis ambiental, especialmente del norte del país.

Hemos dado un debate en las reuniones organizativas de la movilización en torno a la consigna de un “nuevo modelo agroecológico”. Nuestro planteo es que para cambiar la forma de explotación agraria contaminante en el país es preciso nacionalizar el comercio exterior y la gran propiedad de la tierra, y cesar el pago de la deuda externa que es hacia donde se depositan los dólares que recauda el Estado del sector exportador. Incluimos estos puntos entre nuestras consignas en la movilización, ya que no se trata simplemente de cuestionar un “modelo de desarrollo” sino de señalar las consecuencias catastróficas para la salud y el ambiente del capitalismo en la Argentina.

Impulsemos esta jornada en todos los puntos del país. Vayamos a las plazas y monumentos a repudiar el pacto con el gobierno China para instalar granjas industriales de producción de cerdos, exigir un freno a los desmontes y las quemas de pastizales en el Delta entrerriano. No al pago de la deuda externa, por la nacionalización del comercio exterior bajo control obrero.