Juventud

29/7/2022

10 y 11 de septiembre

Congreso de la UJS y la JPO: por una salida de la juventud y les trabajadores frente a la crisis

Una instancia de debate estratégico para que la juventud irrumpa, junto a la clase obrera, con un programa propio en el escenario nacional.

La UJS y la JPO realizará su congreso el 10 y 11 de septiembre.

La mesa nacional de la juventud del Partido Obrero y el Polo Obrero resolvió impulsar un congreso nacional como una instancia de movilización y deliberación política de la juventud frente a un escenario dinámico de agudización de la crisis. Queremos debatir con la vanguardia juvenil, con les activistas, la importancia de impulsar una lucha mancomunada con la clase trabajadora para derrotar el ajuste del gobierno y el FMI. Con una perspectiva estratégica: superar al peronismo (agotado históricamente desde un punto de vista progresivo) con la construcción de un nuevo movimiento popular bajo las banderas del socialismo, es decir, que pelee por un gobierno de les trabajadores.

Le dan la llave a Massa, el super ministro del super ajuste

Las contradicciones de la crisis capitalista estallan a cada paso en Argentina. El gobierno de los Fernández se muestra completamente inútil para solucionar las grandes problemáticas nacionales. El acuerdo con los bonistas primero, el acuerdo con el FMI después, no trajeron calma ni estabilidad ni inversiones. Su fracaso rotundo lo demuestra que Guzmán (arquitecto de esos acuerdos) ya no está al frente de Economía ni de ningún ministerio.

En vano, el gobierno ensayó cambios de gabinete que fueron pulverizados al calor de la corrida y la inflación. La llegada del antiderechos Manzur y del asesino de piqueteros Aníbal Fernández y su “volumen político” no les sirvió para nada. Hace algunas horas, en el medio del descontrol económico y la incertidumbre, CFK y Alberto se pusieron de acuerdo y le crearon a Sergio Massa (sí, el Massa amigo íntimo de la embajada yanqui que hace años agitaba “correr a los ñoquis de la Cámpora”) el cargo de “superministro” para que controle las áreas de Economía, Producción y Agricultura. La noticia fue celebrada por el FMI, la embajada norteamericana, el capital financiero y el campo. No es para menos, con la designación de Massa los Fernández vuelven a poner blanco sobre negro que la crisis la van a pagar los trabajadores y la juventud. Los capitalistas pueden dormir tranquilos.

Juventud y precarización

Un fenómeno de la fase actual del régimen capitalista es la tendencia cada vez más acentuada a la fragmentación de la clase obrera a partir de la liquidación de sus derechos laborales y su posterior precarización. La juventud es quien más siente sobre su existencia esta sofocante realidad. El 70% de les jóvenes que trabajan lo hace en el llamado “mercado informal”, esto quiere decir en negro, sin derechos laborales. Todos trabajos que tienen salarios de miseria. Pero, además, son millones los que sufren el desempleo y subsisten únicamente con algún tipo de “ayuda social”. Según un informe del Indec, uno de cuatro jóvenes no estudia ni trabaja producto de las políticas expulsivas que abarca el mundo del trabajo y el de la educación.

La reciente campaña de Patria Grande por el derecho a comer y por el “salario básico universal” de $14.000 (un monto paupérrimo que no alcanza para nada y que le pone un piso de miseria al salario) intenta disimular el ajuste del gobierno que integran. Frente a la pobreza que sigue creciendo levantan este planteo que generaliza la miseria en lugar de luchar por un seguro al desocupado equivalente al salario mínimo y que este sea de $105 mil. Pero, además, Patria Grande maquilla la precarización laboral bajo la máscara de “economía popular”, en vez de reclamar que haya trabajo bajo convenio para todes.

Vienen por la educación pública…

En el plan general de ajuste del gobierno el presupuesto educativo es de las principales víctimas. Recientemente, Batakis planteó que avanzarían sobre los presupuestos subejecutados para promover el ahorro fiscal. De esta forma, se recortarían $51 mil millones a las universidades. Las tijeras de la exministra de Economía, ahora presidenta del Banco Nación, representan una tendencia general de la clase capitalista contra la universidad y la educación pública en general para la próxima fase de la crisis.

En el día a día el recorte presupuestario profundizará todos los problemas existentes como falta de becas, oferta horaria paupérrima, edificios en malas condiciones, salarios docentes por debajo del costo de vida y miles de adhonorem. La tendencia a privatizar y corroer paso a paso las carreras de grado con la creación de posgrados arancelados se intensificará. La búsqueda de los rectorados y decanatos por obtener “recursos propios” para engrosar el presupuesto tiene como destino un copamiento mayor de las universidades por parte de los capitalistas, alineando la ciencia a sus intereses espurios y alejándola aún más de las necesidades del pueblo.

Las federaciones y coordinadoras estudiantiles que deberían impulsar la lucha en defensa de la educación pública no lo hacen porque son parte del ajuste. Están integradas al Estado, algunas son conducidas por el peronismo (FULP), otras por el macrismo (FUA, FUBA). Les estudiantes necesitamos recuperarlas para ponerlas al servicio de estas peleas.

