Caso Joaquín Paredes: dos años de impunidad

Se cumple segundo aniversario del gatillo fácil ocurrido en Paso Viejo.

Justicia por Joaquín.

El gatillo fácil contra Joaquín Paredes -joven de 15 años- ocurrido el 25 de octubre del 2020 sacudió a la provincia de Córdoba. El caso dejó en el ojo de la tormenta a la policía de Juan Schiaretti, que continúa en crisis.

Joaquín festejaba con sus amigos un cumpleaños cuando la policía los acorraló y disparó 119 balazos con armas largas contra los jóvenes, hiriendo a dos y matando a Joaquín. El crimen se produjo meses después del asesinato de Blas Correa, también a manos de las fuerzas de (in)seguridad, lo que expresó todavía más cabalmente el cuadro de descomposición policial.

Lo que vendría después sería expresión de un aparato policial represor y encubridor. Los policías no fueron imputados hasta después de un largo tiempo. La familia denuncia la persecución y hostigamiento por parte de la policía, incluso tres de los cinco policías implicados aún están en libertad.

Soledad, madre de Joaquín, comentó a Prensa Obrera: “Hoy se cumplen dos años del asesinato de mi hijo. Pasan tan rápidos los días, meses, años, y nosotros aquí seguimos con el mismo dolor desde ese maldito 25”. “Tengo que estar de pie para seguir pidiendo justicia por Joaquín. Hoy solo queda recordarlo como él era, un niño alegre con esa hermosa sonrisa que tenía en su rostro”, agregó.

Las últimas novedades se dieron por abril de este año cuando la fiscalía de Cruz del Eje ordenó avanzar en el juicio. Pero a la fecha no hay noticias al respecto. “Fecha de juicio ya” es la consigna que la familia levanta a dos años del asesinato. Además no dejan de denunciar a la Policía de Córdoba.

Cabe recordar que los policías implicados están acusados por homicidio agravado por el uso de arma de fuego; tentativa de homicidio calificado; y abuso de armas. Varios de ellos deberán ir a juicio oral en libertad, según lo resolvió la Justicia.

El gobierno ensayó una respuesta fallida cuando luego del gatillo fácil estableció un protocolo de actuación policial que no significó cambio alguno en la situación represiva de la provincia.

La familia de Joaquín, junto a otres familiares de víctimas de la represión estatal, sostiene una tenaz lucha para conquistar justicia, por eso son parte de las jornadas de movilización, como lo fue la marcha nacional contra el gatillo fácil. Además, ahora con la Marcha de la Gorra a la vuelta de la esquina su reclamo de justicia estará en primera fila. La movilización popular es el camino.

El Partido Obrero plantea la necesidad de luchar por elección popular de jueces y fiscales, para terminar con las dilaciones y la impunidad reinante en la Justicia. Acompañamos a la familia en el reclamo de justicia. Gatillo fácil nunca más.