La crisis política generada a partir del motín policial de la semana pasada deja conclusiones de fondo que la juventud debe observar en detalle. La rapidez con la que la Bonaerense recibió un salariazo del 40% con un 300% de aumento a las horas extras contrasta con el tiempo que vive la juventud trabajadora. Solamente el 10% de la clase trabajadora “formal” tuvo paritarias, en un país en el que se prevé un 45% de inflación.

Pero no solamente hablamos de una cuestión salarial. ¿Por qué el gobierno actúa con semejante rapidez, reculando frente a los pedidos de dinero y de impunidad de la fuerza responsable, por ejemplo, de la desaparición forzada de Facundo Castro?

La respuesta es sencilla: frente a la crisis económica y social que vive la Argentina, para hacer pasar el ajuste, el gobierno necesita reprimir. Ya se vio a finales de la semana pasada, por ejemplo, en Ciudad Evita, y se vislumbra con la orden de desalojo para la toma de Guernica para fines de septiembre. Las tomas de tierras muestran, en todos lados, una profunda raigambre juvenil, lo cual a tono con la situación tiene pleno sentido: esta política y este sistema no tiene ni para asegurarle un lugar para vivir a les más jóvenes.

Mientras esto sucedía, organizaciones del espectro “progresista” del albertismo (como Patria Grande) agitaron un fantasma golpista y amagaron con hacer una suerte de movilización de antorchas. Los mismos que plantean en las facultades que no hay que salir a las calles, que no se movilizaron por Facundo Castro, mostraron verdaderamente sus intenciones. Su función es “contener por izquierda” a un gobierno que defiende a capa y espada a Berni, que venera a la Policía mientras ataca a los organismos de Derechos Humanos. Para defender a la juventud y a lxs trabajadorxs, Grabois, Hagman y compañía se quedan en casa.

Esto deja una conclusión política de fondo: la juventud o está con Berni, el gobierno y la Policía o se planta contra la represión. El Plenario Nacional Antirrepresivo del próximo sábado, convocado entre otras organizaciones por la Asociación de Profesionales en Lucha (Apel) será un ámbito de reagrupamiento de quienes nos encontramos en el segundo campo. La UJS invita y convoca a la juventud para desenvolver a fondo estar perspectiva.

 

 

Plata para las balas, no para la educación

El aumento de sueldo a los efectivos de la Bonaerense estuvo ligado a los anuncios del viernes 4, en los que el gobierno nacional en conjunto con el provincial (con Berni en la primera fila) anunciaron un paquete de 37.700 millones para avanzar en la represión.

El mismo día, posiblemente con menor repercusión mediática, de manera virtual se juntaron los representantes del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), en un plenario nacional de rectorxs. Invitaron, a su vez, al secretario de Políticas Universitarias (SPU) Jaime Perczyk. El dato curioso es que, en 2019 (cuando el propio Perczyk era titular del CIN) le pidieron al entonces gobierno de Macri una partida de 248 mil millones de pesos, mientras que en esta reunión, un año después con una inflación del 45%, pidieron menos: 242 mil millones. Es decir, quienes dirigen las universidades se ponen al frente, junto al gobierno, de adaptar el presupuesto universitario a los intereses del FMI. Todo, mientras la educación superior funcionó, en los primeros meses de 2020, con un presupuesto votado en diciembre de 2018 -es decir, que se deterioró un 70% en cuanto a la inflación. Es lo que sufrieron les miles de estudiantes que en todo el país quedaron fuera de la cursada y les docentes, cuya precarización laboral se profundizó.

La otra cara de la misma moneda del ahogo presupuestario a la educación es el ajuste propiamente dicho, en conjunto con la privatización de la cartera educativa. Por eso a nadie debe sorprender que en los últimos días Horacio Rodríguez Larreta haya avanzado en la implementación de la Unicaba en la Ciudad. Como dijimos en Prensa Obrera (11/9): “(Ésta) está escrita, de puño y letra, por organismos internacionales de crédito como la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), que está interesada en la venta de plataformas digitales para educación y el negocio de los posgrados arancelados que posibilitará la Unicaba”. A su vez, pavimenta el terreno para el cierre de 29 institutos en la Capital Federal. El discurso de la modernización es verso. Si eso no es ajuste, no sabemos qué sí lo es.

En conclusión, el gobierno y la oposición derechista han definido sus prioridades. Plata para represión por el ajuste que se viene, por un lado. Disposición de los recursos de la educación a los intereses del FMI. Más claro, imposible.

 

Vamos al Congreso de la UJS

Los hechos ocurridos en la última semana refuerzan el planteo a partir del cual hemos puesto en pie el Congreso de la UJS: la necesidad de la juventud de organizarse de forma independiente, tanto del gobierno como de la oposición patronal, para luchar contra la represión, contra los planes fondomonetaristas para la educación, contra la precarización laboral y en defensa de quienes luchan por tierra y vivienda.

En ese sentido, la campaña para el Congreso va a todo motor. Arrancó con las exitosas charlas “Pongamos de pie al movimiento estudiantil”, “La lucha ambiental en tiempos de pandemia” y “La represión y el gatillo fácil contra la juventud. Una política de Estado”. Continuará en su última etapa con dos instancias de extrema importancia: una charla sobre los desafíos de la juventud trabajadora, que contará con la presencia de Romina Del Plá, y otra sobre la vigencia de la lucha por el aborto legal, con Vanina Biasi.

A su vez, hay decenas de actividades y plenarios de todo el país, como el de Rosario y el de Santa Cruz que se llevarán adelante el fin de semana; como el de Secundarios de la Ciudad y provincia de Buenos Aires, y el de Terciarios de zona norte de la provincia, que tuvo lugar el sábado pasado. Mientras tanto, la UJS participará con fuerza del Plenario Antirrepresivo Nacional. Como en todo el país, los talleres ESI son un éxito, como lo demuestra la actividad de tal sentido en Misiones. Las reuniones abiertas que se realizarán el sábado en Córdoba muestran un punto crucial, ya que profundizarán la articulación de la campaña entre la UJS y la juventud del Polo Obrero.

En ese sentido, es la propia campaña la que comprueba el planteo de fondo. La lucha para separar a la juventud de cada una de las variantes patronales es el único camino para poder pelear genuinamente por sus intereses. El congreso ofrece un canal para les jóvenes en tal sentido. Estamos donde tenemos que estar.