…Y el ambiente

Avanzar en la colonización de los recursos estratégicos del país está en las prioridades del imperialismo yanqui como también de China y Rusia. Recursos naturales en el lenguaje empresarial significa enormes ganancias económicas. Para los pueblos significa destrucción de su suelo, opresión y mayor colonización. Los gobiernos alineados con el FMI como el del FDT o la variante derechista de JxC no dudan en entregarlos. Defienden sin demasiados tapujos la explotación y destrucción de nuestro suelo para que “entren dólares” como dijo Cabandie, el ministro de Ambiente. La pelea por estos recursos y la defensa del ambiente recién empieza y solo puede prosperar si avanza la organización independiente del movimiento ambiental en unidad con les trabajadores.

La derecha huele sangre

El deterioro de las condiciones de vida continúa rompiendo las ilusiones que muchísimos jóvenes y trabajadores depositaron en la fórmula presidencial Fernández-Fernández en el año 2019. La derecha macrista, responsable de la catástrofe social de 2015 a 2019, levantó cabeza y se prepara, con los colmillos afilados, para gobernar el año que viene, luego de que el gobierno actual haga el trabajo sucio para ellos rematar al pueblo con un shock de ajuste. Para que esto no ocurra somos les jóvenes y trabajadores quienes debemos tomar la posta y desarrollar una salida propia frente a la crisis. Una salida derechista solo traerá aún más ajuste, hambre, más perdidas laborales y de derechos en todos los frentes.

Ni hablar de la aparición de los Milei-Espert en el escenario político. Esos prototipos de fachos intentan, desde una verborragia prepotente y desafiante, mostrarse como “anti-sistemas” para ganarse la adhesión de les jóvenes que genuinamente se cansaron de quienes nos vienen gobernando desde hace décadas. Pero no caigamos en la trampa: los Milei son los más fieles representantes del sistema capitalista. Defienden al FMI, promueven una reforma laboral que beneficie a los empresarios y reivindican a la policía que reprime a la juventud. Para ellos todo es un negocio. Si Milei está a favor incluso de la venta de órganos y hasta de niños, no hace falta que nos imaginemos lo que haría con la educación y la salud pública. Son antiderechos que celebran la prohibición del aborto en EE.UU. Además de todo, Milei declaró que, si llegara al gobierno, Patricia “Chocobar” Bullrich y Mauricio Macri tendrían cargos honorables. Son la casta con todas las letras.

Construyamos un movimiento popular con banderas socialistas

La crisis actual que vive nuestro país no es patrimonio de un gobierno particular, sino de una clase social de conjunto para la cual gobernaron todos: la clase capitalista. Su resolución no puede estar en manos de los mismos actores con las mismas políticas de siempre. Salir de la crisis significa imponer un programa que defienda los intereses de la clase trabajadora, las mujeres y la juventud, que somos, en definitiva, las grandes mayorías.

Nuestro programa parte de requisitos muy concretos: hay que romper con el FMI y no pagar la deuda ilegítima. Nacionalizar bajo gestión de les trabajadores el comercio exterior, el sistema bancario y los recursos naturales estratégicos, para terminar con la remarcación de precios, la fuga de los dólares y poner el ahorro nacional en pos de un desarrollo industrial amigable con el ambiente y resolver las necesidades sociales de vivienda, salud y educación. Aumento general de salarios por encima de la inflación, con un salario mínimo de $105 mil y el 82% móvil para les jubilades. Para pelear por este programa es indispensable la irrupción de la clase obrera ocupada y desocupada junto a la juventud, bajo las banderas del socialismo.

El Partido Obrero y nuestra juventud se encuentran en esta tarea apasionante. Con el Polo Obrero organizando en las villas y barriadas de todo el país la pelea contra el hambre y el ajuste, por el derecho a la vivienda y para que en los barrios se viva dignamente. En los lugares de trabajo peleando por echar a la burocracia sindical que entrega a les trabajadores, luchando por el aumento del salario real y contra la prepotencia laboral como están haciendo los obreros del SUTNA en una lucha heroica con la cual nos sentimos hermanados. En los lugares de estudio, poniendo los centros de estudiantes que dirigimos y la enorme juventud piquetera organizada con la JPO a disposición de impulsar un plan de lucha nacional, que, a fines de agosto, ganará las calles con una enorme movilización educativa votada en el plenario educativo que convocamos cuando finalizaba el primer semestre.

Estas peleas las damos en función de colaborar en desenvolver una vanguardia de jóvenes estudiantes y trabajadores que se prepare para los enormes combates que tenemos por delante contra el Estado capitalista y sus gobiernos. Argentina, más temprano que tarde, entrará en el compás de rebeliones que conmueven América Latina. Invitamos a les jóvenes a participar de nuestro congreso para preparar los enormes acontecimientos históricos que nuestra generación tiene por delante.