Rappi en Colombia: que los trabajadores compitan por una vacuna

El director de Asuntos Públicos de Rappi Colombia, Juan Sebastián Rozo, explicó en una entrevista radial que priorizan vacunar “a los que más órdenes entreguen”. Es decir que proponen, sin disimulo, una competencia entre los 40.000 repartidores: quienes acumulen más kilómetros recorridos y pedidos entregados, podrían calificar para recibir una de las 2.000 dosis asignadas mediante el programa vacunatorio de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), una concertación patronal con el gobierno de Iván Duque para que este les regale vacunas y estímulos financieros.

El argumento de Rappi es “beneficiar”, mediante su sistema “meritocrático”, a los más expuestos. Un criterio que no tiene goyete ya que, para ganarse la inmunización, los trabajadores tienen que, primero, exponerse más que antes al virus. Para peor, en un contexto pandémico de 20.000 casos diarios promedio, con la amenaza latente de la circulación de cepas más contagiosas y atravesando una disminución en los pedidos paralelamente a la caída del consumo interno nacional.

A pesar de la grave crisis sanitaria y económica, las plataformas como Rappi o PedidosYa sostienen su lógica perversa de “meritocracia”, es decir, de autoexplotación serial. El sistema de rankings determina la cantidad de pedidos que se otorgan a ese repartidor, la variabilidad del pago tarifario por kilómetro recorrido y la posibilidad de acceder a más turnos de trabajo. Mediante estos rankings, los trabajadores reciben bonos miserables a fin de mes, mientras que las empresas finalizan su año con millones de dólares en ganancias. Ni siquiera son capaces de destinar una parte al cuidado de sus trabajadores.

Pero la organización trabajadora es un síntoma de la rebelión colombiana. Los dichos de Rozo no tardaron en despertar malestar. Desde el Movimiento Nacional de Trabajadores de Plataformas Digitales (MNRPD) y la Unión de Trabajadores de Plataformas (UNIDAPP) se presentó una denuncia pública marcando su carácter anti obrero y exigiendo la inmediata vacunación de todos los trabajadores. Desde la Agrupación de Trabajadores de Reparto (ATR) en Argentina hemos firmado y acompañamos en la difusión de dicha denuncia.

Los repartidores seguimos desarrollando una tarea esencial en distintos países, pero sin recibir inmunización ni los cuidados necesarios. Rechazamos la medida abusiva y extorsiva de Rappi sobre las vacunas. Exigimos a todos los países donde se desarrollen las tareas de reparto bajo aplicación, la vacunación masiva e inmediata de todos los repartidores.