Internacionales

25/11/2024

Guerra en Ucrania, las novedades en el frente

El ejército ucraniano pierde posiciones y Rusia amplía los frentes

Guerra en Ucrania

Tras más de un mes de la última actualización del frente para Prensa Obrera, analizaremos los nuevos desarrollos, que no son pocos. El triunfo electoral de Trump, con la posibilidad de que implemente una política tendiente a lograr un alto al fuego, se está traduciendo en que ambos ejércitos están arriesgando más que en el pasado, para obtener ventajas territoriales y privar a su adversario de puntos fuertes en eventuales negociaciones.

Pero también, como vimos en el artículo del análisis político de la guerra, estamos ante la posibilidad de una escalada total previo al cambio de mando en Estados Unidos. Con este cuadro político de fondo, esta vez, vamos de norte a sur.

Kursk-Chernigov

El ejército ucraniano no tiene respiro. De la observación de los distintos mapas de la guerra, se puede apreciar que la aventura de Ucrania en Kursk está entrando en la fase de repliegue, ya que más del 60% de las ganancias ucranianas en ese sector se han evaporado por la contraofensiva rusa. Además, cercano a la dirección de Korenevo (el noroeste de la maniobra ucraniana), varias brigadas que habían quedado cercadas a 360°, fueron eliminadas o capturadas.

Pero la contraofensiva rusa en este sector viene desde varias direcciones. La prensa de los países de la Otan desarrolla hace semanas una campaña de histeria sobre la acumulación de una fuerza rusa de 50 mil tropas, en las cuales unas 10 mil serían norcoreanas. No han presentado prueba alguna de la presencia de militares provenientes de Pyongyang, pero la aseveración unilateral justifica a Biden para atacar la profundidad de Rusia con Atacms. Para dar justicia, no solo que no hay pruebas de la presencia norcoreana, sino que, al mismo tiempo, tampoco hay desmentida rusa. De momento, una incógnita.

Otra cuestión a resaltar, son las repetidas acumulaciones de tropas ucranianas en Sumy para ser despachadas en Kursk, que son destruidas por misiles tácticos rusos Iskander. De este modo, las rotaciones y transferencias de tropas se dificultan en extremo para Ucrania. 

Pero aún más al norte de Sumy, en Chernigov, las fuerzas rusas comenzaron una nueva ofensiva. Las fuerzas especiales rusas lograron ocupar cuatro aldeas, la más importante Murav´i y varias posiciones boscosas. Se trata de una porción de territorio que tiene dos ríos como barreras naturales, por lo que, sumada esa situación a la falta de mano de obra, ponen en cuestión la capacidad de Ucrania para recuperar este territorio.

De momento, los intentos de contraataque ucraniano en Chernigov han fracasado. Las propias fuerzas ucranianas confirmaron las posiciones rusas al publicar un video de sus operadores de drones, que atacaron las distintas banderas rusas que colocaron las fuerzas del Kremlin es los límites administrativos de los poblados conquistados.

Los rusos están aprovechando un gran hueco en la defensa. Es que gran parte de las fuerzas que estaban apostadas en Chernigov fueron transferidas a Kursk. Por ello, habrá que ver si Rusia tiene las fuerzas para iniciar aquí una ofensiva en profundidad o bien si se trata de una maniobra que busca que Ucrania retire fuerzas de Kursk para defender Chernigov y, de esta manera, facilitar la expulsión de las AFU (Ucrania) de Kursk. 

Ingreso ruso en Kupiansk y Járkov del norte

Pareciera que el frente que se descontroló para Ucrania es en el este de Járkov. En la última actualización para Prensa Obrera reportamos que, al este de Kupiansk, Rusia estaba por cortar en dos el frente ucraniano en la margen oriental del río Oskil. Pues bien, esa ruptura en dos del frente se produjo con creces, mientras que la aviación y artillería rusa se empeñan en destruir los cruces del río Oskil desde la margen occidental.

Pero lo peor es que, en una maniobra sorpresa de una profundidad de unos 5km, Rusia atravesó las defensas e ingresó en el este de Kupiansk, que es un importantísimo nudo logístico de Ucrania en el límite con Lugansk. Así, ha comenzado la tercera batalla por Kupiansk, ya que Rusia la conquistó en los primeros meses de la guerra y Ucrania la recuperó en su contraofensiva exitosa de septiembre de 2022.

Ahora, las fuerzas rusas se han atrincherado en la zona industrial y han conseguido algo superlativo como cortar la principal vía de suministro que se dirige a las tropas ucranianas en la parte norte de la margen oriental del río Oskil, donde hay apostadas unas 10 brigadas ucranianas, en tanto que otras 10 quedaron cortadas al sur. (Ver: https://militaryland.net/maps/deployment-map/).

Distribución de tropas ucranianas en el frente de Kupiansk a la margen oriental del río Oskil.

Como ya hemos dicho en otros artículos, la eventual caída de Kupiansk abriría muchas posibilidades para el ejército ruso. De un lado, la chance de atacar la ciudad de Járvok desde el este, poniendo en una pinza primero a las tropas apostadas en la frontera al norte.

