Miramar: un nuevo caso de gatillo fácil a manos de la Bonaerense de Kicillof

Justicia por Luciano Olivera, de 16 años.

En la madrugada del viernes 10 de diciembre en la localidad balnearia de Miramar la policía Bonaerense asesinó de un tiro en el pecho a Luciano Olivera, de 16 años y estudiante de tercer año de la Media 1.

Luciano estaba en la calle jugando a la pelota con los amigos cuando los persiguieron al menos seis efectivos. La versión policial fue que la persecución era para identificarlos, aunque no había denuncias ni situaciones que lo justificaran. Maximiliano González, el policía que disparó, se encuentra detenido y declaró que “se le escapó el tiro”.

La tía de Luciano comentó a los medios que “la policía siempre está re drogada persiguiendo a los pibes, están patrullando drogados. El policía (González) lo conocía porque vivían en el mismo barrio, a menos de cinco cuadras. Acá la gente le tiene miedo a la policía, por eso no quiero hablar más”.

Horas después del hecho familiares y amigos se dirigieron a la comisaría para averiguar lo ocurrido, y allí fueron reprimidos con balas de gomas, resultando herida la madre y un periodista. Al mediodía, vecinos y vecinas siguen concentrándose en las puertas de la comisaría repudiando lo ocurrido y denunciando distintos atropellos policiales que son moneda corriente en Miramar y toda la zona.

La conmoción obligó a suspender el acto de asunción de los nuevos concejales en el distrito. La Bonaerense fue apartada de la investigación y la causa está en manos de la fiscal local Ana María Caro. Antonio Centurión, subsecretario de Seguridad de General Alvarado, afirmó que se están desenvolviendo las pericias toxicológicas a González, aunque aún no se sabe cuántas horas dejaron pasar desde los hechos hasta la toma de las muestras. Incluso medios nacionales de comunicación, como TN, advierten el mal desempeño de los peritos que recogieron las pruebas sin guantes.

Por eso, solo la organización popular podrá imponer justicia para Luciano y cárcel para los responsables. Este caso de gatillo fácil sucede a horas de conocerse la autopsia de Alejandro Martínez, asesinado a golpes por la policía del Partido de La Costa; y luego del asesinato de Lucas González por la policía porteña que conmocionó a toda la población durante los últimos días.

El crimen de Luciano responde a un patrón común de amedrentamiento y persecución a los pibes en la calle con la excusa de identificarlos sin motivo alguno. Patrón común de la provincia de Buenos Aires, CABA y todo el país: fuerzas de seguridad en permanente descomposición vinculada a las redes delictivas y del narcotráfico.

Desde el Partido Obrero acompañamos la movilización convocada por la familia para hoy a la tarde en reclamo de justicia. Llamamos a organizarnos en cada barrio contra todos los atropellos de la policía que persigue y asesina a nuestros pibes y contra la política de criminalización de la juventud que une a todas las fuerzas patronales. El diputado provincial del Frente de Izquierda, Guillermo Kane, anticipó que presentarán una interpelación a Sergio Berni para que el gobierno rinda cuentas sobre lo sucedido.

Basta de gatillo fácil. Por el desmantelamiento del aparato represivo del Estado. Fuera Berni, abajo el reforzamiento represivo de Kicillof.