Del otro, un eje de ataque hacia Izium, y el acceso para atacar desde el norte a Kramatorsk, lo que a su vez dificultaría el suministro hacia el frente de Siversk (el punto norte de Donetsk, donde Rusia tuvo peores resultados y Ucrania su defensa más competente). Asimismo, en Siversk se reportó el reciente despido del general a cargo, por informes falsos al mando, de modo que posiciones que aparecían del lado ruso en realidad siguen bajo control ucraniano.

Donetzk (Pokrovsk, Kurajove, Torensk, Chasiv Yar y Velyka Novosylka)

En el último informe, analizando la dirección de Pokrovsk, nos quedamos con que Ucrania había frenado el momentum ruso en Soleidove. Pero allí advertimos que, si en lo inmediato los rusos lograban tomarla, no se habría producido una contención ucraniana, sino una pausa operativa rusa. En efecto, Soleidove cayó. El ejército ruso flanqueó la ciudad y las tropas de Ucrania se tuvieron que retirar por un estrecho camino bajo el fuego de artillería y drones.

Pero el sur de frente de Pokrovsk, que en el artículo último también lo definimos como el frente de Kurakhove, también tuvo sus desarrollos. Rusia amplió, a fuerza de embolsar altas concentraciones de tropas ucranianas, sus avances en este sector.

Como se, Rusia ocupó el 50% de Kurakhove, un importantísimo centro logístico y de mando y control para el sur de Donetzk, a la par que avanzó considerablemente desde el sur tras la conquista de Vuledar.

La oportunidad para Rusia de unir el frente de Vuledar con el de Pokrovsk que comentamos en el último artículo, está más que a la vista. Pero también, la caída de Vuledar les permitió un amplísimo desarrollo hacia al noroeste, acercándose mucho a una maniobra de cerco sobre Velyka Novosylka, el último hub logístico de Ucrania en el sureste de Donetzk.

Aquí, como se aprecia en el mapa que adjuntamos, se está comenzando a establecer un cerco sobre Velyka Novosylka. En los últimos días, los rusos hicieron colapsar la defensa ucraniana desde el este, con un avance de unos 60km². No solo se han colocado a las afueras de la cuidad por el este, sino que están cerca de cortar la ruta de suministro que llega desde el norte. Se va prefigurando un cerco como el de Vuledar, que de prosperar, traerá consecuencias para el frente de Zaporiyia.

Por lo visto, en el frente de Pokrovsk, Rusia decidió posponer el asalto a Mirnhograd y Pokrovsk para la primavera, o para cuando el invierno congele el lodo producido por las actuales lluvias y nevadas otoñales. Mientras tanto, está desangrando a Ucrania en el sur y, claramente, apuntan bastante más allá de Kurakhove, en sentido a Andriivka.      

En el resto de los frentes del Donbas, los movimientos no fueron de importancia. En Toresk, hay un palo y palo por distintas posiciones, aunque, recientemente, Rusia ha generado un quiebre importante en el centro y la cuestión pareciera ser de tiempo. Aquí la cuestión es por demás problemática, pues si cae Toresk, no hay detrás grandes fortificaciones o terrenos favorables para la defensa.

En Chasiv Yar, Ucrania contraatacó en el sur, recuperó posiciones y los rusos también volvieron al ataque y, finalmente, ocuparon la totalidad del canal de entrada a la ciudad. Rusia avanzó levemente en el centro de la ciudad, pero el clima lluvioso y que el centro de gravedad pase por otras direcciones, no permiten avizorar grandes maniobras en profundidad en lo próximo en este sector.

Zaporyia

Este frente comenzó a moverse hace unos meses, cuando los rusos iniciaron la lucha para recuperar Robotino y Urozhayne, unas de las pocas posiciones que lograron afianzar los ucranianos con su fallida contraofensiva del año pasado.

En los últimos días, los rusos reactivaron el frente. Están avanzando desde Robotino hacia Orejov. Pero, fundamentalmente, han avanzado en importancia hacia Guliopole, un centro logístico que abastece a la línea de contacto.

Es cierto que Ucrania viene fortificando ampliamente la ciudad de Zaporyia. Sin embargo, las fortificaciones más densas, aquellas construidas desde 2014, son las que están terminando de caer ahora, lo cual pone en cuestión la efectividad defensiva de las nuevas posiciones. 

En un artículo propagandístico subido en Infobae del 17/11, se afirma que no existe posibilidad alguna de que Rusia avance en este frente. Veremos, ya que por lo pronto, es harto evidente que el ejército ucraniano defiende una línea de contacto que está mucho más allá de sus posibilidades operativas.

Hacia el 20 de enero

Tomado este cuadro de conjunto, es claro que la “línea del frente en Ucrania está al borde del colapso” (Sky News 22/11). “Las tropas rusas están avanzando a su ritmo más rápido en dos años mientras Ucrania sufre escasez de mano de obra” (ídem).

De aquí al 20 de enero, cuando se produzca el cambio de mando en EEUU, seguramente no solo veamos escalar la situación entre Ucrania, la Otan y Rusia, sino que también presenciaremos importantes cambios en la línea de contacto.